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Los caballeros de la edad media. Como se hacia un caballero en la edad media?.
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Como se hacia un caballero en la edad media? • En la Edad Media los caballeros no eran nobles en un principio, eran hombres que tenían los medios para mantener caballos y con ellos participar en las guerras, y los reyes pagaban sus servicios concediéndoles privilegios como a los infanzones e hidalgos.
Esto vino a constituir una pequeña nobleza militar. La gente enriquecida que pertenecía al estado llano, también formaba una segunda nobleza, por los servicios que podía prestar al soberano. En los primeros tiempos de la Reconquista los reyes se rodearon de vasallos, cuya ayuda les podía ser muy útil, a los que se les dio el nombre de “mílites”, los que fueron de gran eficacia en las empresas militares contra los moros, de ahí que los que mas destacaban recibían privilegios.
En un inicio al caballero no se le exigía poseer hidalguía, solo requería tener caballo y armas para combatir, lo que les era recompensado con tierras y dignidades, y el derecho a tener escudo, y además recibir títulos tales como condes, marqueses o vizcondes. Todo esto con el tiempo cambió y ya no cualquiera podía aspirar a ser caballero.
Para ser armado caballero, había normas, tales como ser noble por lo menos en tres generaciones por parte de padre o madre. Al cumplir siete años habrían de prestar sus servicios como paje, en el castillo de algún señor; a los catorce años pasaba a ser escudero, teniendo a su cuidado el caballo y las armas de su señor, acompañándolo en sus empresas militares, al tiempo que se habrían de ejercitar en el uso de la pesada armadura, equitación y todas las actividades de un caballero en una batalla. Durante este tiempo se les consideraba “donceles”.
Al llegar a los veinte años ya tenían el derecho a ser investido como caballero. En la víspera habría de ayunar, confesar y comulgar; escogía a sus padrinos, los que deberían armarle y con los que comería antes, pero el futuro caballero lo hacía en mesa separada y con la prohibición de hablar o reír. La noche previa la pasaba en vela completamente armado, a lo que se le llamaba “la vela de las armas”, en la mañana se bañaba y luego entraba a la iglesia con la espada colgando al cuello, para que el sacerdote lo bendijese.
Enseguida iba a arrodillarse ante el caballero que lo armaría y ante los Santos Evangelios juraba defender a la religión, la patria, el rey y los débiles, obedecer a los superiores, ser cortés con todos no servir a un príncipe extranjero, no faltar jamás a la palabra empeñada, no mentir, no injuriar o calumniar, defendiendo siempre, aún con riesgo de su vida, toda causa justa.
A todo esto seguía el que los padrinos le ceñían la cota de malla, le calzaban las espuelas doradas y le colocaban la espada al cinto. Esta clase social fue perdiendo importancia con el tiempo, al revolucionarse el arte militar, al dejar de ser los caballeros una parte principal de un ejército.
El armamento: • Al no existir armas de fuego, se usaban pesadas espadas, de las cuales se requería protegerse con escudos, además de recubrir el cuerpo con armaduras, compuestas por el yelmo, la coraza y las perneras, confeccionadas con hierro o bronce, que lógicamente restaban movilidad al guerrero, pero siendo un honor el arte de la guerra, estos combates heroicos que consistían en matar o morir con el enemigo cercano, era una forma de lucha muy valorada por los caballeros medievales. Con los ataques con mazas, o hachas, en forma continua, las armaduras se fueron reforzando, cubriendo los caballeros sus hombros, espaldas y brazos con placas de hierro. Ya en el siglo XIV los caballeros y sus aparecen casi totalmente envueltos en hierro, protegiendo también a sus caballos.
Además de las espadas, lanzas, hachas, mazas y dagas para la lucha cuerpo a cuerpo, se usaba la catapulta que permitía arrojar piedras de gran tamaño (hasta de 100 kgrs.) y la ballesta que posibilitaba el empleo de flechas. La evolución de las armas de los arqueros habría sido: primero el arco corto, posteriormente la ballesta, y finalmente el arco largo.
La infantería se componía de numerosos arqueros, que podrían haber llegado a mil hombres. El fuego griego, ya conocido desde épocas remotas, se siguió empleando. Eran explosivos que se prendían fuego al caer entre las filas enemigas.
Los sarracenos emplearon contra los cruzados también elementos explosivos, pero mucho más poderosos, compuestos por una combinación de sustancias que incluían polvo de carbón, azufre y petróleo, entre otros elementos, provocando llamas de tal magnitud, que resultaban inextinguibles. Los musulmanes, que se apoderaron entre otros pueblos, de Egipto, Siria y Palestina, tenían una destacable caballería y sus arqueros eran inexpugnables y temidos en el ataque, luchando con ferocidad y sin temor a la muerte, ya que con ella, sobre todo si era heroica, accederían al paraíso prometido por Mahoma.
Sus espadas al principio, eran de hoja curva (modelo oriental) pero luego las reemplazaron por la de hoja recta con doble filo. Las ballestas eran un arma especialmente destructiva y muy usada en Inglaterra en el siglo XIII, hasta su prohibición por la Carta Magna. Reemplazaron a los arcos pequeños, de poco alcance. Estaban constituidas por el arco, comúnmente de acero; la cureña; la nuez, que sostenía la cuerda para que se mantuviera tensa; y la llave que servía para accionar el mecanismo que disparaba la flecha que podía afectar en una distancia de hasta 300 metros. Fue a su vez sustituida por el arco grande a fines del siglo XIII, y también fueron los ingleses, los que lo usaron más ampliamente. Era similar a la ballesta en su alcance, pero más fácil de construir y más veloz en el disparo.
Para protegerse de la caballería enemiga, que generalmente atacaba para reforzar a la infantería, se utilizaron estacas. Sin embargo la gran revolución la constituyó la pólvora. Se cree que su descubrimiento puede atribuirse a los chinos en el siglo XI, y fue utilizada para fuegos de artificio y en cañones, al inicio construidos con cañas de bambú, y luego con tubos de metal.
La pólvora es una mezcla combustible, formada por azufre, salitre y carbón, que al encenderse desprende gases, y explota. No se conoce con certeza si la pólvora se introdujo en Europa como una mercancía más, de las que arribaban desde Oriente, o si se descubrió con motivo de las Cruzadas, habiendo llegado primero al mundo árabe, por el comercio.
Inglaterra y Alemania, fabricaron pólvora a partir del siglo XIII, aunque muchos dudaban si era más eficaz que sus armas tradicionales. Por ejemplo Enrique VII llegó a sostener que el arco largo era irreemplazable. Pronto comprendió su error. En el siglo XIV se perfeccionó su uso, diseñando armas de fuego de alcance masivo y altamente mortales, y en el siglo XV se convirtió en la base de los ejércitos, reemplazando definitivamente las batallas cuerpo a cuerpo, y las demás armas medievales, usadas para largo alcance. En la conquista de América, los europeos, con sus armas de fuego, resultaron invencibles para los nativos, que usaban aún, arcos y flechas. Había nacido ya, la Edad Moderna.