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PROSA POÉTICA. Al escribir me siento a jugar con las palabras a la espera de que el subconsciente me revele esa metáfora, esa imagen a la que jamás podría llegar con la razón. Busco lo insólito. Quiero clavarle puñales a la razón como la muerte se los clava
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Al escribir me siento a jugar con las palabras a la espera de que el subconsciente me revele esa metáfora, esa imagen a la que jamás podría llegar con la razón.
Busco lo insólito. Quiero clavarle puñales a la razón como la muerte se los clava a la vida.
EL VIENTO NO TIENE GUIÓN Javier Sanz
El niño en cada puñado de arena encuentra un deseo.
Hemos tenido tanta suerte por nacer, que cuesta creer que vayamos a tener más suerte por morir.
Ojalá existiesen los fantasmas, viviríamos más acompañados.
El tiburón es un cocodrilo que se ha hecho un lifting.
El viento no posee nada, no tiene habilidad, todo se le escapa, lo toca todo pero no se queda con nada.
Si al menos al morir, en vez de ser ceniza fuésemos espuma del mar.
Cuando veo la rosa marchita me doy cuenta que su belleza ha sido una violenta explosión.
La luna llena: Parece el agujero que hace el esquimal en el hielo para acceder al mar.
Sería justo que una lágrima de un hombre pudiese apagar el sol.
La metáfora es el aire que está dentro del espejo.
ROJO AFILADO Javier Sanz
El dolor es fácil de entender si Dios no existe, pero si existe …
La soledad le escribe cartas al olvido.
Nunca es más libre la hoja que cuando cae.
El pasado no existe, he ahí el milagro de la memoria.
Hay dos vidas: Cuando juegas con ella, cuando juega contigo.
Apuñalar el negro hasta que sangre.
La tortuga tiene mucha vida interior.
El pez : Aletea fuera del agua, como ala rota.
Águila con vértigo. Topo con claustrofobia.
Anoche tuve una pesadilla. Soñé que estaba dentro de una calavera.
El cuadro de Goya, Saturno devorando a sus hijos, decorando un McDonald´s
Busco el fósil de una pompa de jabón.
H Nieva y ganan las blancas.
Tengo clavado un nunca más y todos los días lo siento.
Soy pesimista porque amo la vida.
Creo en el caos todopoderoso creo en el azar, su único hijo.
En la juventud consideramos la vida un derecho, en la madurez un privilegio.
Al arrojarse al suicida le brotaron alas.
Lo más difícil de creer en Dios es tener que perdonárselo todo.
Queremos una verdad a nuestra medida, a nuestra escala, a nuestro alcance, una verdad que nos convenga, una verdad humana.
El viento no es educado con las puertas.
Un erizo sin afeitar. Una galaxia de estrellas de mar.
Los dinosaurios también tenían ternura, ponían huevos.
El esqueleto, el pijama para soñar con Dios.
La lágrima le caía por su ojo de cristal.
Has vertido tus lágrimas en un frasco y las has derramado en mis ojos.