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LA ETICA DEL SERVICIO PÚBLICO EN LAS INSTITUCIONES DE EDUCACION SUPERIOR. POR CPC LUIS ALFREDO ARGÜELLES MAA, MC. CONTENIDO. Presentación Justificación La Ética La inclusión del concepto “ accountability ” o rendición de cuentas en la administración pública
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LA ETICA DEL SERVICIO PÚBLICO EN LAS INSTITUCIONES DE EDUCACION SUPERIOR POR CPC LUIS ALFREDO ARGÜELLES MAA, MC
CONTENIDO Presentación Justificación La Ética La inclusión del concepto “accountability” o rendición de cuentas en la administración pública Ideas sobre el control de evaluación operacional de las funciones de la universidad Código de ética de los servidores públicos El Acuerdo Nacional para la Transparencia y el Combate a la Corrupción Reorientar la Administración Pública Universitaria en cumplimiento del Acuerdo.
1. Presentación Inicio con la expresión pronunciada por el CPA Manuel Díaz Saldaña Contralor General de la Universidad de Puerto Rico en su conferencia magistral del 15 de febrero de 2000, trascendental para esta exposición: “La corrupción es controlable, el gobierno es manejable y la ética es aplicable” La insuficiencia de recursos públicos para atender todas las necesidades y proyectos de la sociedad quien le ha confiado al estado la búsqueda constante de la excelencia, da como origen que se creen los medios y fomenten las actividades para concretizar el interés general. Al referirme a este tema tan delicado debo hacer una conexión entre la parte teórica, la jurídica y la práctica común.
La ética conduce a la expresión de la cultura, predomina la razón sobre el instinto, a través de los tiempos la sociedad ha establecido valores sustantivos tanto individuales como sociales, de ello se han derivado valores sociales que se han recogido en todo sistema jurídico. Los valores éticos se encuentran incluidos en el derecho, no es suficiente que exista un sistema de sanciones que impliquen suspensión, destitución o inhabilitación de aquellos servidores públicos que no respetan la vocación de servicio, todo esfuerzo es inútil si no se fortalece la moral individual, en nuestras épocas se aduce a una “pérdida de valores”, pero éstos no se pierden , están mantenidos en tiempo y espacio, lo que se pierde es el interés de los individuos para alcanzarlos, y esta es la parte que representa el verdadero problema, a qué obedece esa pérdida de interés. Hay en la actualidad más demanda y necesidad de la actuación pública que en otros tiempos, lo que ha hecho más compleja la tarea de administrar con la presencia inevitable de un elemento: la ética en el servicio público, que debe estar grabado en la mente y el corazón de las personas que realizan esta función.
Hay que destacar que la obligación moral, ética y jurídica que tienen las instituciones de educación superior (IES) en cuanto al servicio público que prestan y que les es asignado por el Estado , y en respeto a la autonomía universitaria, está consagrada en la fracción VII del artículo 3º constitucional Todo lo que a través de esta ponencia se exponga por supuesto que no constituye una verdad única, y dado que estamos en un mundo diverso todo debe ser enriquecido con el debate y el aporte de ideas. Lo que se aporta constituyen una reflexión acerca del pensamiento de las diferentes corrientes académicas y políticas que se han presentado en nuestros tiempos, dado el auge de la transparencia y uso de recursos públicos, todo en apoyo a la propuesta de una universidad pública con autonomía, responsabilidad y transparente en el ejercicio de esos recursos públicos.
2. Justificación El contenido del artículo 3º constitucional que otorga la autonomía universitaria, fracción VII, y entre otras cosas la fiscalización a través de los órganos fiscalizadores de la federación, ha permitido una distribución de competencias universitarias entre los distintos poderes públicos, mediante diferentes disposiciones normativas de carácter administrativo. La autonomía universitaria persigue como objetivo principal garantizar su existencia institucional, sin interferencia del sector público, pero también implica responsabilidad ante la sociedad en general y ante su comunidad universitaria, quien exige una rendición de cuentas responsable, eficiente y eficaz. Este doble enfoque exige efectuar un reparto de competencias en: libertad académica y autonomía financiera y administración de sus recursos. Por ello debe existir una adecuada transparencia en la gestión administrativa de los recursos públicos por parte de la administración pública universitaria, derivándose en una mayor confianza por parte de la sociedad civil.
3. La Ética Toda sociedad democrática y pluralista como la nuestra y en la mayoría del mundo, presenta nuevas modas después de una crisis de valores morales y/o éticos. La ética está de moda, todos hablan de ella, pero sabemos ¿Qué Es la Ética?, ¿es igual a Moral o a la Axiología?, ¿en que se diferencian?. De las diversas corrientes conocidas puedo reflexionar lo siguiente: Etica del griego ethica, de ethos, comportamiento, costumbre, reside en el concepto de la morada o lugar donde se habita. El ethos es el suelo firme, el fundamento de la praxis, la raíz de la que brotan todos los actos humanos. Ethos significa carácter logrado por el hábito y no por naturaleza, nacen por repetición. Los hábitos son el principio intrínseco de los actos, la repetición genera actos y hábitos y determinan además las “actitudes”. Moral del latín mores, costumbre, como la adquisición del modo de ser logrado por la apropiación donde se encuentran los sentimientos, las costumbres y el carácter.
Ante ello lo moral tiene una significación más amplio que la ética, está por encima de todo lo físico. Hegel (1770 a 1831) distingue dos aspectos de la moral: subjetiva – abstracta: cumplimiento del deber, por el acto de voluntad, conciencia. objetiva – obediencia a la ley moral, fijadas por las normas, leyes y costumbres de la sociedad, representa el espíritu objetivo de la moral. Axiología. Del griego axios “lo que es valioso o estimable”, y logos “ciencia”, teoría del valor o de lo que se considera valioso; parte de la filosofía que estudia la naturaleza de los valores: lo bello, lo bueno, etc y su influencia. Los valores morales son de orden práctico, miran las acciones del hombre en cuanto proceden de su voluntad y no de la obra que llevan a cabo, determinan el valor de la persona, son relativos y cambiantes, intrínsecos, se hacen instrumentales a través de la educación y así pasa a ser extrínseco o socialmente valorable, una vez conseguidos nos empuja a superarlos.
Todo valor tiene como característica la bipolaridad o antivalor: Etimológicamente ética y moral significan lo mismo, ambas se refieren a las costumbres, pero a la ética le interesa estudiar las características bipolares de lo valores sin interesarse en otros enfoques, por ello el objeto material de estudio son los actos humanos y los formales es la bondad o maldad de ellos.
Ambos conceptos, ética y moral, difieren en los siguientes puntos: La moral tiene una base social, nace en el seno de una sociedad e influye poderosamente en la conducta de sus integrantes, la ética surge en la interioridad de una persona como resultado de su propia reflexión y su propia elección. La ética influye en la conducta de una persona desde su misma conciencia y voluntad, la moral actúa desde el exterior o el inconsciente. En la moral impera lo prescriptivo, legal, impositivo, coercitivo y punitivo, esto es, destaca la presión externa, en la ética la presión proviene del valor captado y apreciado internamente como tal. La norma ética se fundamenta en el valor, no en el impuesto desde el exterior, sino el descubierto en la reflexión de un sujeto.
Un acto honesto que forma parte de la conducta humana, debe cumplir cuando menos con las siguientes características: Responsabilidad. El individuo que lo ejecuta se debe dar cuenta de él, está en función de que el acto se ha originado por la elección libre del sujeto. Mérito. Derecho a la recompensa por haber actuado bien, toda vez que produce un beneficio. Sanción. Premio o castigo por el cumplimiento o violación de ley, la sanción correcta tiene como objeto inclinar al hombre al bien y alejarlo del mal, tiene una función preventiva. Progreso Moral. Mejora el conocimiento de las normas morales.
4. La inclusión del concepto “accountability” o rendición de cuentas en la administración pública En las prácticas actuales de la administración pública en México estamos utilizando el término “accountability” que aunque no hay una traducción exacta se ha aplicado a la transparencia en la gestión pública y rendición de cuentas. Requiere de una gran madurez ciudadana acabar con los modelos autoritaristas centralizados de manejo de información, el establecimiento de las contralorías en las instituciones permite la participación de la sociedad civil conjuntamente con el gobierno. Una sociedad que está en constante evolución de madurez, exige una vigilancia mayor del ejercicio del poder público, la participación y transparencia han sido desarrolladas hasta convertirse en control. La función inicial de los órganos de fiscalización y control se enfocó como control irrestricto de la norma y sobre ello se construyó toda una metodología de revisión que carecía de futuro ante las nuevas exigencias y conquistas de la sociedad civil al no contar con la estructura requerida para la nueva visión.
5. El control de evaluación operacional de las funciones de la universidad La sociedad está de acuerdo en implantar evaluaciones en las instituciones de educación superior en base a la eficiencia, eficacia y efectividad, pero encontrará resistencia por parte del estado al necesitar perfeccionar a cada institución y una posible reducción del poder en la estructura jerárquica. Para atender a lo anterior me permitiré hacer una semblanza del trabajo publicado por José Luis Hernández Ramírez de la Secretaría Técnica de la Rectoría General de la Universidad de Guadalajara: “En el concepto de evaluación operacional de la eficiencia, eficacia y economicidad de las entidades públicas se ha introducido el concepto de evaluación del desempeño, subdividido en: evaluación operacional y evaluación de programas públicos, permitiendo la evaluación de las propias funciones de gobierno en base a criterios de efectividad.
La evaluación operacional comprende aspectos relativos de sus órganos y entidades públicas que utilizan recursos públicos, abordando las siguientes cuestiones: Adecuación de la estructura organizacional. Sistemas de control adecuados para monitorear con base en indicadores de desempeño válidos y confiables, la economicidad y eficiencia. Apego a la legislación para adquisición de bienes y servicios. Rutinas y procedimientos de trabajo, registrados y actualizados. Procesos de adquisición apegados a la legalidad. Mantener un sistema de inventario de bienes muebles e inmuebles confiable. Racionalidad en el uso de los recursos humanos y materiales.
Evaluar los programas significa examinar el impacto en la sociedad, tomando en consideración: Posean una concepción lógica. Relevancia de sus objetivos y consistencia con las necesidades identificadas. Consistencia entre acción y objetivo. Consecuencia global para la sociedad. Relación de causalidad entre el efecto y la política. Incluyan factores de desempeño. Calidad en el impacto. Cumplimiento de disposiciones legales.
6. Código de Etica de los Servidores Públicos En el Diario Oficial, de fecha 31 de Julio del 2002, se publicó el Oficio Circular No. SP/100/0762/02, suscrito por el Secretario de la Función Publica, Francisco Javier Barrio Terrazas, señalando en su contenido: “El reto de construir un buen gobierno, como se reconoce y asume en el Plan, implica también contar con servidores públicos con una sólida cultura ética y de servicio a la sociedad, que estén absolutamente convencidos de la dignidad e importancia de su tarea. De ahí que el Programa Nacional de Combate a la Corrupción y Fomento a la Transparencia y el Desarrollo Administrativo 2001-2006, recoge el propósito y el compromiso de formar servidores públicos con principios y valores éticos en su desempeño cotidiano. Al asumir su cargo, el servidor público manifiesta su compromiso y vocación para atender los asuntos que interesan y afectan a la sociedad, adquiriendo al mismo tiempo una responsabilidad por sus actos que se refleja en la satisfacción de las necesidades colectivas. El servicio público implica responsabilidades que derivan de las funciones inherentes al cargo que se desempeña.
Cada uno de ellos se enfrenta día a día con la toma de decisiones a menudo complejas, en las que está en juego el bienestar de la sociedad. Los servidores públicos, como individuos libres, tienen la capacidad para elegir y optar en el ejercicio de sus funciones, entre lo que es deseable para la colectividad y aquello que puede resultar dañino para la misma. Por ello, la ética del servidor público se convierte en un elemento indispensable para atender de mejor manera las demandas sociales en un régimen democrático y, en consecuencia, resulta trascendente que la Administración Pública Federal cuente con un Código de Ética que oriente el desempeño de los servidores públicos hacia lo que es benéfico para la sociedad.” El código de los servidores públicos contiene los siguientes principios: BIEN COMUN, INTEGRIDAD, HONRADEZ, IMPARCIALIDAD, JUSTICIA, TRANSPARENCIA, RENDICION DE CUENTAS, ENTORNO CULTURAL Y ECOLOGICO, GENEROSIDAD, IGUALDAD, RESPETO, Y LIDERAZGO.
Los principios de transparencia y rendición de cuentas obligan al servidor público y garantizan a la sociedad, el acceso a la información gubernamental. La transparencia implica que el servidor público haga un uso responsable y claro de los recursos públicos. El rendir cuentas en forma adecuada y sujetarse a la evaluación de la propia sociedad, obliga a realizar las funciones con eficacia y calidad, así como de optimización los recursos públicos. Los códigos éticos, coordinados y discutidos con el personal en forma permanente, permite lograr que el personal se identifique con las reglas de una gestión de la función pública esencialmente técnica y políticamente imparcial. Además permite introducir en los propios funcionarios mecanismos personales tales que los inhiban de incurrir en actos de corrupción. Las medidas que se implementen sólo podrán ser exitosas, si los empleados y funcionarios que observen una conducta conforme al código, reciben un adecuado reconocimiento a esa gestión.
7. Acuerdo Nacional para la Transparencia y el Combate a la Corrupción. Los elementos importantes en la lucha contra la corrupción son las reformas administrativas y la simplificación de los trámites, permitiendo de este modo transparentar los procesos administrativos para los ciudadanos. Las autoridades están obligadas a fundamentar sus decisiones sobre derechos y reivindicaciones del ciudadano. Para una mayor transparencia de los procesos de decisión, deberán reducir el número de entes y niveles que participan en la decisión. La adopción de los principios en las instituciones públicas de educación superior, deben comprender lo siguiente: Responsabilidad de los funcionarios. Profesionalización del personal Remuneración adecuada del personal.
El 26 de Febrero del año 2001, se firma el Acuerdo Nacional Para La Transparencia y El Combate a la Corrupción, con los siguientes compromisos: Impulsar acciones para ofrecer un gobierno federal cuya actuación obedezca a una estrategia de trasparentar sus decisiones, así como combatir la corrupción. 1.-Ninguna acción podrá ser emprendida en forma eficiente si no se cuenta con el apoyo, participación, vigilancia y compromiso de todos los integrantes de la sociedad.. 2.-Erradicar esas prácticas, que sólo benefician a unos en perjuicio de otros, se requiere de la colaboración de todos bajo el principio de que es necesario 3.-Emprender medidas para abatir la corrupción y efectivas para sentar las bases de un México progresista.
Los participantes acordaron suscribir el Acuerdo para lograr obtener transparencia administrativa y asimismo combatir la corrupción, mediante la aplicación de los siguientes principios en las instituciones: No participar en, ni propiciar actos de corrupción en sus trámites ante el gobierno, entre ellas mismas y con sus propios agremiados y asociados; Denunciar los actos de corrupción a los que se enfrenten al realizar sus trámites ante el gobierno Federal y vigilar la honesta actuación de sus propios agremiados y asociados; Colaborar en los programas y divulgación de las acciones establecidas para combatir la corrupción, y Fomentar en sus agremiados y asociados, en sus familias, en sus centros de trabajo y en su comunidad, una cultura ética que rechace la corrupción.
8. Reorientar la Administración Publica Universitaria en Cumplimiento del Acuerdo. Para dar cumplimiento al Acuerdo, deberá realizarse una revisión y reestructuración del contenido actual de la Administración Pública Universitaria. Es necesario producir un informe preliminar con información práctica y confiable, a fin de buscar definiciones generales de políticas públicas para incrementar la transparencia y la eficiencia en las Instituciones de Educación Superior, que pueda ser utilizado para la toma de decisiones, en base a un proceso de selección de agentes que se desempeñan en las funciones básicas del proceso de gestión y administración universitaria, con el objeto de indagar acerca de los factores que permitan y promuevan el desarrollo de prácticas irregulares en la Administración Universitaria, durante períodos establecidos.
Los objetivos particulares que se proponen son los siguientes: Identificar en las Universidades Públicas de Educación Superior desde una perspectiva organizacional, las condiciones que permiten en diversas áreas y procedimientos, al desarrollo de prácticas irregulares, toda vez que no existen estudios sobre transparencia en este sentido, para detectar hechos irregulares, generalmente llamados “casos de corrupción”. Indagar sobre los causantes del fenómeno de la corrupción, antes que los actos propiamente dichos. Superar los efectos negativos que a veces provocan los estudios sobre el tema. Indicar futuras líneas de estudio e investigación sobre el tema de transparencia. Celebrar convenios de colaboración a fin de buscar definiciones generales de políticas públicas para incrementar la transparencia y la eficiencia, que pueda ser utilizado para la toma de decisiones.