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SAN VICENTE PAUL. San Vicente de Paúl nació en Dax (Francia), cerca de los Pirineos. Sus padres eran labriegos y pasaban apuros para alimentar a sus seis hijos. Vicente colaboró en la economía familiar, cuidando un pequeño rebaño de ovejas.
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San Vicente de Paúl nació en Dax (Francia), cerca de los Pirineos. Sus padres eran labriegos y pasaban apuros para alimentar a sus seis hijos. Vicente colaboró en la economía familiar, cuidando un pequeño rebaño de ovejas. Lo pusieron a estudiar con los franciscanos. Un señor de la tierra, al ver sus buenas cualidades, lo tuvo como preceptor de sus hijos y lo mandó a estudiar a Zaragoza y a Toulouse. A los 19 años recibió el sacerdocio.
En París continúa las prodigiosas obras de caridad que empezó en Chatillon. Organiza cofradías, atiende y defiende a los condenados a las galeras. Conoce su vida lastimosa: expuestos a toda inclemencia, reciben azotes e insultos, sin esperanza alguna. Un día, reemplaza a un pobre remero para conocer así su amarga vida. Recorrió galeras y cárceles. Así consiguió cambiar la legislación y un trato más humano para ellos.
Su celo apostólico lo lanza a todas partes. Funda la Congregación de los Sacerdotes de la Misión, para reformar el clero, dirigir seminarios y dar misiones. El centro es San Lázaro, por lo que se llaman Lazaristas.
Fundada en Francia, en el Siglo XVII, por la vocación apostólica de San Vicente de Paúl y cinco sacerdotes franceses más. Se convirtió en orden por una Bula Papal de 1626. En la actualidad está compuesta por Sacerdotes y Hermanos. En enero de 2008 la Congregación tenía 3.346 miembros incorporados: 2 Cardenales, 30 Obispos, 3.042 Sacerdotes, 62 Diáconos, 161 Hermanos y 43 Estudiantes con votos y 596 miembros admitidos y 685 aspirantes.
San Vicente de Paúl fundó la congregación de las Hijas de las Caridad, junto con Santa Luisa de MarillacFunda las Hijas de la Caridad con Luisa de Marillac en París, en 1633. "Por monasterio, les dice, tendréis las salas de los enfermos, por clausura, las calles de la ciudad, por rejas el temor de Dios y por velo la santa modestia".
Su trato con Luis XIII y con la regente Ana de Austria le será muy útil para sus obras de caridad. Reúne damas y caballeros, forma asociaciones para atender a tantas necesidades creadas por la guerra: pobres, hambrientos, golfillos, enfermos. Donde hay una necesidad, allí esta Vicente.
"No es lícito perderse en teorías, escribía, mientras muy cerca hay niños que necesitan para subsistir un vaso de leche. Los pobres serán nuestros jueces. Solo podremos entrar en el cielo sobre los hombros de los pobres".
San Vicente de Paúl es una de las figuras más representativas del catolicismo en la Francia del siglo XVII.
Murió en el año 1660. El Santo Padre León XIII lo proclamó Patrono de todas las asociaciones católicas de caridad. Su fiesta se celebra el 27 de Septiembre
Las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, también conocidas como Hermanitas de la Caridad, son una congregación religiosa católica femenina fundada el 29 de noviembre de 1633 y dedicada al servicio corporal y espiritual de los pobres enfermos.
La congregación fue fundada por San Vicente de Paúl, un párroco francés y Luisa de Marillac con el nombre de Hijas de la Caridad, sirvientes de los enfermos pobres, y posteriormente se le agregó el nombre de su fundador para distinguir esta congregación de las distintas comunidades de caridad que, animadas de un espíritu similar, se desarrollaron posteriormente por toda Francia.
Luisa dio el gran paso hacia el matrimonio en 1613, la pareja tuvo su único niño en el primer año de matrimonio. Aunque consagrada a su familia, Luisa seguía todavía anhelando una vida de servicio a Dios y cumplir su voto privado de dedicación total a Él. Poco después del nacimiento de su hijo, su marido, Antonio, contrajo una enfermedad crónica y finalmente cayó postrado en cama.
En 1623 escribió: «En la fiesta del Pentecostés, durante la Santa Misa cuando yo estaba haciendo oración en la iglesia, mi mente fue completamente liberada de toda duda. Me aconsejaron que debía permanecer con mi marido y que llegaría un tiempo en que estaría en posición de hacer votos Dos años después falleció su marido y Luisa libre para cumplir su deseo de consagrarse a la religión. Escribió sus propias «Reglas de Vida en el Mundo»
PARA OBTENER LA CURACIÓN DE UN ENFERMO ¡Oh Madre piadosa, a quien la Iglesia llama confiada ¡Salud de los enfermos! Aquí me tenéis implorando vuestro favor. Lo que tantos afligidos obtenían por la palabra de vuestro Hijo Jesús, obténgalo este querido enfermo, que os recomiendo, mediante la aplicación de vuestra Medalla.