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Salmo de Pablo a Cristo. “No me atreveré a hablar de cosa alguna que Cristo no haya realizado por medio de mí” (Rm 15,18). “Dios se dignó revelar a su Hijo en mí” (Gal 1,15). “La prueba de que Dios me ama es que Cristo, siendo todavía pecador, murió por mí” (Rm 5,8).
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“No me atreveré a hablar de cosa alguna que Cristo no haya realizado por medio de mí” (Rm 15,18).
“La prueba de que Dios me ama es que Cristo, siendo todavía pecador, murió por mí” (Rm 5,8).
“Cristo me amó y se entregó a sí mismo por mí” ( Gal 2,20).
“En mí manifestó Jesucristo toda su paciencia” (1Tim 1,16).
“A mí, el menor de todos los santos, me fue concedida esta gracia: la de anunciar a los gentiles la inescrutable riqueza de Cristo” (Ef 3,8).
“La gracia de nuestro Señor sobreabundó en mí, juntamente con la fe y la caridad en Cristo Jesús” (1Tim 1,14).
“Doy gracias a aquel que me revistió de fortaleza, a Cristo Jesús, Señor nuestro” (1Tim 1,12).
“Lo que para mí era ganancia lo he juzgado una pérdida a causa de Cristo” (Flp 3,7).
“Para mí la vida es Cristo y la muerte, una ganancia”(Flp 1,21).
“No vivo yo, sino que es Cristo quien vive en mí” (Gal 2,20).
“El que está en Cristo es una nueva creación; pasó lo viejo, todo es nuevo” (2Cor 5,17).
“El Evangelio anunciado por mí lo aprendí por revelación de Jesucristo”(Gal 1,11).
“Me alegra y seguirá alegrándome que Cristo sea anunciado” (Flp 1,18).
“Que toda lengua confiese: El Señor es Jesucristo”(Flp 2,11).
“No me avergüenzo del Evangelio, que es una fuerza de Dios para la salvación de todo el que cree” (Rm 1,16).
“¿Quién me separará del amor de Cristo? En todo salgo vencedor gracias a Aquel que me amó” (Rm 8,35-37).
“No me predico a mí mismo, sino a Cristo Jesús como Señor” (2Cor 4,5).
“Cristo me dijo: Mi gracia te basta, que mi fuerza se muestra perfecta en la flaqueza” (2Cor 12,9).
“Con sumo gusto seguiré gloriándome sobre todo en mis flaquezas, para que habite en mí la fuerza de Cristo”(2Cor 12,9).
“¡Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz de nuestro Señor Jesucristo” (Gal 6,14).
“Por Jesucristo estoy sufriendo hasta llevar cadenas como un malhechor”(2Tim 2,9).
“Llevo siempre en mi cuerpo por todas partes el morir de Jesús, a fin de que también la vida de Jesús se manifieste en mi cuerpo” (2Cor 4,10).
“Completo en mi carne lo que falta a las tribulaciones de Cristo, a favor de su Cuerpo, que es la Iglesia”(Col 1,24).
“Así como abundan en mí los sufrimientos de Cristo, igualmente abunda también por Cristo mi consuelo” (2Cor 1,5).
“Continúo mi carrera por si consigo alcanzarlo, habiendo yo mismo alcanzado por Cristo Jesús” (Flp 3,12).
“Sed imitadores míos, como yo lo soy de Cristo” (1Cor 11,1).
“Testigo me es Dios de cuánto os quiero a todos vosotros en el corazón de Cristo Jesús”(Flp 1,8).
“Vosotros sois el cuerpo de Cristo” (1Cor 12,27).
“Habéis sido bien comprados. ¡Glorificad a Dios en vuestro cuerpo!” (1Cor 6,20).
“Sois una carta de Cristo, redactada por ministerio nuestro, escrita no con tinta, sino con el Espíritu de Dios vivo, en los corazones” (2Cor 3,2).
“Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres”(Flp 4,4).
“Si solo para esta vida tenemos puesta nuestra esperanza en Cristo, ¡somos los más dignos de compasión de todos los hombres!”(1Cor 15,19).
“La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros” (Rm 16,20).
“Todo es vuestro, y vosotros de Cristo, y Cristo de Dios” (1Cor 3,21-23).
“Nadie puede decir: ¡Jesús es Señor! Sino en el Espíritu Santo” (1Cor 12,3).
“A Dios, el único sabio, por Jesucristo, ¡a él la gloria por los siglos de los siglos! Amén” (Rm 16,17).
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