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TALLER DE ESCRITURA. 1ºESO SEMANA CULTURAL MARZO 2011 IES ANA Mª MATUTE. ÍNDICE DE ACTIVIDADES TAUTOGRAMAS TÍTULOS Y ARGUMENTOS A PROPÓSITO DE LA LETRA… TEXTO MOLDE VACÍO: LA MANZANA Ilustraciones del blog “El baúl que no tenía mi abuela”. 1. TAUTOGRAMA Características
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TALLER DE ESCRITURA 1ºESO SEMANA CULTURAL MARZO 2011 IES ANA Mª MATUTE
ÍNDICE DE ACTIVIDADES • TAUTOGRAMAS • TÍTULOS Y ARGUMENTOS • A PROPÓSITO DE LA LETRA… • TEXTO MOLDE VACÍO: LA MANZANA • Ilustraciones del blog “El baúl que no tenía mi abuela”
1. TAUTOGRAMA Características Se llama tautograma al texto en el que se repite una misma letra. Propuesta Elige una letra del alfabeto y escribe una frase en la que todas las palabras empiecen por ella. • Podía perder, pero pude porque pensaba poder. Podía y pude por Pablo, pero perdí. Sergio Crespo Castellanos, 1ºD ESO • Carla cocina cocido con carne. Al anochecer, Antonia anda atareada. Natalia Cáceres, 1ºC ESO • El estudiante estaba esquiando en el Everest en Enero. Víctor Bermejo, 1ºE ESO • Ayudo a ancianos andaluces a andar agachados. Adrián García del Valle, 1ºE ESO • Cogemos con cuidado cada cartabón. Fernando López Fando, 1ºC ESO • Tú tienes tu televisión tonta. Álvaro Soria, 1ºD ESO • ¿Puedes pesar un piano? Poder, puedo, pero ¿para qué? Beatriz Laguna, 1ºE ESO • La lámpara luce sus luces luciéndolas. Carlos Pérez, 1ºF ESO • Ahora Ana ama a Alberto, aunque Alberto ama a Ainhoa. Noemí García, 1ºE ESO
Carla comió castañas cuando caminaba contenta. Nuria Parra, 1ºE ESO • Los loros locos lamentaban la locura. Vuestras voces vocean vientos. Elena estaba enamorada en España. Lara Ruiz García, 1ºD ESO • Ojos oscuros obtienen obsesión ocultando otra opción. Beatriz Valenciaga, 1ºF ESO • Si sola se siente, su significado se sabe si sangra sobre su santuario. Sandra Monroy Moreno, 1ºD ESO. • Mi Manuel mira mi mosca Mafalda. Mi moreno marchoso, mi música morosa, mi Manuel. Nerea Villanueva, 1ºF ESO • Sandra soñaba siempre sin saber sonreír. Elena Rojo, 1ºF ESO • Mi mimoso mimo murió en el Mar Muerto. Melyssa Parra, 1ºE ESO • Estoy encantado esperando en Egipto. Javier Sánchez, 1ºF ESO • María miró miedosa mi mochila mientras merendaba manzanas. Moisés Pontón, 1ºF ESO • Mi madre mordió mi manzana mientras mi madrastra me masajeaba. José Luis Gallardo Espinola, 1ºD ESO
Ayer Andrés ató a Alejandro al árbol. Sonia Castellanos, 1ºE ESO • Soy Sergio, sueño sin saber si seré siniestro. Íñigo Lorrio, 1ºE ESO • Carla comía caracolas cuando Carlos cantaba. Carla Fiérrez Martínez, 1º D ESO • Los andaluces anduvieron ayer al atardecer. Iván Navas Urdillo, 1ºE ESO • El eco era especial, estupefacto, y encima estaba en España. Natalia Gómez, 1ºE ESO • Me muestro muy mimado. Juan José Mora, 1ºE ESO. • Esta estúpida estatua está en España. Pedro Jiménez, 1ºE ESO • La luna lunera le limpia los lápices los lunes a Luis. Carlos Vilela, 1ºF ESO • La luna loca lucía la luz ladeada. Laura Martínez Marín, 1ºD ESO • La luna lunita, la luciérnaga y la linterna son las luces de Laura. Daniel Martín, 1ºE ESO
Estaba entrando en el estadio equivocado. Ayssa Jiménez, 1ºE ESO • Víctor vino a verme. Melissa Zamora, 1ºF ESO • Los loros locos lavaban los libros lanzándolos lentamente. Alejandro Herrero Sánchez, 1ºD ESO • Espero especialmente la esperanza. Cora Blasco, 1ºE ESO • La Luna llora los lagos, llora las lagunas y llena los latidos de Laura. Rubén Catena, 1ºE ESO • Toda tu tetera tiene tu tirria. Adrián López Blasco, 1ºD ESO • Antes aterricé accidentalmente ante Ainhoa. Rafael Pozos, 1ºE ESO • Corrí con Carla camino a casa. Andrea Pura, 1ºF ESO • Amando amaré amor ardiendo. Ainhoa Luis, 1ºF ESO • El elefante es estupendo, es enérgico. Andrea Barra Cotrina, 1ºC ESO • Estoy esperando el estruendo del experimento. Adrián Quintana, 1ºF ESO • Mi madre merendaba magdalenas mientras María merendaba mandarinas. María Samblás, 1ºF ESO
2. TÍTULOS Y ARGUMENTOS Características Esta propuesta es un experimento. Los títulos que aporto son títulos de famosas obras literarias. La gracia, sin embargo, está en ignorar su existencia e inventar un argumento posible. ¿Tendrán los títulos tanta fuerza como para provocar un argumento? Propuesta Necesito algún argumento interesante. Te dejo el listado de títulos. Escoges uno y lo desarrollas. Ya sabes, planteamiento, nudo y desenlace. Tres momentos de la historia y por lo tanto, tres párrafos. LOLITA LA CASA VERDE LA MUERTE EN VENECIA EL SEÑOR DE LAS MOSCAS LA DAMA BOBA EL TUNEL LA CABEZA DEL DRAGÓN LA MONTAÑA MÁGICA NIEBLA EL JUGUETE RABIOSO LA MUERTE EN VENECIA Una noche se escuchó el sonido de una góndola, cosa nada habitual a esas horas. Lo importante es que la gente decía que no había nadie en ella, que solo era una góndola antigua. Al día siguiente, en el mismo lugar, a la misma hora, se volvió a ver la góndola, pero esta vez, en ella, iba un hombre llorando que parecía venir de un naufragio. Al día siguiente, en las noticias dijeron que a la misma hora en que se vio la góndola surcar los canales venecianos había naufragado un barco en el que iban cinco personas, de las cuales cuatro sobrevivieron pero uno murió. Oyeron que el hombre que murió no tenía familia, era muy solitario y solo trabajaba y dormía; no se relacionaba con nadie. Y dicen que esa góndola lleva a los muertos en vida por los canales de Venecia cada noche. Carlos Ruiz Orejas, 1ºA ESO
LA CASA VERDE La casa se encontraba a las afueras de la ciudad. La llamaban “La casa verde”, aunque nadie sabía muy bien por qué, ya que llevaba tanto allí que sus paredes se habían vuelto negras, las verjas que la rodeaban se habían oxidado hasta tal punto que algunos trozos eran solo polvo, y los techos, que antaño habían sido una parte más de la casa, ahora yacían inmóviles en el suelo, completamente destruidos. Todos decían saber mucho sobre ella y abundaban las leyendas sobre su existencia; pero solo Marc sabía que cada noche al dar las 12 una figura con traje verde salía por la puerta de la casa, recorría las verjas intentando salir y al final, desesperado, se tiraba por el acantilado que había en la parte trasera de la casa. Así cada noche hasta que Marc se cansó de mirar siempre por la ventana. Bajó las escaleras, cogió su bicicleta y se encaminó hacia la casa. Llegó, traspasó la verja, entró en la casa y la registró de arriba abajo. No encontró nada ni a nadie. Cansado, se tumbó en una cama que se encontraba junto a un espejo y se durmió. Se despertó al oír las doce campanadas de la iglesia, y en ese momento, cuando se miró en el espejo, se vio vestido con un traje verde. Poco a poco su reflejo fue saliendo del espejo, le cogió de la mano y juntos bajaron al acantilado. Allí se separaron, su reflejo sonrió y antes de tirarse le dijo: -Soy tus deseos, tus sueños, tus esperanzas. Soy tú. Y cayó al acantilado. Marc no lo volvió a ver nunca. Estrella Fernández, 1ºA ESO NIEBLA Érase una vez, el 24 de Febrero de 1974, un brujo que soñaba con dirigir el mundo. Poseía un libro y muchos pergaminos. Tras una larga búsqueda con el propósito de encontrar el conjuro adecuado, dio con él. Pronunció las palabras mágicas en hebreo y formó una niebla de gas tóxico que envolvió la ciudad de París. La gente, infectada por el gas, fue muriéndose de forma rápida pero muy dolorosa, semejante a un ahogo. La gente del pueblo pidió ayuda a los hechiceros de la Orden de los Susurros. Uno de ellos, Akemi Yurabi, se ofreció para intentar derrotar al maléfico brujo que aterrorizaba a la ciudad. Pero él invocó a un ejército de hombres muertos. Akemi, con ayuda de los dioses, derrotó al hechicero. La niebla tóxica, de manera inexplicable, se transformó en una bestia medieval, derrotó a la Orden de los Susurros y, al final, se derritió dejando tras de sí una estela de polvo. Alberto Seoane Seyller, 1ºB ESO
LA DAMA BOBA Erase una vez una dama del Siglo de Oro que vivía en el reino de Camelot. Estaba hechizada y el hechizo la hacía tonta a los ojos de los demás. Un día decidió salir a dar una vuelta por su reino, pero todos se burlaban de ella y se fue llorando a sus aposentos. Mientras iba, un caballero la vio y corrió tras ella, consiguió alcanzarla y la preguntó: -¿Por qué estás triste? Y ella respondió entre sollozos: -La gente me llama boba. -No debes preocuparte, la gente que te conoce sabrá que tú, en el fondo, eres más lista que todos esos patanes del reino- dijo él. La chica descubrió que no era tan malo ser boba, que la gente que la apoya es con la que debe estar y, después de todo esto, el hechizo se rompió. MªCristina Alba Aguilar, 1ºA ESO LA CABEZA DEL DRAGÓN -¡James, corre! ¡James, corre!- dije mientras que la manada de ñus se dirigía directamente hacia nosotros. La sensación de muerte era cada vez más intensa al ver que la manada se acercaba a nosotros cada vez más enfurecida. De repente, vi en una roca una pequeña grieta y, sin dudarlo, cogí a James del brazo y salté a esa peculiar grieta. Cuando estábamos en el aire, giré la cabeza hacia la manada y comprobé que los ñus se habían parado, y sus ojos decían que en un arrebato de amabilidad nos habían perdonado la vida. Caímos por la grieta pero, para mi sorpresa, la grieta finalizaba en una pendiente. James y yo caímos en la tentación de bajar por aquella cuesta de aspecto siniestro y, al poco tiempo, vimos un dragón de oro en la mitad de lo que parecía una gran cueva. Nosotros no dudamos en coger la cabeza de aquella maravillosa escultura, y… -¡La cueva se está derrumbando!- dijo James con el que sería su último aliento, porque según corríamos hacia la entrada de la cueva él me salvó la vida empujándome y salvándome de una muerte segura. Cuando me empujó, se me cayó la cabeza del dragón pero lo principal era salvar mi vida. Ariadna de Miguel, 1ºB ESO
EL SEÑOR DE LAS MOSCAS Era un niño muy refinado que siempre olía muy bien, se aseaba y se cepillaba la cresta. Un día, él y su colegio fueron de excursión a un vertedero para que supieran cuánta basura y cuántas cosas tiramos. Y, de pronto, se tropezó con una lata de coca-cola y fue rodando por toda la basura. Al cabo de diez minutos subió la cuesta y todos sus compañeros observaron cómo las moscas le rodeaban y se posaban en él. De ahí el mote “El señor de las moscas”, y desde entonces está escondido en el baño para siempre. Mónica Burgos González, 1ºB ESO LA MUERTE EN VENECIA Había una vez un hombre perseguido por la ley al que ningún policía lograba atrapar. Llevaban meses detrás de él pero, por mucho que lo intentaban, no conseguían cogerle. Pasaron los meses y los policías lograron encontrar su escondite, pero el ladrón no era tonto y sabía de qué manera le iban a pillar, así que se fue a otro refugio. En el antiguo escondite, los policías encontraron marcas de sangre diciendo que nunca le iban a pillar. Pero él dejó su número de móvil sin darse cuenta apuntado en un papel. Le llamaron y le buscaron por todo el país utilizando un Gps hasta que le localizaron en Italia, y vieron que el hombre se estaba comiendo tan tranquilo la pizza más grande del mundo. Cuando descubrió que la policía estaba allí dijo que para que le pillara la policía se asesinaba él mismo. Entonces cogió la pizza de pimientos, se la comió y se murió de tanto comer. Fin. Y los policías dicen: -Tanto para nada. Vamos a comer nosotros también una pizza de pimientos… Adrián Luna Carranza, 1ºB ESO LOLITA Había una vez una niña que se llamaba Dolores pero no le gustaba nada su nombre, prefería que la llamaran Lolita. Todos sus amigos la conocían como Lolita la Friki porque siempre iba cantando por la calle: “No me llames Dolores, llámame Lola…”, hasta que un día un chico se acercó y le preguntó por qué era tan friki cantando esa canción, que si se aburría que se comprara un peine y se peinara, que era más divertido que ir cantando por la calle. Lolita se sintió avergonzada y le dijo que vale, que seguiría su consejo. Y a partir de ese día dejó de ser Lolita la Friki para ser Lolita la del Peine, pero seguía siendo la misma friki de siempre. Hay cosas que no cambian. Sara Ballesteros, 1ºA ESO
NIEBLA Año 1770. 5 de marzo. En Londres el magnífico inspector secreto Neón Holmes vivía en la calle del Trejo número 12, solo con su perro y un violonchelo puesto que le encantaba la música, aunque no sabía tocar muy bien. Un día llamaron a su teléfono. La señora que le llamaba era Agustina H. que vivía en la calle Xilófono número 10. La calle del Trejo estaba muy lejos de allí, así que por eso le llamó por teléfono en vez de ir a su casa. -Perdone la interrupción, señor Neón, quería hablarle sobre mi hija Lucía E.H. El mes pasado se fue de acampada con sus amigos un día de muchísima niebla. Fueron a Birmingham a pasar quince días y no sé que podría haber pasado. En principio tuvo que haber vuelto el 25 febrero, pero ya lleva tres semanas desaparecida. Querría saber dónde está. Le he enviado dos fotos: una suya y otra de sus cinco amigos. Encuéntrela, por favor. ¡Espere! ¡Acaba de llegar mi hija! ¡Perdone que le haya molestado! Entonces Neón miró a la calle y vio que la calle Xilófono número 10 estaba delante de su casa, y se dio cuenta de que le habían gastado una broma y que había mucha niebla… Ignacio Jiménez Bragado, 1ºB ESO LA MONTAÑA MÁGICA Hace muchos años había un pueblo deshabitado debido a la escasez de agua. En aquel lugar vivían personas del tercer mundo, no tenían muchos alimentos y no podían alimentar a sus familias. Y contaban una leyenda que decía que, cerca del pueblo, había una montaña mágica que era muy peligrosa. El pueblo conocía esta leyenda, pero estaban tan desesperados por comer que decidieron elegir a un hombre del pueblo fuerte, alto, valiente y caballeroso. Tenía que ir a la montaña y superar las pruebas que le iban poniendo para dar con una linterna mágica que concedía cualquier deseo. El caballero entró en la montaña y se encontró con la primera prueba: había que superarla luchando, pero como el caballero reunía la cualidad de estar muy fuerte la ganó. Más adelante se encontró con la última prueba en la que una bella dama iba a intentar que el caballero no pidiera el deseo. La dama intentó matarle por la espalda, pero él descubrió que era mala. Por fin llegó hasta la lámpara y pidió el deseo de que su pueblo fuera rico y con muchos alimentos. Álvaro Galande Ortega, 1ºA ESO
LA CABEZA DEL DRAGÓN Erase una vez, hace miles de años, dos tribus muy poderosas, una formada por hombres con arcos, espadas y lanzas, y la otra formada por bestias que solían hacer conjuros y hechizos y vivían en el bosque. Estas dos tribus estaban en guerra. Las bestias eran más fuertes que los hombres y siempre ganaban las batallas. Los humanos sabían que tenían un secreto para ello, pero no sabían cuál. Entonces dos caballeros muy valientes fueron a infiltrarse en la guarida de las bestias. Se llamaban Drako y Lion. Entraron en ella y vieron que estaban bailando alrededor de una gigantesca cabeza de dragón. Cuando acabaron el ritual, el jefe de las bestias se colocó la cabeza de dragón en su cabeza. Los aventureros fueron descubiertos, pero se escaparon. Al día siguiente, las bestias le declararon la guerra a los humanos, que aceptaron. La batalla fue muy dura. Drako y Lion consiguieron la cabeza de dragón que se había quedado protegido solo por dos bestias, y consiguieron vencerlas. Fue así como se extinguieron, pero puede que quede alguna por el mundo en la actualidad. Ángel García Redondo, 1ºB ESO NIEBLA Hace millones de años, en Villacoral, los ciudadanos vivían atemorizados, ya que todos los días una misteriosa niebla aparecía de la nada y hacía desaparecer a una persona. Siempre a las doce en punto de la noche, al sonar la campana de la iglesia. Todos salían corriendo hacia sus casas, pero siempre había uno al que no le daba tiempo y al que la niebla le hacía desaparecer. Los ciudadanos, tristes por la pérdida de una persona más, iban a la iglesia todas las mañanas para rezar. Siguieron así hasta que, un día, apareció un detective, que, al enterarse de esta desgracia, tuvo curiosidad y decidió investigar. Al sonar la campana, como siempre, todos entraron a sus casas, y el detective se quedó escondido entre unos bidones, observando paso a paso lo que hacía la niebla. Con paciencia, el detective descubrió que no era una niebla maligna y que tampoco hacía que desaparecieran las personas, sino que, al llegar la niebla, las personas que se metían en ella no veían nada, por lo que andaban y se perdían; y, por eso, los demás pensaban que desaparecían. El detective también descubrió por qué [era que] todas las noches aparecía esa misteriosa niebla: eso era por el cambio climático. Eso fue lo que el detective les explicó a todos los ciudadanos. Ellos, al escucharlo, se quedaron asombrados de la gran inteligencia del hombre. Todos le dieron las gracias y le hicieron una pregunta: “¿Sabe usted lo que se siente al estar enamorado?”. El detective se quedó exhausto, ya que, por muy listo que fuese, a esa pregunta no tuvo respuesta… Al final, el detective se quedó a vivir porque aún había muchas más cosas por descubrir. Al cabo de unos días, la niebla desapareció y, desde ese día, los ciudadanos volvieron a la normalidad. Claudia Tamasán, 1ºC ESO
LA MONTAÑA MÁGICA Un año, en las vacaciones de verano, nos subimos al pueblo de unos amigos de mis padres, que estaba en la montaña. Una noche, mientras mi hermana Marta y yo dormíamos en la habitación que daba a una pradera, vimos algo que nos pareció muy raro. Eran unos ruidos de los que, al principio, pensamos que eran de algún animal, pero, al empezar a ver sombras reflejadas en la pared, pensamos otra cosa. Mi hermana, que es muy decidida, me animó a salir y yo, por no ser menos, la acompañé. Nos escondimos detrás de una de las paredes de la casa y desde allí vimos que los árboles y plantas se movían. Mi hermana y yo nos miramos impresionadas por el acontecimiento y, ya sabiendo lo que pasaba, nos fuimos a casa otra vez. Al día siguiente, interesadas por el acontecimiento, volvimos a salir, pero no vimos nada. Al final, mi hermana Marta y yo dedujimos que era por la luna llena, que hacía que todos los árboles y plantas que había en el bosque fueran mágicos cuando ella se reflejaba en ellos. Paula Cobos Puertas, 1ºC ESO
3. A PROPÓSITO DE LA LETRA… Características Elige una de las letras del alfabeto, la que más te guste, bien por lo que te sugiere su forma, bien por las palabras en las que aparece, y escribe un elogio de ella. Propuesta “A propósito de la letra T”, Javier Tomeo (ABC, 31-V-1994) Llueve débilmente y un viento gélido se lleva las últimas hojas de los árboles. María y yo estamos junto al fuego y empieza diciéndome que la T le ha parecido siempre un hombre con los brazos abiertos en cruz, y yo observo que, si realmente fuese así, resultaría que ese hombre no tendría cabeza. ¿Has visto alguna vez un hombre sin cabeza? María se echa a reír y me confiesa que la T le ha parecido siempre una letra simpática, una consonante fuerte, alegre y campechana, que se debe pronunciar con decisión. Pero a mí me parece una consonante engreída. Puedo imaginármela incluso con boina, pantalones de pana y camisa a cuadros. Nunca nos pondríamos de acuerdo. La R La R siempre me ha parecido una letra fugaz porque se va en moto con sus largas piernas y con su barriga cervecera. Casi siempre le acompaña su amiga del alma, la otra R, y juntas son más fuertes que todos. Rubén Catena Zarraute, 1ºE ESO La T Es como un martillo que acompaña a las demás letras, y si no le gustan o no suenan bien juntas, les pega un martillazo hasta dejarlas como un punto, o una coma o un punto y coma. Fran del Brío, 1ºF ESO La E La E es el peine del abecedario. Adrián García del Valle, 1ºE ESO La H El otro día mi amigo H me contó que se había echado una amiga llamada C y tuvieron una hija, h minúscula, muy revoltosa que provoca un montón de faltas. Javier Sánchez Cabrero, 1ºF ESO La S Cuántas palabras empiezan por S, desde nombres como “Segovia” o “Susana” hasta palabras que se contradicen como “sol” y “sombra”, adverbios como “sí”, verbos como “sentarse”, determinantes como “suyo”… La S; sin ella no podría Saber nada. Sonia Castellanos Luquero, 1ºE ESO
La C Esa letra que lleva mi nombre, esa letra que es una línea curva, es una letra como la media luna o como un pendiente. Carlos Vilela González, 1ºF ESO La O Esta letra que parece un rosco y que está tan obesa, parece que va a dar a luz. Carlos Pérez Domínguez, 1ºF ESO La A El otro día pensé en mis compañeros de clase cuando estaba haciendo los deberes. Entonces me di cuenta de que todas, menos una persona de mi clase, llevan la letra A en su nombre. También es la letra por la que empieza el nombre de la chica que me gusta, y también es la primera letra del abecedario. Para mí es la letra más importante y, por tanto, es la letra que usaré para hacer mi trabajo de Lengua. Iván López Santos, 1ºF ESO La M La M es la letra por la que empieza el nombre de la persona que más quiero. Es como dos montañitas seguidas con un pico muy alto. A esa montaña suben muchos escaladores, y de tanto subir se ha quedado redondita: a eso se le llama “m” minúscula. Nerea Villanueva, 1ºF ESO La S El otro día, en mi casa, escribiendo una redacción, me di cuenta de que la S mayúscula es muy interesante porque puede parecer una serpiente o, al revés, puede parecer un 2 y normal un 5. También, si se pone mirando hacia abajo parecen olas del mar si se ponen sucesivamente, o mirando hacia arriba y al revés parece una N. Es algo parecido a la Z al revés, y hay más formas de interpretarla poniéndola de diferentes maneras. Sigue buscando otras formas y te sorprenderás, aunque siempre sigue siendo una S. Adrián Quintana Ballesteros, 1ºF ES La L Esta letra me recuerda a un hombre sentado, y mi prima mayor dice que hay una leyenda que dice que la letra L se creó porque había un rey que siempre estaba sentado y triste. Nadie sabía por qué, y nunca descubrieron. Nuria Parra Jiménez, 1ºE ESO La S Una amiga mía dice que la S le parece una serpiente a punto de atacar a su presa. Sebastian Pura, 1ºF ESO
4. TEXTO MOLDE VACÍO: LA MANZANA Características Todos los textos deben hablar de la manzana y algo que sucede con ella pero sin mencionarla. Veamos qué tal queda... El señor que no comía seres verdes o rojos por fuera y blancos por dentro Este extraño señor no comía esos extraños objetos porque siempre decía que eran asesinas. Una vez tuvo uno de esos objetos y casi muere de un infarto. Siempre contaba que una vez quisieron matar a Isaac Newton, que ellas se inventaron la gravedad para poder vengarse de de los hombres. Siempre que le ofrecían una él llamaba “asesino” al que se la ofrecía y le denunciaba a los juzgados. Un día desapareció y en su jardín apareció un árbol de los que crean esos objetos… Carlos Ruiz Orejas, 1ºA ESO La casa- lombriz -Mamá, tengo hambre, ¡vamos a la frutería!- dijo un niño gordo. -Pero si acabamos de comer…- respondió la madre. -Pero aún tengo hambre. Así que el niño gordo y su madre fueron a la frutería. -Aquella, mamá, es la fruta que se comió Blancanieves-señaló el rechoncho niño-. Me la pido. -Vale, cielín. Y el niño se la estaba comiendo hasta que vio una lombriz dentro. -A esta fruta la llamaré, a partir de ahora, la casa-lombriz. Lucía Guijarro, 1ºB ESO El objeto sospechoso Tras una tarde jugando a detectives y encontrar nada más que pistas encontramos el objeto. El objeto que encontramos era de color rojo pasión precioso. Después nos la repartimos entre mis amigos, Clara, Carlos y yo. Tras probarla, se quedaron con cara de ¡qué buena!, así que decidimos ir a la tienda y comprar muchas más. ¡Qué ricas! Sandra Barrios Medina, 1ºA ESO
El objeto rojo En un museo hay un objeto que atrae todas las miradas, un fruto que en un cuento utilizaron para envenenar a una chica. Aquel objeto se guardaba en una vitrina de cristal para que todo el mundo pudiese admirarlo. Era un objeto simple, de pequeño tamaño. El cartel indicaba que ese objeto era el más viejo del mundo, pero aún así se mantenía en perfectas condiciones. Recuerdo cuando lo vi: aquella vitrina iluminada y ese objeto rojo… Marina Álvarez, 1ºA ESO Rojita Una vez Rojita decidió que quería ver mundo y fue con su amigo Gusanus, que le acompañaba a todas partes, a un campo que estaba apartado para pasar allí sus vacaciones. Pero, cuando llegaron, fueron perseguidos por unos bichos verdes que tenían forma de lágrima. Al final, consiguieron despistarles subiendo a un árbol, y allí descubrieron sus orígenes…¿Qué era Rojita? Adrián Quintana Ballesteros, 1ºF ESO
La despedida Ya estaba en el camión rumbo a la ciudad. Me daba pena despedirme de ella. La vi crecer y la cuidé desde el primer momento. Decirle adiós me resultaba difícil, pero tenía que hacerlo. El camión estaba en marcha y no había vuelta atrás. Espero que llegue sana y salva allí donde tenga que llegar. Ya se marchó y no volverá más. La añoraré, pero era su destino. Sonia Castellanos Luquero, 1ºE ESO La llamada “roja” Eran dos amigas, María y Cristina, a las que les gustaba ir al campo. Tanto era lo que adoraban el bosque que iban todas las tardes. Iban a por algo, algo… bonito y jugoso. Es algo que puedes ver en un bosque si miras hacia lo alto. No podían pronunciar su nombre, “el veneno de Blancanieves”, porque en su pueblo, algo extraño, se consideraba de mala suerte. Si lo decías, ¡plof!, te caía en la cabeza. Por ese motivo la llamaban solamente “la roja”, por su color común, aunque a veces era amarilla o verde. Un día se encontraron “la roja” más grande que sus ojos habían visto nunca. La cogieron y, cuando la iban a vender, se dieron cuenta de que en su interior estaba viviendo un gracioso topillo de nariz azulada. Como no querían hacerle una faena no vendieron “la roja”, sino que se quedaron con el topillo y, esa tarde, para que el mundo supiera que era de ellas, le regalaron un gracioso cascabelillo. Aitana Carrasquilla Mejías, 1ºA ESO Tribus Había una vez un mundo lleno de tribus. Había tres. La primera era la más vil y ruin: los Iumo. La segunda era en la que más personas había: los Jadrid. Y por último, la tercera era la que más maquinaria tenía: los Adjamovanas. En ese mundo había un objeto muy valioso. Nadie conocía su nombre, solo sabían que era roja y que, por casualidad, los Iumo poseían un montón de esos objetos. Todos intentaban conseguirla, pero nadie lo conseguía hasta que los Iumo decidieron compartirlos con otros y decir su nombre… Alejandro Jiménez Hurtado, 1ºF ESO
Mi vida Aquí estoy, en este alto ser vivo, en las ramas, rodeada de mis semejantes, de cara a un huerto viendo crecer a las hortalizas. Vivo en una casa de campo. Otro ser no hortaliza se acerca a mí y empieza a coger a mis amigas. También pone sus sucios dedos sobre mí y me echa en una cesta donde que acaba en un camión. Allí he conocido a la lechuga y me ha contado cómo era el huerto. De repente, el camión ha pegado un frenazo y he caído al suelo lleno de suciedad. Allí me ha cogido un niño y… ¡me ha comido! Javier Sánchez cabrero, 1ºF ESO Rudolf y el objeto misterioso Un objeto misterioso estaba tirado en la calle. Rudolf lo cogió y, de pronto, se convirtió en un reno y fue vagando por los bosques con más niños que también tocaron el objeto misterioso. Así, en Navidad se encontraron con Papá Noel que tenía una avería en el trineo. Los renos decidieron in con él ya que la Navidad siempre es una fecha especial. Pero en la siguiente Navidad, Papá Noel les dio otro de esos objetos misteriosos y, al tocarlo, todos se volvieron a convertir en niños. Rubén Catena Zarraute, 1ºE ESO