80 likes | 281 Views
E n este Salmo - el más breve del Salterio - todas las naciones son invitadas a alabar al Dios de Israel (v. 1), por el inmenso amor que tiene hacia su Pueblo (v. 2).
E N D
En este Salmo - el más breve del Salterio - todas las naciones son invitadas a alabar al Dios de Israel (v. 1), por el inmenso amor que tiene hacia su Pueblo (v. 2). Estos dos elementos definen el “universalismo” del Antiguo Testamento en sus rasgos más esenciales, al poner de manifiesto la función mediadora de Israel en la salvación de todos los pueblos.
1. CON ISRAEL La estructura de este corto salmo es clara: una invitación hecha a todos los hombres de la tierra: "¡alabad! ¡celebrad! -como respuesta, la expresión del contenido de esta alabanza: "Sí, grande es su amor, su fidelidad eterna". 2. CON JESÚS Este salmo, debía repetirlo Jesús a menudo. Dada su brevedad, ¿por qué no lo recitamos de memoria? Expresa lo esencial de nuestra fe … Dios amor fiel, es uno de los temas esenciales del pensamiento de Jesús: la revelación de Dios como "Padre nuestro" está en la misma línea de este salmo. 3. CON NUESTRO TIEMPO No hay más que un solo Dios. No puede haber más que uno solo. Y esto, aunque en la actualidad, los hombres den nombres diferentes al Dios que adoran, de hecho todos los pueblos, todos los países "están destinados a alabar y celebrar al mismo Dios, y a El, el único, honran con sus variados cultos, en todo el mundo. De allí el respeto que debemos tener por cualquier forma de expresión religiosa.
Alabad al Señor, todas las naciones,aclamadlo, todos los pueblos.
Firme es su misericordia con nosotros,su fidelidad dura por siempre.
BREVE PLEGARIA La oración no es larga por necesidad; y, si siento de veras lo que rezo, la intensidad del sentimiento puede compensar con creces la brevedad de la plegaria. Pongo en mi oración una palabra de alabanza, la presencia del grupo y el horizonte de la humanidad entera, mi fe en la misericordia de Dios y la fidelidad de su promesa de salvación... y surge la oración perfecta. «Alabad al Señor todas las naciones, aclamadlo todos los pueblos: firme es su misericordia con nosotros, su fidelidad dura por siempre».
Señor Dios, a quien alaban todas las naciones y aclaman todos los pueblos, te pedimos humildemente que tu fidelidad para con nosotros dure por siempre y tu misericordia alcance todas las naciones. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén.