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LA VOZ APACIBLE Y DELICADA. Por H.Engels. Vea 1 de Reyes 19:11-13 Esa expresi ón: “un silbido apacible y delicado”, ha llegado a ser reconocido casi como un nombre del Espíritu Santo. Había otro corazón en Israel tan poseído del diablo, como Elías lo estaba del Espíritu santo.
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LA VOZ APACIBLE Y DELICADA Por H.Engels.
Vea 1 de Reyes 19:11-13 • Esa expresión: “un silbido apacible y delicado”, ha llegado a ser reconocido casi como un nombre del Espíritu Santo. • Había otro corazón en Israel tan poseído del diablo, como Elías lo estaba del Espíritu santo.
Jezabel dijo: “Así me hagan los dioses, y aún me añadan, si mañana a estas horas yo no he puesto tu persona como la de uno de ellos”. ( 1de Reyes 19:2 ). • Fue esa una bien dirigida descarga lanzada, y en un instante realizó su obra desastrosa. • El profeta de fuego se sintió intimado como si hubiese sido un niño.
La gráfica descripción de la huida del profeta tiene algo que nos puede dar risa. • “ Elías se levantó y se fue para salvar su vida. ( 1 de Reyes 19:3 ), no se detuvo hasta que llegó a Beerseba, situada casi en los confines del país. • Pero ni aún allí se detuvo, sino que dejando atrás a su criado, siguió en dirección del desierto, hasta que exhausto, hambriento y cansado, se sentó en el terreno arenoso, debajo de un enebro y dijo: “ Basta ya, OH Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres” (19:4)
Dios cuidó tiernamente a su fatigado criatura, le hizo dormir. Después hizo que un ángel le despertara y le diera de comer, hasta que recuperó las fuerzas y estuvo en condición de poder seguir el viaje. • (1Reyes 19:5-7) 5 Se recostódebajo del arbusto y se quedódormido. Y he aquíque un ángel le tocó y le dijo: --Levántate, come.
6 Entoncesmiró, y he aquíque a sucabecerahabíaunatortacocidasobrelasbrasas y unacantimplora de agua. Luegocomió, bebió y se volvió a recostar. • 7 Entonces el ángel de Jehovávolvióporsegundavez, y le tocódiciendo: --Levántate, come, porque el caminoesdemasiado largo parati. • 8 Se levantó, comió y bebió. Luego, con lasfuerzas de aquella comida, caminócuarentadías y cuarentanocheshastaHoreb, el monte de Dios.
Vemos que Dios lo envió a Horeb, que era el Monte de Dios. • Allí en alguna abertura entre las rocas, a la entrada de la cueva el profeta esperó el mensaje de su Dios.
Se sentía agitado e inquieto. Le pareció que su vida era un fracaso. • Se encontraba en ese estado de ánimo en lo que deseaba era ver que ocurriera algo. • No tuvo que esperar mucho tiempo antes que se cumpliera lo que había estado pensando, y Dios comenzó a hablarle por medio de la voz de la naturaleza.
A. EL TEMBLOR • Primero se produjo un fuerte temblor de tierra, que rompió los montes y deshacía las peñas y hacía sacudir el desierto como se mecen las olas del océano. (1 Reyes 19:11) • Pero el profeta contempló toda la escena sin conmoverse. Nada de lo que ocurrió había tocado su espíritu. • El terremoto se vino y se fue, pero Elías sintió que Dios no estaba en el terremoto.
UN VIOLENTO TORNADO. • Vino pues un violento tornado, que llenó el aire de nubes de arena, y el ventarrón sopló violentamente entre las montañas. • Rompió los peñascos arrancándolos de sus bases. • Arrastró los bosques y los lanzó en los abismos.
Sonaban los truenos, y los rayos y relámpagos iluminaban el espacio. • A pesar de todo ese ruido, el profeta no se sintió conmovido. • Pasó aquel tornado, pero Dios no estaba en aquel fenómeno.
EL FUEGO • En seguida vino el fuego. (1 de Reyes 19:12) • Tal vez se trataba de truenos que sacudían al firmamento. • Tal vez eran incendios producidos por los rayos que inflamaban los busques y barrían las faldas de las montañas.
O pudo haber sido algún fuego sobrenatural que cayó del cielo y se presentó ante los ojos de Elías, como el fuego que ardía en el Monte Sinai, siglos antes. • Pero nada de esto le conmovió el corazón. • Después de eso vino algo así como un silencio que precede a la tempestad, o como la pausa enfática de ciertos momentos musicales.
Dicho silencio fue seguido de “ Un silbo apacible y delicado”, más dulce que un canto maternal. • Más tierna que las más tiernas notas musicales. • Tal vez llegó esa voz tanto a lo íntimo del alma del profeta como había llegado a sus oídos exteriores.
Pero había en esa voz algo tan profundo, tan penetrante que hizo estremecer al profeta hasta lo más íntimo de su alma. • Esta voz hizo que su espíritu se quebrantase, que se enterneciese y llegó al más íntimo de su ser. • Ciñéndose su manto, entró a la cueva, postrándose a los pies de Dios, preparándose para escuchar el mensaje que El querría darle.
El corazón impetuoso y fogoso había sido, al fin subyugado. • El poderoso profeta se había rendido y había asumido la actitud de un niño. • ¿Que es lo que significa todo este extraordinaria drama?
1. LA LECCION QUE APRENDIO ELIAS. • Este necesitaba aprender de estar tranquilo. • Tenía que aprender que las fuerzas vienen de Dios. • Y que aún su propia naturaleza fuerte y y tesonero debía ser subyugado.
Debía también aprender el poder más profundo de la ternura y el amor.
2. ELIAS Y ELISEO • En segundo lugar tenía un significado más elevado aún. Fue un especie de cuadro descriptivo de los ministerios de Elías y el de Eliseo. • Elías vino como el invierno antes de la primavera. • Como el arado antes del sembrador.
Como la tormenta antes de la lluvia. • Como el juicio y destrucción. • Pero el sol de la primavera es más fuerte que las tempestades del invierno. • La semillita que cae en tierra es más poderoso que el hierro del arado que abre los surcos.
Así el ministerio de Eliseo fue más poderoso y más fructífero que todos los milagros (destructivos) del gran Elías. • El terremoto, el viento huracanado y el fuego de sus terribles juicios, tuvieron que pasar . • Y la voz callada y suave de las enseñanzas tiernas de Eliseo, de los milagros de gracia que realizó, este tuvieron que re-emplazar a Elías y sus actividades.
3. LA NUEVA DISPENSACION. • Elías y su ministerio fueron figuras típicas de la ley y de Moisés. • En cambio Eliseo fue una figura típica del Señor Jesucristo del Evangelio y de Su gracia.
Vemos pues, que la escena que se produjo en Horeb fue una representación de la diferencia que hay entre la ley y la gracia. • Entre el juicio y la misericordia. • Entre la antigua dispensación y la nueva.
Dios ya lo había probado cuán poco se consigue únicamente con la disciplina para perfeccionar el carácter humano y para darle justicia duradera. • Todo el sufrimiento y todo el castigo, no servía nada, y terminó en desterrados del pueblo.
Gracias a Dios, hay un camino mejor. • El evangelio de su gracia, la ternura de su amor, y el poder del Espíritu Santo. • La voz callada y suave del amor de Jesús es mucho más poderosa que todos los truenos del Monte Sinaí o que los ejércitos Asirios y Caldeos. • El terremoto, el viento huracanada y el fuego han desaparecido, pero la voz callada y suave, del Calvario y de Pentecostés sigue hablando a millones de almas, y les conduce de nuevo a Dios y al justicia del cielo.
LA EXPERIENCIA DEL ALMA INDIVIDUALMENTE • Nosotros también tenemos que pasar por el terremoto, por el viento huracanado y por el fuego, buscando a Dios en vano. • Es posible que lleguemos a este estado por medio de grandes pruebas que nos desgarran el corazón y que nos aplastan el espíritu • Pero el sufrimiento no tiene ningún poder salvador.
El corazón humano puede quedar destrozado, y sin embargo cada trozo de él podrá seguir lleno de orgullo y soberbia, como lo era cuando estaba en una sola pieza. • Se requiere de la tranquila y serena influencia del Espíritu Santo para cambiar el corazón y para santificar el alma.
En el interior de nuestra alma, existe un afán por hallar a Dios y disfrutar de paz. • ¡OH, como luchamos y como soportamos fuertes aflicciones. • Pero al sentirnos impotente para cambiar la situación, nos quedamos quietos a los pies de Cristo.
Nos encontramos en los brazos de su amor y poder. • La quietud es tan tranquila que muchas veces no nos damos cuenta ni de nuestra propia existencia, ni de nuestros sentimientos. • La misma presencia de Dios es tan “apacible y delicada” que, para oírla, tenemos que silenciar cualquier otro sonido que hubiese.
La verdad es que la primera sensación que se produce en el alma es de un gran vacío, un sentimiento de aridez, de nulidad, uno se siente propenso a desalentarse y decir” es eso lo que quiere decir cuando se habla del descanso de la fe”. • Mas no tardamos en darnos cuenta que, al sentirnos nulos es exactamente el momento en que comienza a manifestarse la presencia de Dios que nos hace capaces de todo.
Y como estamos dispuestos a descansar en nuestra nulidad, confiando en la suficiencia de Dios. • No transcurre mucho tiempo antes que comencemos a oír la dulzura de esa voz y a reconocer su potencia.
EL ESPIRITU SANTO COMO LA VOZ DE DIOS • La voz callada y suave tenía tras sí una mente capaz; una personalidad viva y un corazón amoroso y era mucho más potente que todas las fuerzas que la habían precedido. • ¡OH, el poder de la voz! ¿Cómo perdura en nuestra memoria?
Dios ha hablado una vez con la voz de la creación, pero aquel lenguaje era como el modo inarticulado del terremoto, del viento huracanado y del fuego. • Dios ha hablado por segunda vez, con la voz de la Santa Palabra y su Hijo bendito, y ese es el mensaje que trae al hombre luz, vida y salvación.
Una voz es algo más que un mensaje • Es algo más que una página escrita. • Más que un libro inspirado. • La voz incluye la persona que habla y las palabras vivas que nos dirige personalmente • De ese modo nos habla Dios, no solo en la Biblia, sino con su propia voz personal.
Juan 10:4+5 Y cuando saca fuera a todas las suyas, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz. • Pero al extraño jamás seguirán; más bien, huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños.”
Dios tiene una voz especial para cada uno de sus criaturas y a nosotros nos es dado el privilegio de conocer su voz. • ¡Cómo nos habla, cómo nos satisface, cómo se identifica con nosotros y nos hace saber que él es el Señor! • ¡Cómo expresa su aprobación del plan que él recomienda!
¡Cómo sella la promesa que él nos ha sugerido, y como su aprobación cae como bálsamo sobre la sangrante herida! • ¡Cómo nos hace comprender las palabras que salen de los labios del que habla, y nos hace ver que son los mensajes vivos que envía Dios! • ¡Cómo da énfasis en todo lo que leemos y como su voz dulce y celestial penetra en nuestros corazones agradecidos!
Sal.85:8 Escucharé lo que hable el Dios Jehová; pues él hablará paz a su pueblo y a sus fieles, para que no se vuelvan a la locura.
6. EL PODER DE LA TERNURA • Una nueva versión habla de: “el sonido una suave quietud”. • Se refiere a la ternura de Dios. • La ternura es un atributo de las naturalezas más elevadas. • Como: el soldado más valiente
O la persona de más noble carácter. • Son siempre los más humildes y los más tiernos. • El apóstol empleó ese concepto como el más poderoso de sus argumentos, al escribir: “ Os ruego por la mansedumbre y dulzura de Cristo”. ( 2 Cor 10:1). • Jesús dijo: “ Soy manso y humilde de corazón”. ( Mat. 11:29 )
Del Mesías estaba escrito: “No gritará ni alzará su voz, ni la hará oír en la calle. • No quebrará la caña cascada, ni apagará la mecha que se está extinguiendo; según la verdad traerá justicia. ( Is. 2+3). • Después vimos al Mesías sufriendo pacientemente las humillaciones, estando de pie ante el tribunal. • También mientras pendía en la cruz.
Dejando a los homicidas que hicieran su obra, sin decir ni una palabra. • El Espíritu Santo, representante de Cristo, también es ternura. • Descendió sobre Jesús en forma de una paloma. • Mora en nosotros en calidad de cariñoso monitor, como tiernísimo Consolador, a quién podemos “ofender” y aún “disgustar”, pero a quién no debemos “airar”.
Para que le obezcamos, apela al recurso de su sensibilidad, haciéndonos ver que podemos ofenderle. • “OH. Que seamos tiernos y tengámosle toda la consideración que merece”. • El no entra a nuestros corazones a la fuerza. • El respeta nuestro libre albedrío. • No nos obliga a que hagamos lo que no deseamos hacer.
Ni a que entreguemos lo que no queremos dar de nuestra propia y libre voluntad. • Solo acepta la obediencia que voluntariamente y alegremente queremos prestarle. • Invitemos pues, la ternura del Espíritu Santo. • ¡Qué en nuestros rostros, en la tonalidad de nuestra voz, y en todos los aspectos de nuestra vida se vean entremezclados el Espíritu del Cordero y el de la Paloma.
EL PODER DE LA QUIETUD • En los Salmos encontramos una palabra elocuente, es la palabra “Selah”. • Significa que en aquel lugar se debe guardar un silencio. • Hasta en las vidas más atareadas y agitadas, debemos buscar un lugar para estar quietos delante de Dios. • Es la única manera de conocerle a Dios.
Ps 46:10 “Estad quietos y reconoced que yo soy Dios”. • Hab 2:20 Pero Jehová está en su santo templo: ¡Calle delante de él toda la tierra! • Tenía un pensamiento que era este, que Dios estaba esperando en lo más profundo de mi ser, para conversar conmigo, si solamente llegaría a estar suficientemente quieto para escuchar Su voz.
Era la dulce voz del Señor, que me estaba hablando desde lo más profundo de mi ser. • Me habló con una ternura inexpresable, poder y consuelo. • Al estar escuchando la voz llegó a ser la voz de oración, y la voz de la sabiduría, y la voz del deber.
Ya no necesitaba pensar tanto, u orar tan fuertemente, o confiar tan duro, pues la “voz apacible y dulce” del Espíritu Santo en mi corazón, era la oración de Dios en mi alma secreta. • Era la respuesta de Dios a todas mis preguntas, era la vida y poder de Dios para alma y cuerpo. • Llegó a ser la sustancia de todo conocimiento, de toda la oración y de todas las bendiciones. • Pues era el Dios viviente mismo como mi vida y mi todo.
Esta es la necesidad más grande que tienen nuestros espíritus. • Esta es la manera de aprender a conocer a Dios. • Es de esta manera que recibimos frescura espiritual y alimentación. • Es de esta manera que nuestros corazones reciben atención y alimentación. • Es de esta manera que recibimos del “Pan Vivo”.
También es de esta manera que recibimos sanidad física, y nuestros espíritus están bebiendo de la vida del Señor viviente. • Y saldremos como la flor que recibió agua, durante las sombras de la noche, habiendo recibido las refrescantes y cristalinas gotas del rocío. • Pero, como el rocío nunca cae durante la noche tempestuosa, asimismo el rocío de Su gracia nunca llegan al un alma agitada.