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Rasgos del Pastor en el Antiguo Testamento. Identidad del ministerio presbiteral.
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Rasgos del Pastor en el Antiguo Testamento Identidad del ministerio presbiteral
Una de las dimensiones de la formación integral es la preparación para el ministerio pastoral. Pero si tenemos en cuenta que toda la formación de sacerdotes va encaminada a su preparación para la misión, comprenderemos que no se puede considerar la formación pastoral solamente como un área específica, sino que se trata de un enfoque global de toda la formación, una luz que lo permea todo. • Por ello figura entre los principios fundamentales. Formación eminentemente pastoral
La vocación del presbítero gira en torno a una misión: la de ser, a imitación y a nombre del Buen Pastor, pastor de las almas que la Iglesia le ha confiado. El presbítero, ejerciendo el oficio de Cristo, Pastor y Cabeza, reúne la familia de Dios y la conducen a Dios Padre por medio de Cristo en el Espíritu. • Este es el rasgo fundamental de la personalidad sacerdotal, según el Concilio Vaticano II, ser pastor de almas. Rasgo fundamental de la personalidad sacerdotal
De aquí que la formación del sacerdote, si quiere corresponder a las exigencias de la misión sacerdotal, deba ser eminentemente pastoral. Este punto ha sido uno de los fundamentales, por no decir el mayor, que ha querido destacar el Concilio en la formación de los futuros sacerdotes. • Y con toda razón, pues descuidar la preparación del sacerdote para la misión específica que debe realizar en la Iglesia, sería nulificar en cierto sentido los demás aspectos de su formación. La formación del sacerdote
El decreto del Concilio Vaticano II sobre la formación sacerdotal pone de relieve la importancia de este principio: toda la educación de los alumnos debe tender a la formación de verdaderos pastores de almas, a ejemplo de nuestro Señor Jesucristo, Maestro, Sacerdote y Pastor. • La formación propiamente pastoral es de esencial centralidad dentro de la formación del futuro sacerdote. Optatamtotius
La formación pastoral debe informar por entero la formación de los alumnos • En las Orientaciones para la educación en el celibato sacerdotalde la Cong. para la Ed. Cat. se explicita que por formación pastoral se entiende no sólo un aspecto o un sector educativo entre otros, sino también la característica propia de la preparación de los sacerdotes, característica que debe revestir y penetrar todos los aspectos de la formación de los aspirantes. La formación pastoral
La personalidad del sacerdote-pastor constituye el vértice • Al que debe converger en plena armonía toda la formación. • Todos los elementos constitutivos de la estructura y función del seminario deben estar pensados y calibrados con miras a su eficiencia práctica, a la consecución del fin indicado y que los educadores debe proponerse como meta calificativa de su acción especializada la formación pastoral de los seminaristas. Meta calificativa de su acción especializada: la formación pastoral
En primer lugar, la formación espiritual debe orientarse y estar estrechamente unida a la formación pastoral. El corazón de esa formación es el celo por las almas y la caridad pastoral. Eso es lo primero y esencial. Formación espiritual y pastoral
Si después de los años de seminario no se ha logrado formar la caridad pastoral, el celo sacerdotal, se puede decir que ha fracasado toda la formación. Formación pastoral: caridad pastoral
Debe rechazarse un tipo de formación espiritual fundada en una piedad sentimental y romántica, que aísle del compromiso apostólico y acabe en un narcisismo espiritual. • El verdadero trato con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo abre a la persona al misterio de Dios amor y de Cristo Redentor; y esa apertura le infunde su mismo amor por los hombres y su caridad pastoral. Espiritualidad pastoral
Una pretendida formación "pastoral" desligada de la sólida formación espiritual es sólo un engaño destinado al fracaso • El joven que se prepara al ministerio sacerdotal nutre su celo en una intensa y rica vida interior, en una profunda amistad con Jesucristo, así encamina su futuro ministerio en la dirección correcta. • Su predicación, su acción evangelizadora, su entrega a los fieles, tendrá el respaldo y la eficacia de la unión con Dios. Espiritualidad pastoral
La formación intelectual (académica) ha de estar orientada hacia la formación pastoral. Una preparación intelectual desligada de la misión apostólica conduce al cientifismo, no a la verdadera formación del sacerdote. Formación pastoral e intelectual
El enfoque pastoral de la formación académica tiene dos dimensiones. La primera es la intencionalidad: prepararse en el estudio para realizar eficazmente la propia misión apostólica. Formación filosófica y teológica tomada con seriedad. Enseñar al formando a dar sentido apostólico a sus estudios. El enfoque pastoral de la formación intelectual
La relación intrínseca que tienen los estudios con la misión sacerdotal. • Ver la conexión de las materias (filosofía y teología) con la actividad pastoral y con la misión específicamente sacerdotal. El enfoque pastoral de la formación intelectual
Filosofía y misterios de salvación Teología y ministerio pastoral La enseñanza de la teología en los seminarios está principalmente destinada a formar sacerdotes para el ministerio pastoral. • Que se preste gran atención para mostrar a los estudiantes de filosofía la relación que existe entre esta disciplina y los verdaderos problemas de la vida. Poner de manifiesto el nexo existente entre los temas filosóficos y los misterios de la salvación. Aplicación pastoral
La formación humana debe estar impregnada de una profunda orientación pastoral. • Esta orientación añade a la formación humana nuevos contenidos y nuevas perspectivas. Nuevos contenidos por cuanto que el pastor debe poseer algunas cualidades que, de por sí, otro hombre no destinado a esta misión no tendría por qué cultivar con especial empeño. Formación pastoral y humana
Las virtudes humanas se ven en función de la misión. El cultivo de la rica gama de virtudes humanas que debe poseer el sacerdote no tiene como fin la formación de un hombre perfecto, satisfecho de su perfección y cerrado en su autocontemplación. Se busca la perfección humana en orden al mejor cumplimiento de la misión pastoral. Mayor calidad de hombre, mayor calidad de pastor
Formar en el futuro pastor la conciencia de que será pastor en la Iglesia, para la Iglesia y de la Iglesia. Cuando Cristo lo eligió como pastor, lo llamó para que sea ministro de la comunidad fundada por él, de la Iglesia que quiso edificar sobre la roca de Pedro (cf. Mt 16,18) y al que confió el cuidado de sus ovejas (cf. Jn 21,15-17). El amor a la Iglesia forma parte de la correcta formación pastoral del seminarista, además de ser un contenido específico de su vida espiritual. En la Iglesia, para la Iglesia, de la Iglesia
El futuro sacerdote debe entender que fuera de la Iglesia su misión carece de sentido. El estilo de su acción sacramental, habrá de estar impregnado de un profundo sensusEcclesiae. • Y toda su acción pastoral deberá desarrollarse en el signo de la armonía con el Pastor Supremo y universal, con su obispo, pastor de su iglesia particular, y con sus hermanos en el presbiterio. En la Iglesia, para la Iglesia, de la Iglesia
Rasgos del Pastor en el Antiguo Testamento Identidad del ministerio presbiteral
La imagen bíblica del pastor alcanza su sentido pleno en Jesús, quien se llama a sí mismo «el buen pastor». Este apelativo está en contraste con los malos pastores, citados con frecuencia en la Biblia. • De pastores se habla muchas veces: «Fue Abel pastor y Caín labrador» (Gen 4,2); «Jacob siguió apacentando el resto del ganado de Labán» (Gen 30,36); José apacienta el ganado con sus hermanos (Gen 37,2); Moisés es pastor del ganado de Jetró (Ex 3,1); David es pastor de ovejas (1 Sam 11,11). Imagen bíblica del pastor
Con diversos matices en su significado, la raíz hebrea para «pastor» y «pastorear» es r`h. Sólo una vez los Setenta traducen por el griego poimainein,otra raíz nhg (en forma piel nihag), con el sentido de guiar (Sal 48,15: «Os guiará por encima de la muerte»). • «Conducir es la acción de Yahveh con su pueblo, a lo largo de la historia, bajo la imagen del pastor (Sal 23,3; 28,9; 78,53; Is 49,10; 58,11)». Es la acción propia de Yahveh
Otro significado, teológico, de r'h es el de alimentar, regir, gobernar: «Y las retraeré de en medio de las gentes, y las reuniré en todas las tierras, y las llevaré a su tierra, y las apacentaré sobre los montes de Israel, en los valles y en todas las regiones del país. Las apacentaré en pastos pingües...» (Ez 34,1314; cfr. Is 14,30; 61,5). Significado teológico
«Yo os daré pastores según mi corazón, que os apacentarán sabiamente» (Jer3,15). • «Y así será la paz» (Mich5,56). Conforme a la sabiduría que conduce a la paz
Aquí nos interesa principalmente este último sentido, ya que el Buen Pastor por antonomasia, Jesús, lo es porque gobierna y rige, conduce y alimenta, defiende y cura. • Este Buen Pastor es entendido en el contexto y tradición de los buenos y malos pastores de Israel. Por eso nuestra atención se centra primero en el Antiguo y después en el Nuevo Testamento. Jesús el buen pastor
Son denominados pastores en Israel: a) los gobernantes, b) Yahveh Dios y, c) el Mesías. Antiguo Testamento
Gobernante pastor Identidad del ministerio presbiteral
No es exclusivo de Israel el llamar a los gobernantes pastores, en sentido metafórico, ya que encontramos en Homero la expresión poimenalaon, pastor de pueblos, aplicada a los reyes. • En el Sal 77,21, aunque no se encuentra explícita la raíz r'h (en griego poimainein) la metáfora del pastor está aplicada a Moisés y Aarón, guías del pueblo: «Condujiste (hodegesas) como grey a tu pueblo por mano de Moisés y de Aarón». El gobernante, pastor del pueblo
El segundo jefe del pueblo y sucesor de Moisés, Josué , es comparado a un pastor: • «Moisés habló a Yahveh, diciendo: Que Yahveh, el Dios de los espíritus de toda carne, constituya sobre la asamblea un hombre que los conduzca y acaudille, para que la muchedumbre de Yahveh no sea como rebaño de ovejas sin pastor».
El título es aplicado a los jueces de Israel en 2Sam 7,7: «Y en todo el tiempo en que anduve con los hijos de Israel, ¿he dicho yo palabra a ninguno de los jueces de Israel, a quienes mandé que apacentaran mi pueblo de Israel, de hacerme una casa de cedro?» Título aplicado a los jueces
Aunque no se da explícitamente el título de pastor a los reyes de Israel, a David se le aplica la metáfora de apacentar al pueblo, al constituirle rey: «Además Yahveh te ha dicho: apacienta a mi pueblo y sé jefe de Israel». (2Sam 5,2. Cfr. Sal 78,70-72). Oficio aplicado a los reyes
Miqueas profetiza en contra de Ajab, porque no sabe guiar a Israel: «Yo he visto a todo Israel disperso por los montes, como ovejas sin pastor, y Yahveh me dijo: Son gentes que no tienen señor, que se vuelva cada uno en paz a su casa». (1Re 22,17). Oficio aplicado a los reyes
Entre los apóstatas de Israel, Jeremías coloca a los pastores que, por el contexto, parecen ser los reyes: «los sacerdotes no dijeron ¿dónde está Yahveh?, y los depositarios de la Ley no me conocieron, y los pastores se sublevaron contra mí, y los profetas se hicieron profetas de Baal y se fueron detrás de los que nada valen». (Jer2,8). Oficio aplicado a los reyes
La Biblia aplica también el nombre de pastores a los príncipes gentiles: «Ululad, pastores, y clamad, y encenizaos, mayorales de la grey, porque ha llegado el día de vuestra matanza y caeréis como carneros selectos. No habrá posibilidad de huir para los pastores, ni salvación para los mayorales de la grey». (Jer 25,34-35; cfr. Nah 3,18). Oficio aplicado a los reyes
En concreto, se da a Ciro este título: «El que dice a Ciro: tú eres mi pastor, y él hará lo que yo quiera...» (Is 44,28).
Dios pastor Identidad del ministerio presbiteral
«Que el Dios en cuya presencia anduvieron mis padres, Abraham e Isaac, el Dios que me ha sustentado (haro'eh) desde que existo hasta hoy...» (Gen 48,15). • «Pero la cuerda del arco se les rompe, y su poderoso brazo se encoge, por el poderío del fuerte de Jacob, por el nombre del pastor de Israel» (Gen 49,24). Dios es el pastor
Con este nombre se le invoca en Sal 23,1: «Yahveh es mi pastor». • Y en Sal 80,2: «Pastor de Israel, apresta el oído». Pastor de Israel
A pesar de la sobriedad con que se emplea el título para Dios, sin embargo, las relaciones con el pueblo o con los individuos están descritas frecuentemente como las de un buen pastor con sus ovejas. Pastor de Israel
Isaías (40,11) describe la acción de Dios en la liberación de su pueblo con estos términos: • «Él apacentará su rebaño como pastor, Él le reunirá con su brazo, Él llevará en su seno a los corderos y cuidará a las paridas». Pastor de Israel
Dios fue guía del pueblo en el desierto y lo sigue siendo después: • «Él, cierto, es nuestro Dios, y nosotros el pueblo de sus pastos, el rebaño conducido por su mano. ¡Si escucharais hoy su voz!» (Sal 95,7; cfr. Sal 80,2). Pastor de Israel
El Sal 78, donde se recogen bellísimas lecciones de la historia, afirma en los vers. 52,53, refiriéndose al Éxodo: • «Llevó luego a su pueblo como grey, le guió como rebaño por la estepa. Al seguro los condujo, sin temor, mientras sepultaba el mar a su enemigo». Pastor de Israel
También en los profetas encontramos la parábola: «Porque, como novilla cerril, es cerril Israel; por eso en adelante los apacentará (r`h) Yahveh como a oveja en lugar amplio» (Os 4,16); «Yo te alimenté (v. gr. LXX y siriaca) en el desierto, en la tierra abrasada» (Os 13,5). Jeremías (13,17) llora «porque ha sido hecho cautivo el rebaño de Yahveh». Pastor de Israel
Pero, una vez liberados, los presos «en todos los caminos serán apacentados, y en todas las alturas peladas tendrán sus pastos. No padecerán hambre ni sed, ni les afligirá el viento solano ni el sol, porque los guiará el que de ellos se ha compadecido» (Is49,9-10). • «Yahveh los reunirá» (Ez 34,11 ss.). Pastor de Israel
El mesias pastor Identidad del ministerio presbiteral
Porque los guías de Israel han sido malos pastores, Yahveh va a colocar su rebaño bajo el cayado del nuevo David. El título de pastor es un elemento de la esperanza escatológica. Nuevo David
En los profetas se condena a esos pastores infieles a su misión: «Mis guardianes son ciegos todos... son pastores que no entienden, siguen cada uno su camino, cada cual busca su interés» (Is56,10-11); «rebeldes contra Yahveh» (Jer2,8); «insensatos, no le buscaron» (Jer10,21).
En los profetas se condena a esos pastores infieles a su misión: «entraron a saco en el pueblo y lo pisotearon» (Jer 12,10); «destrozaron el rebaño, dispersaron la grey» (Jer 23, 12); «extraviaron al pueblo» (Jer 50,6); «dejarán de ser pastores, porque se apacientan a sí mismos en vez de cuidar el rebaño» (Ez 34,1-10).
Por ese mal comportamiento de los pastores, Yahveh mismo reunirá los restos del rebaño dispersado (cf. Jer23,3) y herido (cf. Mi 4,6), lo apacentará en los montes de Palestina (cf. Jer50,19) y lo protegerá personalmente (cf. Jer31,10). Resto de Israel
Yahveh proveerá al pueblo de pastores según su corazón: «Que os apacentarán sabiamente» (Jer3,15). «Y ya no habrán de temer más ni angustiarse ni afligirse» (Jer23,4).