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Mañana celebraremos la fiesta de la Virgen del Pilar, por eso la oración de esta mañana va girar en torno a la Virgen María. Vamos a contemplar la actitud de la Virgen ante el hecho de que fue elegida para ser Madre de Dios. María, la de Jesús.
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Mañana celebraremos la fiesta de la Virgen del Pilar, por eso la oración de esta mañana va girar en torno a la Virgen María. Vamos a contemplar la actitud de la Virgen ante el hecho de que fue elegida para ser Madre de Dios.
María, la de Jesús Música: Domingo PérezPintura: Isabel Guerra y Goyo Domínguez Avance automático
Ay Dios, no lo entiendo HÁGASE TU VOLUNTAD mas, si Tú lo quieres
Mi Dios, ¿qué has visto? Si estoy desposada con José, celoso de la Ley sagraday pobre también. ¿Acaso me pides que te ame a Ti sólo?
Ay Dios, no lo entiendo HÁGASE TU VOLUNTAD mas, si Tú lo quieres
¿Acaso es tan fuerte y tan limpio que cabe tu Hijo, mi Dios?
Ay Dios, no lo entiendo HÁGASE TU VOLUNTAD mas, si Tú lo quieres AVANCE MANUAL
ANÁLISIS • María ante su ser humilde se pregunta si es digna de ser la Madre de Dios. • Evoca a lo largo del canto como se siente al ser designada por Dios como madre de su Hijo Jesús.
INTERIORIZACIÓN • Reflexiona y comenta estas palabras de María: Mi Dios, ¿qué has visto, si yo soy tan pobre? • ¿Acaso mi casa pequeña y humilde de adobes y paja? ¿Acaso mi mesa sin caldo y sin pan? ¿Tan pobre y me quieres? • Para Dios lo que importa es la bondad y la humildad de corazón, para que acojamos todo lo que El nos pide. No le importa si somos ricos o tenemos muchas cosas, lo que importa es nuestra disponibilidad para aceptar su voluntad. • ¿Nuestro corazón está dispuesto cómo el de María la de Jesús.?
EXPRESIÓN Y COMPROMISO Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia como lo había prometido a nuestros padres- en favor de Abrahán y su descendencia por siempre.