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En el año 1597 hubo una gran epidemia de peste en la ciudad de Donostia – San Sebastián. Los donostiarras (habitantes de la ciudad) rezaron a San Sebastián para que terminara con la enfermedad. ¡Por favor, que termine la epidemia!. La procesión es un poco aburrida.
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En el año 1597 hubo una gran epidemia de peste en la ciudad de Donostia – San Sebastián. Los donostiarras (habitantes de la ciudad) rezaron a San Sebastián para que terminara con la enfermedad. ¡Por favor, que termine la epidemia!
La procesión es un poco aburrida Beste zerbait asmatubehar da Como la peste desapareció, como agradecimiento, se hizo la promesa de honrar todos los 20 de enero a San Sebastián con una procesión. Así fue como comenzó a celebrarse anualmente esta festividad.
La plaza Dos siglos más tarde, a principios del siglo XIX, la ciudad de Donostia - San Sebastián, al ser una plaza fuerte, estaba rodeada de murallas y ocupada por soldados. Sus habitantes, que principalmente se dedicaban al comercio y la navegación, no tenían más remedio que vivir en un ambiente militar.
¡Como si esta fuente fuera muy rápida! ¡Este chico va muy lento! En aquella época en la ciudad de San Sebastián para abastecerse de agua potable, había dos fuentes públicas en las que se formaban largas colas para poder llevarse agua a casa. Mientras esperaban turno discutían y hablaban.
La cola ¡Qué mal lo hacen! Nosotros lo hacemos mejor Traemos música Gracias por la música En estas colas aguardaban su turno: mujeres, soldados y panaderos con sus barriles de madera
Goazen jotzera! Hau azpergarria da-eta! En espera de la llegada del turno, para entretener la espera, habitualmente se parodiaban las marchas militares haciendo resonar los recipientes para el agua.
Todos haciendo sonar tambores y barriles. Asíse creó la tamborrada Hasta que un 20 de enero (por aquel entonces primer día de carnaval), toda la gente disfrazada con ganas de divertirse, e incluso los mismos soldados, se unen a este improvisado concierto haciendo sonar tambores y barriles de forma coordinada.
A partir de entonces, recordando a aquellos panaderos y soldados que esperando turno en las fuentes hacían sonar barriles y tambores, comenzó a celebrarse anualmente la “Tamborrada” el día de San Sebastián. Niri gaizki ateratzen zait ¡Que divertido!
Esta es la tamborrada infantil, en la que tocan los niños y niñas de los colegios de Donostia - San Sebastián. Ze polita den! ♪ Sebastián.. Bat bada zeruan..♫ La tamborrada nació como una parodia de las marchas militares. Por lo que, hoy en día, en todas las tamborradas sus participantes siguen apareciendo ataviados de dos formas: bien de panaderos (tocando barriles), o bien de soldados napoleónicos (tocando tambores).