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DE UNA MUERTE CON MIEDO A UNA VIDA CON GOZO. QUINTO MOVIMIENTO. MORIRÉ. Pocos están listos, preparados para morir. Sé que hay que morir; pero no lo creo. Se vive como si jamás se hubiera de morir. Cuando sobreviene un fallecimiento los mortales se asombran de que un mortal haya muerto.
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DE UNA MUERTE CON MIEDO A UNA VIDA CON GOZO QUINTO MOVIMIENTO
MORIRÉ • Pocos están listos, preparados para morir. • Sé que hay que morir; pero no lo creo. • Se vive como si jamás se hubiera de morir. • Cuando sobreviene un fallecimiento los mortales se asombran de que un mortal haya muerto
¿Quién nos separará del amor de Cristo? Romanos 8, 35 • El Dios que nos creó y nos llamó “amados” antes de que naciéramos siquiera, vive con nosotros y en nosotros. • Nada puede separarnos de ese amor de Dios en Cristo aún en medio de la realidad de la muerte, que muchos preferimos ignorar o evitar.
Atrapados en la humanidad • Dificultades • Quebranto interior, • Discusiones con la familia • Presión en el trabajo • Conflicto con los amigos • La enfermedad. • Y otras tantas cosas más nos recuerdan lo pequeño, insignificantes y vulnerables que somos.
Intentamos liberarnos de esta trampa a través de: • del dinero • un empleo diferente • un cónyuge diferente • una casa mejor, • una nueva dieta, • un programa de ejercicios. • Queremos ser más de lo que somos. • No nos contentamos con un poquito de vida, con un poquito de amor.
Pequeñas muertes • El nacimiento • La escuela • La universidad • El matrimonio • EL primer empleo • El momento de retiro • Nos recuerdan que el temor y el amor nacen al mismo tiempo. Jamás se separan del todo en nuestra existencia. Pero también esas pequeñas muertes nos traen vida. Nos permiten aprender a dejar las cosas atrás. Nos preparan para descubrir una vida diferente de la que conocimos hasta ese momento.
MORTIFICACIÓN • La vida es una escuela en la que se nos enseña a partir. • Esto es lo que significa en realidad la mortificación: el entrenamiento a morir, para cortar los lazos que nos mantienen esclavos del pasado. Entonces lo que llamamos muerte ya no es una sorpresa, sino las última de muchas puertas que nos llevan a ser seres humanos completos.
EL FINAL NO ESTÁ A LA VISTA • ¿Por qué no nos preparamos para la muerte si vivimos tan cerca de ella? • Culturalmente se hace un gran esfuerzo por evitar la muerte. • Intentamos cubrirla, esconderla con cosméticos y todo tipo de esfuerzos. Cuando alguien sufre queremos mantenernos alejados. Cuando alguien muere no queremos enfrentar de lleno la muerte. Decimos: “falleció”, “se fue”, “nos dejó”. Y aunque tenemos la certeza de que todos moriremos negamos la muerte como si fuera la cosa más irreal.
¿QUÉ ES LA MUERTE? • Yo no lo sé. Usted tampoco lo sabe. Nos encontramos reducidos a tener que admitir que la muerte viene de manera personal, única para cada uno, ¿Quién puede decir algo en esto? Una cosa, sin embargo, suena cierta: en la muerte damos un salto, renunciamos, dejamos ir, nos entregamos y abandonamos el lugar seguro que conocemos, que nos es cómodo, lo hagamos de forma voluntaria o involuntaria. • No sabemos que hay más allá de nuestra vida. No podemos pronosticar nada de nuestro futuro. La fe nos pide que saltemos, que nos entreguemos y creamos que en algún lugar, de algún modo, alguien nos atajará y nos llevará a casa.
NO LLORES SI ME AMAS San Agustín
¿QUÉ ES LA MUERTE? • Necesitamos aprender cómo morir tiene que ver con vivir cada día con el pleno conocimiento de que somos hijos de Dios, cuyo amor es más fuerte que la muerte. • Cada vez que podemos disfrutar del presente aun sabiendo que el mañana tendrá al menos algunos momentos difíciles, algunas incertidumbres, algunos recordatorios de nuestra mortalidad, podemos aprender a extender nuestros brazos hacia Aquél en quien confiamos, hacia Aquel grandioso.
LA PALABRA DE DIOS LLAMA A MIRAR DE FORMA SIMPLE Y CLARA LA MUERTE
LA RESURRECCIÓN DE LÁZARO JUAN 11, 28-46 • El llamado de Jesús a la vida surgió de sus lágrimas y del suspiro que nació en la profundidad de su corazón. • Nuestra muerte puede convertirse en señal de gloria. Jesús mostró lo preciosa que es en verdad nuestra vida: lloró, se lamentó. Y de ese lamento nació nueva vida. Es a través de la muerte que llegamos a lo profundo de la vida.
MORIRÉ • Creemos en la muerte; pero, ¡qué difícil es hacer la aplicación de sí mismo! • Sin duda, mi vecino, mi amigo, mi conocido morirá; pero yo también. • La tendencia de todos es instalarse. • Construimos casas para estar. Pero se habita poco tiempo y viene otros detrás, que serán pronto sustituidos por otros.
LA TIENDA DE CAMPAÑA ÉXODO 29, 42-46 LEVÍTICO 23, 39-44 2 CORINTIOS 5, 4
LA FIESTA DE LAS TIENDAS • Cómo lo hemos escuchado el origen de esta fiesta de las Tiendas es de origen agrícola. • El hombre da gracias al Creador de todas las cosas, que en su bondad, ha concedido, otra vez, los frutos de la tierra. • Pero pronto el pueblo de Israel adoptó la costumbre para evocar la travesía larga del pueblo en el desierto, después de la liberación de la esclavitud de Egipto, dando gracias a Dios por haber provisto las necesidades de sus hijos, en especial por el envío fiel del maná. • Año con año renovaban su abandono en la Providencia.
LA FIESTA DE LAS TIENDAS • Por esta evocación del éxodo, Sukkot, se volvió igualmente la celebración de la cohabitación de Dios y de los hombres. • En el desierto, el Señor vino en efecto, a vivir bajo una tienda, compartiendo las condiciones precarias de su pueblo. Él acompañó, desde entonces a Israel en su vida nómada, hasta la entrada en la Tierra Prometida. • Esa presencia se realiza plenamente en Cristo: Juan 1, 14.
LA FIESTA HOY • Para concretizar, los diferentes aspectos de la fiesta, hoy, todavía, cada familia emprende la construcción de una tienda hecha de materiales pobres, tales como las palmas y las ramas, o menos poético como los cartones y pedazos de lámina. • Por una semana la familia se reunirá bajo la “tienda” especialmente para tomar allí sus comida, y en la noche, el más joven de la familia tendrá hasta el privilegio de dormir allí. • En medio de la oscuridad, descubriendo a través de las ramas del techo el centelleo de las estrellas, él aprenderá que el cielo es su verdadera morada, y que su existencia precaria, en este mundo lo conduce allí.
CÓMO DECIR ADIÓS JUAN 16