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LOS ECOSISTEMAS COSTEROS Y EL CAMBIO CLIMATICO.
E N D
La protección del medio marino debería ser un objetivo central del País, tomando en cuenta su gran riqueza, importancia socio-económica, y posibilidades de desarrollo futuro. En este marco deberían incluirse la protección de los ecosistemas costeros y marinos contra los efectos adversos de la contaminación, para asegurar una utilización sostenida de sus recursos así como la salud de sus usuarios. La degradación continua del ambiente marino puede llegar a producir daños a la salud humana, a través de la contaminación de alimentos de origen marino, y el contacto directo y/o ingestión de agua de mar contaminada.
La mayor parte de la Tierra está cubierta por agua, equivale al 70% de la superficie del globo terrestre y casi toda ella es parte de los océanos. Los océanos son de dimensiones iguales o superiores a un continente. Los mares son cuerpos de agua más pequeños de agua salada. Los océanos juegan un papel importante en el clima y en tiempo meteorológico. El agua toma calor del sol y lo reparte por todas partes del mundo por medio de corrientes océanicas.
LA ZONA LITORAL • La zona litoral o costera es la parte de la plataforma continental más cercana a tierra firme. Representa la interfase de los 3 grandes medios del planeta (Atmósfera, Hidrósfera y Litósfera) por lo que presenta características muy peculiares, como por ejemplo, los cambios del nivel del mar o mareas y la erosión, que depende entre otros factores de la dirección del viento, de los materiales geológicos que forman la costa, de la intensidad de las mareas y corrientes, de la orientación de la propia costa, etc. Todos estos factores hace que cada zona costera presente características muy particulares.
LA ZONA LITORAL • Abarca el 10% de la superficie oceánica total e incluye una serie de biotopos más pequeños: costa propiamente dicha (playa y sustrato rocoso), humedales, dunas, estuarios, etc. La longitud de las costas del planeta es de unos 150.000 km. • En estos medios hay gran actividad biológica, ya que el dominio continental aporta regularmente nuevos materiales a estas zonas limítrofes del mar. Existe una alta productividad primaria debida sobre todo al fitoplancton y a las algas. Por el contrario, también son zonas en las que se acumulan desperdicios y restos que producen contaminación ambiental (petróleo, vertidos de residuos sólidos, nutrientes, etc.).
TIPOS DE COSTA • Aunque no hay dos trozos de costa exactamente iguales, se pueden hacer generalizaciones que nos permitan utilizar características fácilmente apreciables para definir modelos elementales del perfil litoral como el tipo de erosión básico, los movimientos epirogénicos que las formaron, el sustrato rocoso dominante o la fuerza del oleaje y del viento. Esto nos da: • Costas de Emersión: cuando se forman por elevación de la costa con respecto al nivel del mar, lo que provoca la elevación de la plataforma continental y el consiguiente alejamiento de la orilla de la zona de acantilado. Sería el caso de la costa Sahariana. • Costas de Inmersión: cuando se forman por un descenso de la costa y el correspondiente avance del mar hacia el interior. Estamos en el caso de las Rías Gallegas (ascenso del mar por los valles fluviales) y de los Fiordos Noruegos (ascenso del mar por los valles glaciares)
TIPOS DE COSTA (SEGÚN EL SUSTRATO DOMINANTE) • Costas Rocosas: su configuración puede ser muy variable en función del tipo de roca que las conforme; su perfil varía también con la estratigrafía (si es inclinada, aparecerán muchas grietas y charcas). • Costas Arenosas: se forman por la acumulación de grandes cantidades de granos, generalmente de cuarzo, y su configuración depende básicamente del tamaño de dichos granos y de la exposición a la acción de vientos y olas. • Costas Fangosas: se forman por acumulación de partículas minerales mucho más finas mezcladas con diversos restos orgánicos; para que el fango se acumule, la costa ha de ser prácticamente llana. Este tipo de costa aparece muy a menudo en zonas de estuarios.
SEGÚN EL GRADO DE EXPOSICION AL VIENTO Y A LAS OLAS • Costas Expuestas: son generalmente zonas de acantilados poco protegidas, en las que el mar y el viento baten con fuerza; las olas no encuentran freno a su avance y llegan a alcanzar varios metros de altura. • Costas Semiexpuestas: son aquellas en las que las olas no rompen con tanta fuerza ya que están más abrigadas y el efecto del viento es mucho menor. • Costas Protegidas: aparecen en lugares muy abrigados y rodeados de grandes rocas, por lo que la acción del viento y de las olas está muy debilitada.
ELEMENTOS DEL LITORAL • Las playas y las costas rocosas son las dos típicas formaciones costeras de transición entre la tierra y el mar. Unas u otras se formarán en función de factores como la acción conjunta de olas y corrientes marinas o la geología y la propia topografía costera.
LAS COSTAS DE ARENA • Son costas arenosas, generalmente bajas donde dominan los procesos de acumulación de sedimentos. El sedimento arrastrado por las corrientes marinas es depositado a lo largo del litoral en zonas en las que los efectos de las corrientes están más atenueados. Estos sedimentos están constituidos principalmente por arenas, limos y gravas. Las formaciones más características de estas zonas son las playas, las dunas y cordones dunares y los humedales costeros. La formación de los cordones dunares es un complejo mecanismo de arrastre y fijación de los sedimentos de origen marino. El transporte sedimentario de las arenas secas en la orilla del mar se produce por la acción de los vientos existentes en la costa.
COSTAS ROCOSAS Y ACANTILADOS • Es muy importante el tipo de roca que exista, pues en función de su naturaleza y del tipo de pendiente al mar, actuará de diferente manera la erosión, con lo que se verá condicionado el hábitat y, por lo tanto, la vida que allí se desarrolle. La roca formada por materiales más o menos blandos, suelen cobijar un número abundante de seres vivos en la roca dura.
ZONA COSTERA : CONCEPTUALIZACION Y DELIMITACION • La definición de la zona costera parte de reconocer que el término “costero” refiere a la relación mutua tierra – mar, que se extiende a lo largo de dos ejes. • Uno paralelo a la orilla denominado “eje litoral”, y • Otro perpendicular a la orilla denominado “eje tierra – alta mar”.
ZONA COSTERA : CONCEPTUALIZACION Y DELIMITACION • La zona costera se conceptualiza como un área sin límites bien establecidos, localizada entre el mar abierto y la superficie terrestre. Sin ser solo mar o tierra, es una zona de intensas interacciones físicas, ecológicas y sociales, es la proporción de tierra afectada por el mar y a la vez la parte del océano que es afectada por su proximidad a la tierra. • En la práctica esta zona puede incluir una franja angosta alrededor de la interfase tierra – mar sobre el orden de unos cientos de metros a unos pocos kilómetros o como una extensión de la zona costera inundable hasta el límite de la jurisdicción nacional de aguas oceánicas.
LA ZONA COSTERA • El promedio mundial del ancho de esta área es calculado en 60 kilómetros. Esta zona ocupa menos del 15% de la superficie terrestre del planeta y sin embargo acoge el 60% de la población mundial. • Como resultado, las zonas costeras está marcadas por concentraciones de personas y de actividades económicas superiores al promedio. Por otra parte, se trata de áreas que pueden definirse como un complejo dinámico e interactivo de subsistencias, y por esta razón, las variadas zonas que las integran no pueden ser consideradas aisladamente.
Los ecosistemas estuariales, costeros y marinos del Uruguay están incluidos en el Gran Ecosistema Marino de la Plataforma Patagónica, o Mar Patagónico que se extiende desde el Sur de Brasil, Uruguay hasta el Estrecho de Magallanes con un área total de aproximadamente 2.7 millones de kilómetros cuadrados y está influenciada por dos corrientes (Malvinas y Brasil), dándole a este Gran Ecosistema Marino un límite ecológico distintivo hacia el Este y características únicas. • Ecosistemas costeros y marinos de Uruguay: se encuentran asociados fundamentalmente a las costas del Río de la Plata, con una extensión de 452 km y del Océano Atlántico 228 km. Entre estos escosistemas se destaca un sistema de lagunas costeras (José Ignacio, Garzón, de Rocha y de Castillos) ubicado en la Cuenca Atlántica, que se continúa hacia el sur de Brasil (Río Grande del Sur).
En nuestro país, a largo de la zona costera se asienta un importante número de centros urbanos, incluyendo la capital, y aproximadamente el 70% de la población del país vive en los departamentos costeros del sur. El área metropolitana representada por Montevideo, Canelones y San José concentran la mayoría de la población, y la mayoría del PBI. • La zona costera uruguaya juega un rol fundamental en la economía nacional. Una proporción sustancial del Producto Bruto Interno del país (77,6%) se genera y depende de las actividades desarrolladas en los departamentos costeros (Ecoplata, 2001).
Las principales actividades económicas dependientes de la zona costera se relacionan con el turismo nacional e internacional, la pesca industrial y artesanal, la construcción con fines residenciales y comerciales, la navegación y los servicios portuarios. • El turismo es, notoriamente la actividad costera que genera mayores ingresos al país. La presencia de Uruguay como destino turístico muestra una imagen sumamente ligada a la oferta de la costa. Cada año, los balnearios de la costa uruguaya atraen a cientos de miles de visitantes de la región y de otras partes del mundo.
En el año 2001, ingresaron al país un total de 2.136.446 turistas, de los cuales casi el 70% se dirigió a las áreas costeras. Los ingresos por concepto de turismo en dicho año ascendieron a U$S 560.700.000 (INE, 2004), aproximadamente un 3% del PBI del país.
La experiencia confirma la hipótesis de que la mayoría de los conflictos y problemas físicos que se observan en las zonas costeras puede atribuirse a fallos de los procedimientos, la planificación, las políticas y las instituciones, y muchos al desconocimiento de la importancia estratégica desde el punto de vista social y económico de una gestión sostenible. • Las zonas costeras son complejas y se ven influidas por muchas fuerzas y presiones interrelacionados como son los sistemas hidrológicos, geomorfológicos, socioeconómicos, administrativos, institucionales y culturales. Toda alternativa de realizar una gestión sostenible de las zonas costeras se verán abocadas al fracaso si no se consideran de forma simultánea todos los numerosos sistemas que actúan de forma determinante sobre la dinámica de las zonas costeras.
FACTORES QUE HAN INCIDIDO EN LOS PROBLEMAS ACTUALES • La mala gestión de muchas zonas costeras a lo largo de los años. • La capacidad limitada de las zonas costeras para recuperarse de graves defectos de gestión. • La rápida dinámica evolutiva de las zonas costeras. • El enorme potencial de las zonas costeras, que atrae a personas y actividades económicas. • Los numerosos problemas de contaminación y de tratamiento de los sedimentos que se generan aguas arriba o en mar abierto pero que acaban depositándose en las zonas costeras. • El extraordinario abanico de actividades que compiten por utilizar los mismos recursos.
ALGUNOS IMPACTOS SECTORIALES DEL CAMBIO CLIMATICO A NIVEL NACIONAL • Producción Agropecuaria: rendimientos de cultivos, pasturas, etc. • Recursos Hídricos: abastecimiento de agua potable, generaciòn hidroeléctrica, etc. • Zona Costera: elevación del nivel del mar, erosión costera, frecuencia de temporales, etc.
Todo parece indicar que en Uruguay se están verificando tendencias en el largo plazo en cuanto a los cambios en el clima y el medio ambiente costero. Algunos de estos cambios están vinculados a un aumento de 200 mm en la precipitación anual en Montevideo desde 1883 lo cual resulta más evidente en el período 1961 – 1990 (Bidegain y Deshayes, 1992), un aumento de 0.5ºC en la temperatura del aire y un descenso de 0.5 mm Hg en la presión atmosférica (Nagy et al., 1996), una tendencia creciente entre 1961 – 1990 en las temperaturas medias de los veranos (Panario y Bidegain, 1996), un aumento durante décadas de 30% en los caudales fluviales que ingresan al Río de la Plata y una disminución de la salinidad media anual en la costa uruguaya (Nagy et al. 1996) y una mayor ocurrencia de floraciones algales nocivas en la costa Este de Uruguay.
Nagy et al, 2006 proyectaron escenarios para el año 2050 de acuerdo a los cuales se producirán incrementos de 1,2º C en la temperatura, 5 – 20% en la precipitación, 0,3 – 0,5 m en el NMM, 15 – 25% en el caudal del Río de la Plata, 200% de aumento de nitrógeno y 100% en nutrientes, reducciones de 2% en la salinidad superficial, y 20% en la saturación de oxígeno en aguas profundas, y 25% en el ingreso neto de la pesca costera. Según Nagy et al, 2006, dicho escenario representa un alto grado de vulnerav+bilidad de los recursos costeros al cambio y variabilidad climáticos. También indica que algunos aspectos resultarán particularmente impactos, pudiendo tomarse no sustentables (humedales y playas en áreas costeras bajas, turismo, fuentes de agua potable y pesca).