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¿ CÓMO ACOMPAÑAR EL DESPERTAR VOCACIONAL EN EL CRECIMIENTO DE LA FE?. “Podemos y debemos creer... que Dios está preparando una nueva primavera para el cristianismo” ( Redemptoris Missio, 86). Hablaremos de. Tres “somníferos” vocacionales. ¿Qué entendemos por «despertar vocacional»?
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¿CÓMO ACOMPAÑAR EL DESPERTAR VOCACIONAL EN EL CRECIMIENTO DE LA FE?
“Podemos y debemos creer... que Dios está preparando una nueva primavera para el cristianismo” (Redemptoris Missio, 86)
Hablaremos de... Tres “somníferos” vocacionales ¿Qué entendemos por «despertar vocacional»? ¿Hacia qué dimensiones debe crecer la fe? ¿Cómo favorecer el crecimiento de la fe para producir el despertar vocacional?
1 Tres «somníferos» vocacionales
La cultura ambiental La transmisión vocacional Tres somníferos El narcisismo
1 Cultura «pre-cristiana» Cultura «pluralista y ambivalente» Efectos «narcotizantes» de la cultura Cultura del «bienestar» Cultura «virtual»
Cultura «pre-cristiana» Efectos «narcotizantes» de la cultura • Marcada por la indiferencia y el neopaganismo. • Muchos no conocen a Cristo o lo conocen mal y de oídas. • La fe-vocación no surge ya de matriz sociológica ni desde procesos grupales. • No hay socialización de la fe-vocación. • Hemos de construir algo nuevo.
Cultura del «bienestar» Efectos «narcotizantes» de la cultura • Con una propuesta de vida centrada en el propio bienestar y el consumo. • El futuro se reduce a: • la elección de una profesión • la situación económica • la satisfacción sentimental-afectiva • Faltan modelos y propuestas de grandes causas. • No oyen mensaje más seductor que el de sentirse bien.
Cultura «virtual» Efectos «narcotizantes» de la cultura • Los jóvenes habitan hoy en el planeta virtual (imágenes, sonido, información). • Bajo su embrujo variado, seductor, fragmentado. • Incita a renovar nuestros modos de comunicación de la fe. • Pero es un serio desafío: • ¿Favorece o perjudica la formación de los jóvenes? • ¿Serán capaces de contactar con Dios?
Cultura «pluralista y ambivalente» Efectos «narcotizantes» de la cultura • Los jóvenes crecen hoy en la diversidad. • Coexisten valores diversos, contrarios y no jerarquizados. • Tal pluralismo puede abrir a la tolerancia o al relativismo vocacional.
2 Transmisión «aletargada» de valores En el EMISOR En el RECEPTOR
En el EMISOR • El emisor sufre una falta de claridad en la comunicación de su mensaje • “Vocación” es una palabra bajo sospecha. • Se teme que atente contra la autonomía personal. • Debe ser reelaborada de forma sana y adecuada.
En el RECEPTOR Se da una insuficiente voluntad de escucha por parte del receptor • El receptor no acoge el mensaje vocacional. • Está saturado por una avalancha de información que no puede digerir. • No siente deseo de plantearse la vocación. • La reiteración de mensajes no garantiza su transmisión.
3 narcisismo El
Incapacita para las relaciones de alteridad o transcendencia. • Despoja de la propia identidad. • Relativiza ideales y debilita para llevar a cabo cualquier proyecto. • Impele al consumismo y al relativismo. • Convierte la subjetividad en subjetivismo. • Transforma la libertad en arbitrariedad.
2 «Despertar» vocacional
«Advertir»: La experiencia del asombro «La gramática elemental de la vida»
«Advertir»: La experiencia del asombro “No se abraza la fe (tampoco la vocación) por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y con ello, una orientación decisiva” (Benedicto XVI). • La experiencia vocacional es un «encuentro» que: • Da paso a una toma de conciencia. • Provoca vértigo y confianza. • Afecta a lo mental y emocional, con resonancia corporal. • La vida deja de ser obvia y se torna profunda y misteriosa. • Desvela la «sacralidad» en lo ordinario. • Es impedida por la «inconsciencia» y la «distracción».
“Debemos mirar constantemente las cosas de manera distinta” (Sr. Keating)
«La gramática elemental de la vida» • ¿Qué puede provocar ese asombro vocacional? • Comprender y personalizar la “gramática elemental de la existencia”. • “Mi vida es un don recibido que, por su propia naturaleza, tiende a convertirse en un bien dado”. • Eco: “No que nosotros hayamos amado primero, sino que Dios nos amó primero” (1 Jn 4,9-10).
Algunos rasgos: • No es un concepto mental o especulativo. • Es una experiencia holística. • Consiste en pasar de la «gratitud» a la «entrega». • Se transmite por contagio e irradiación. • Esa experiencia se convierte en un «impulso». • Es respuesta amorosa al amor percibido antes.
3 Crecimiento de la fe
De la inconsciencia a la búsqueda La terapia de «shock» De la superficialidad a la interioridad El viaje hacia el «centro» La lógica del «don» De la egolatría a la gratuidad La libertad para decidir De la pasividad a la libertad
De la inconsciencia a la búsqueda La terapia del “shock” • Nuestra cultura incita solo al bienestar. • Vuelve insensibles hacia realidades valiosas. • Desde la indiferencia no cabe la vocación. • Frente a ella se precisa una “terapia del shock”. • Es un choque frontal con la realidad que provoca: • El desplome estrepitoso de sus falsos cimientos . • El reorientar la vida desde la fe y en clave de gratuidad. • Entender la vida en clave de agradecimiento y generosidad.
Alex Rovira lo denomina «efecto bofetada» • Puede convertirse en un momento de lucidez y gracia. • Derrumba falsas seguridades y obliga a buscar una respuesta auténtica. • Hace salir de sí para vivir por algo que merece la propia entrega.
Acciones pedagógicas falicilitadoras • Voluntariados en “frontera” o en “periferias”. • Acompañar las crisis personales y los momentos afectivos fuertes. • Actividades que exijan “desconectar”. • Elaborar las experiencias de sufrimiento que obliguen a replantearse la vida. • Experiencias de “riesgo”. • Evitar o rechazar ofertas de excesiva comodidad.
El viaje hacia dentro De la superficialidad a la interioridad • Constatamos la instalación habitual en la superficialidad o en la banalidad. • Se confunde lo aparente con lo real y lo divertido con lo valioso. • Incapacita para adentrarse en el misterio. • La superficialidad modela una visión miope de la realidad. • Incapacita para escuchar la llamada interior. • Apostemos por la interioridad • No confundirla con el intimismo • Es clave para el despertar vocacional.
Acciones pedagógicas falicilitadoras • Cultivar el sentido de la atención, la imaginación, el cuestionamiento, la capacidad intuitiva, la actitud contemplativa y la formación estética. • Abrir espacios prolongados para el silencio y soledad. • Promover el hábito de la oración. • Desenmascarar los modos falsos de llenar el vacío personal. • Reducir y usar deforma crítica los medios que estimulan la sensorialidad.
La lógica del “don” De la egolatría a la gratuidad • El egocentrismo induce al cálculo y al mayor beneficio. • El ego es el rasero que mide cualquier otra realidad. • Impide experiencias de alteridad y trascendencia. • Pero esta situación no es irreversible. • El ser humano también es un “ens capax amoris”. • El amor estructura su ser personal-relacional y le abre a la plenitud, desde dos certezas: • La certeza de haber sido amado • Y la certeza de saber amar
Ambas certezas fundan la «lógica del don»: • Es entregar lo que uno es a los otros. • Supera la lógica del cálculo o de la reciprocidad. • Manifiesta preocupación e interés por el otro. • Genera comunión, cohesión, vinculación, pertenencia. • Libertad ya no es independencia, sino liberación del ego. • Es una potencia que emana de la naturaleza humana. • No es un movimiento irracional o absurdo.
Acciones falicilitadoras • Cuidar el autoconocimiento para la autoaceptación. • Integración de la afectividad, corporalidad y sexualidad. • Releer el proceso personal de la evolución afectiva. • Analizar los conflictos emocionales. • Aprender integración grupal y sanas relaciones interpersonales. • Promover experiencias de donación-entrega desde la gratuidad. • Proponer actividades de entrega y saber perder. • Involucrar en acciones de servicio que exijan esfuerzo y entrega. • Favorecer la autonomía personal y la responsabilidad.
La libertad para decidir De la pasividad a la libertad • Pasividad es la actitud de recibir sin cooperar en ello. • Genera carencia de objetivos y de propósitos. • Conduce a la desgana vital, al aburrimiento, a la indolencia, a la apatía, a la indiferencia, al desinterés y a la inacción. • Denota debilidad psicológica y espiritual. • La cultura actual fomenta la pasividad. • A pesar de todo, el ser humano necesita autodirigirse. • Necesita convertir su vida en proyecto. • “Vivir humanamente es proyectar”. • Proyectar exige abrazar renuncias y sacrificos. • No solo «respetar» la libertad, sino «potenciarla».
Acciones pedagógicas falicilitadoras • Elaborar miedos, apegos, resistencias a los cambios, motivaciones,etc. • Aprovechar las crisis para la reestructuración y el ajuste personales. • Urgir a vivir la autonomía personal. • Estimular con ideales que lleven a cabo gestos fuertes. • Fomentar lecturas de “vidas ejemplares” actualizadas. • Valorar y reforzar las iniciativas personales. • Educar en la constancia, la fidelidad, el aguante... • Invitar a experiencias de riesgo que desarrollen la imaginación.
4 Para favorecer el «despertar vocacional»
Posibilitar la Pastoral vocacional Difundir una mentalidad vocacional Sembrar, proponer y acompañar la vocación
Posibilitar la Pastoral vocacional • AVIVAR la CONFIANZA • Porque Dios sigue llamando. • Porque todo ser humano es capaz de acoger la llamada de Dios. • Por nuestra capacidad de cambio. • CONTAR CON ESTRUCTURAS Y MEDIOS DE PV • Suscitar y formar animadores vocacionales. • Mentalizar en PVB. • Realizar una PV por todos, para todos y siempre. • Ante la NE no paralizar la PV. • La PV es la vocación de toda Pastoral. • Fortalecer las estructuras de PV y su continuidad.
Difundir una mentalidad vocacional • La mentalidad vocacional es la síntesis teórica de nociones bien fundamentadas que explican la vocación y crean convicciones comunes capaces de impulsar la PV. • Tal mentalidad es una conciencia y una convicción comunes. • Hay condiciones que imponen visiones falsas sobre la vocación.
VISIONES FALSAS DE LA VOCACIÓN (PDV 37) Vocación como “destino inmutable” (“Creo que Dios me manda”) Vocación como “vivencia intimista” (“Me hace sentirme bien”) Vocación como “apetencia personal” (“Lo que a mí me gusta más”) Vocación como “realización personal” (“Lo que quiero es triunfar”).
VISION DIALOGAL DE LA VOCACIÓN • En todos los relatos vocacionales bíblicos: • Dios irrumpe inesperadamente en la vida de alguien. • Colma, rehabilita, sana, perdona, habla ...y envía. • Alcanza en lo más profundo de la persona. • Sobreviene, les es dado, se lo encuentran. • Provoca reacciones y dificultades para entender. • Primero es la experiencia, luego su comprensión. • Es la visión dialogal de la vocación: • Dios pronuncia una palabra de amor incondicional. • No es una palabra «parcial y ambigüa”. • Es una “palabra total” (afecta a toda la vida, no a una parte). • Es una palabra “firme” (no admite una vuelta atrás).
Sembrar, proponer y acompañar la vocación Siembra Misión compartida Propuesta • Educar • Formar • Discernir Acompañamiento Decisión
SIEMBRA • Se inserta en la pastoral general. • Se canaliza a través de los itinerarios de fe: • KOINONIA • LITURGIA • MARTYRIA • DIAKONIA • Es depositar la semilla en el corazón de todos. • Creando condiciones para ello. • Esa simiente se denomina kerigma vocacional.
PROPUESTA • La siembra vocacional desemboca en la propuesta. • Proponer es invitar y motivar, de forma directa, personal y explícita, a una persona a mostrarse abierto a la escucha y acogida de la llamada que el Señor le hace para una vocación específica. • Todos podemos y debemos ser sus portavoces. • La propuesta está bien realizada cuando hay: • Claridad • Respeto • Interpelación directa al plantearla.
ACOMPAÑAMIENTO • Tras la siembra la y acogida hay que cultivar. • El cultivo se realiza mediante el acompañamiento. • Comienza con la aceptación y termina en la decisión. • El acompañamiento es un ministerio de ayuda pedagógica, temporal e instrumental de un hermano en la fe a otro hermano, para que advierta, clarifique, discierna y responda a la llamada que Dios le hace, con libertad y responsabilidad. • Tal acompañamiento atiende tres cuestiones: • Claridad de la conciencia vocacional • Consistencia • Idoneidad
Itinerario del acompañamiento Conciencia Motivaciones Idoneidad PODER SABER QUERER DECISIÓN PROPUESTA Llamada de la Iglesia