1 / 9

Lucio Anneo Séneca

Lucio Anneo Séneca. Filósofo y pensador español más destacado del Imperio Romano. Introducción.

kato
Download Presentation

Lucio Anneo Séneca

An Image/Link below is provided (as is) to download presentation Download Policy: Content on the Website is provided to you AS IS for your information and personal use and may not be sold / licensed / shared on other websites without getting consent from its author. Content is provided to you AS IS for your information and personal use only. Download presentation by click this link. While downloading, if for some reason you are not able to download a presentation, the publisher may have deleted the file from their server. During download, if you can't get a presentation, the file might be deleted by the publisher.

E N D

Presentation Transcript


  1. Lucio Anneo Séneca Filósofo y pensador español más destacado del Imperio Romano.

  2. Introducción • Mi nombre es Lucio Anneo Séneca. Hijo de Marco Anneo Séneca el Retórico. Nací en Córdoba en el año 4 A.C. Mi familia se marchó a Roma y allí acabé mi formación de retórico, jurista y filósofo. Me dediqué a la abogacía, destacándome como orador.

  3. Hispano Romano • Yo provengo de la Hispania Citerior, la primera división provincial en la zona este. Pertenezco a una familia acomodada de la provincia Bética del Imperio Romano. Nací durante el reino del Emperador Augusto y viví durante la vida de Jesús el Nazareno. Durante mi vida la península íberica estaba completamente romanizada.

  4. Mi Filósofia • Yo soy filósofo de la stoa o filosofía estoico. Mis preocupaciones fundamentalmente siendo las éticas. Tanto que se ha querido establecer ua conexión entre mi filosofía y el cristianismo, atribuyéndome una correspondencia con el apóstol San Pablo. Yo soy un filósofo práctico más que un teórico o un sistemático. De mi filosofía surge un eclecticismo de carácter moralista preocupado mas con la enseñanza moral y un consuelo para la vida. La ética ha de servir para buscar el consuelo a los males de esta resignación ante el dolor y la muerte.

  5. Sobre La Muerte • Ningún mal es grande si último”. (Cartas, 4.3) Una muerte serena y pacífica debe coronar la vida entera si es posible. Una muerte angustiosa y resentida puede devaluar o borrar todos los recuerdos buenos. La divinidad nos ha hecho inteligentes, lo que lleva consigo la conciencia amarga de la mortalidad, pero también la alegría de poder escapar de la necesidad y del dolor irremediable. El suicidio  es eulogos exagoge, que quiere decir “la salida razonable”. La muerte voluntaria es, pues, un acto de razón. La buena muerte (euthanasia) es un don de los dioses y la muerte más humana. 

  6. Sobre el Ser Humano • El hombre es como una “vasija rota por el más leve choque, la más leve sacudida”, “un cuerpo débil y quebradizo” (A Marcia 11.3). Porque vivir es morirse día a día y nos equivocamos en eso de ver la muerte como algo futuro: gran parte de ella ya ha trascurrido (Cartas, 1.2). Ha muerto en nosotros el niño y el joven que fuimos (A Marcia, 21.7). En cada acción el hombre debe tener en cuenta la muerte (Cartas, 114. 27). La muerte trae al hombre libertad, seguridad, eternidad (A Polibio, 9.6-7). Pero con la muerte todas las cosas acaban, incluida la muerte misma (Fr. 28), y ningún mal resulta grande entonces si ella es el último de todos (Cartas, 4.3). 

  7. Mas Sobre el Hombre • A pesar de que los hombres no paran de quejarse de la brevedad de la vida, son ellos solos los verdaderos culpables de acortarla con su desidia y sus vicios. Desperdiciamos el tiempo y no lo consideramos el bien mayor y único. El tiempo de la vida es bastante si se sabe aprovechar. “No tenemos tiempo escaso, sino que perdemos mucho” (1.3). Los ociosos temen más la muerte. Los ocupados no podrán eludirla:"¿Qué va a pasar? Tú no tienes tiempo para nada y la vida corre; entretanto llega la muerte y para ella, quieras o no quieras, vas a tener todo el tiempo del mundo”(8.5). 

  8. Mi Vida Pública • Mi fama, sin embargo, le disgustó a Calígula, quien estuvo a punto de condenarme en el año 39. Al subir Claudio al trono, en el año 41, fuí desterrado a Córcega, acusado de adulterio con una sobrina del emperador. Ocho años más tarde fuí llamado de nuevo a Roma como preceptor del jóven Nerón y, cuando éste sucedió a Claudio en el año 54, me hicieron uno de sus principales consejeros, cargo que conservé hasta que, en el año 62, viendo que mi poder disminuía, me retiré de la vida pública.

  9. Mi Muerte • En el año 65 fuí acusado de participar en la conspiración de Pisón, con la perspectiva, de suceder en el trono al propio Nerón. Nerón me ordenó a suicidarme, decisión que adoptó como liberación final de los sufrimientos de este mundo, de acuerdo con mi propia filosofía.

More Related