R eflexiones cedapp

1. Reflexionescedapp centro de desarrollo y asesoría psicosocial Nº 2 – Año 2004 “Día Mundial de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer ”. Dos terceras partes de las mujeres que recibimos tenían bajo nivel de instrucción, no habiendo completado escolaridad primaria ni secundaria. Incluso algunas de ellas no sabían ni leer ni escribir, o lo habían aprendido pero ya no lo recordaban (analfabetas funcionales). El tercio restante tenía estudios secundarios o superiores completos. Incluso llegamos a recibir a una mujer profesional con estudios de postgrado. Esta situación nos hizo pensar que, si bien el nivel de instrucción no determina que una mujer sea o no víctima de violencia, sí condiciona los recursos que tiene para afrontar la violencia y el tiempo que le toma su “recuperación”, pues en nuestra experiencia ocurrió que las mujeres que tenían mayor formación profesional fueron aquellas que estuvieron menos cantidad de tiempo albergadas y las que demostraron mayor madurez emocional y juicio de realidad. Otra cifra significativa para nosotros fue que más de la mitad de las mujeres albergadas también habían sido víctimas de maltrato durante su infancia o adolescencia. Lo que nos sorprendió más aun fue constatar que en la mayoría de estos casos se había tratado de situaciones de abuso sexual por parte de algún familiar o persona conocida por la víctima. Otro hecho resaltante fue que varias de ellas no refirieron estas experiencias en el momento de la admisión, sino que lo hicieron recién varias semanas después de haber ingresado al refugio y de participar del grupo terapéutico. En algunos casos, incluso, refirieron que nunca antes habían “dicho” a alguien algo acerca de este abuso. ¿Qué es la violencia contra la mujer? “La violencia contra la mujer es cualquier acción o conducta, basada en el género, que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como privado. Se trata de un problema que afecta los derechos humanos de las mujeres y un importante problema de salud pública, según está reconocido en diversos foros y en la Ley General de Salud vigente”[1]. ¿Cuál es el trabajo de Cedapp en este ámbito? Cedapp ha incluido en su trabajo institucional el enfoque de género y la atención y prevención de las violencias. Es desde este marco que se implementó, junto con otras dos organizaciones[2], un proyecto de intervención denominado “Casa Refugio Rebeca”. Esta propuesta, que consistió en un albergue temporal para mujeres y sus hijos e hijas menores de 11 años, funcionó desde junio de 2002 hasta marzo de 2004. Para contribuir a reflexionar sobre la problemática de la violencia contra la mujer, queremos difundir algunos datos elaborados a partir de la sistematización de dicha experiencia. ¿Quienes y cómo eran las mujeres que recibimos en Casa Refugio Rebeca? El rango de edad de mujeres albergadas estuvo entre los 15 y los 60 años, si bien la mayoría eran adultas jóvenes, entre los 20 y los 35 años. Este resultado nos hizo reflexionar acerca de la mayor visibilidad que tiene la problemática de la violencia contra la mujer desde hace unos 10 años a esta parte, y cuánto puede haber incidido esto en que las mujeres jóvenes “aguanten” menos tiempo una relación violenta. Av. Diez Canseco 796, San Antonio – Miraflores Telf.: 241-9009 - Fax(51-1) 241-7096 E-mail: cedapp@terra.com.pe http://WWW.cedapp.org.pe

2. Reflexiones cedapp No 2 -2004 Esto nos hace concluir cómo la desconfianza y el aislamiento, consecuencias de la violencia sexual sufridas en su infancia o adolescencia, las dejó en mayor riesgo de ser víctimas de violencia en sus relaciones de pareja. Otra característica común (también presente en más de la mitad de las mujeres albergadas) fue que habían migrado de sus lugares de origen siendo niñas o adolescentes. Esto nos hizo reflexionar cómo la falta de redes familiares y sociales de soporte, junto con la experiencia de desarraigo, había puesto a estas mujeres en una situación de mayor vulnerabilidad frente a la violencia a la hora de constituir una pareja. Otra característica común (también presente en más de la mitad de las mujeres albergadas) fue que habían migrado de sus lugares de origen siendo niñas o adolescentes. También esto nos hizo reflexionar cómo la falta de redes familiares y sociales de soporte, junto con la experiencia de desarraigo, había puesto a estas mujeres en una situación de mayor vulnerabilidad frente a la violencia a la hora de constituir una pareja. Con respecto a su situación laboral a la hora de ingresar a Casa Refugio Rebeca, la mayoría de las mujeres no tenían ocupaciones fuera del ámbito doméstico. Solo una minoría tenían empleos independientes y fueron éstas las que requirieron menor tiempo de estadía, justamente porque contaban con recursos que le podían asegurar su autonomía económica frente a la pareja. Estas tres características –haber sido víctimas de abuso sexual, la migración durante la infancia o adolescencia, y su pocaautonomía económica- coinciden con lo señalado por diversos estudios en otros países, como Ecuador y Argentina. Por último, hay que destacar que la gran mayoría de mujeres que albergamos en Casa Refugio Rebeca ya habían puesto denuncias por maltrato de sus parejas en ocasiones anteriores a su ingreso al refugio. Además, varias de ellas se habían separado en alguna oportunidad de la pareja agresora o habían terminado la relación con una pareja anterior por la violencia, pero, pese a ello, habían iniciado otra relación signada también por la problemática de la violencia. Algunas palabras finales Creemos que la descripción anterior permite visualizar por qué es necesaria una mirada integral a la problemática de la violencia contra la mujer. Esto implica entenderla como un fenómeno multidimensional y complejo, que está atravesado por factores sociales y culturales como las relaciones de poder entre los géneros y las generaciones, y por cuestiones subjetivas, ligadas a los afectos y los vínculos entre las personas. Ambas dimensiones, la social cultural y la subjetiva, se entrecruzan. Es por ello que, para ser abordada de manera eficiente, la problemática de la violencia contra la mujer necesita de la concurrencia de varias disciplinas y saberes, junto con la actuación concertada de los diversos organismos, del estado y de la sociedad civil, principalmente en las áreas de salud, trabajo, desarrollo social y justicia [3]. Soledad Alvarez Acogedora de “La Casita del Juego”Responsable de la elaboración de las “Guías sobre Desarrollo Infantil para padres y docentes”. [[1] Marcassi León, I. Y Casaverde Dammert, M. “Violencia familiar, violencia sexual, aborto, derechos reproductivos. Informe 2003”. Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, [2]Las otras dos instituciones fueron Demus (Estudio para la defensa de los Derechos de la Mujer) y la Gerencia de Bienestar Social de la Municipalidad del distrito de San Borja. 3] Con esto no queremos decir que otras áreas no sean pertinentes para trabajar el tema de la violencia contra la mujer, pero desde una intervención desde el ámbito psicosocial consideramos que la articulación con estos sectores es la prioritaria. Av. Diez Canseco 796, San Antonio – Miraflores Telf.: 241-9009 - Fax(51-1) 241-7096 E-mail: cedapp@terra.com.pe http://WWW.cedapp.org.pe