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LOS ELEMENTOS DEL LENGUAJE MUSICAL. LA MELODÍA. LA MELODÍA.
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LOS ELEMENTOS DEL LENGUAJE MUSICAL LA MELODÍA
LA MELODÍA ¿Qué sucede con la música que es como si estuviera siempre en el ambiente? Algo tiene la música que en muchas ocasiones no podemos despegarnos de ella, es como si la tuviésemos tatuada en nuestro cerebro y no nos quedara otro remedio que silbarla o tararearla. Eso es porque la melodía, uno de los elementos del lenguaje musical, “se pega”. El motivo es que la melodía es el elemento de la música que percibimos con mayor facilidad y que más sencillo resulta retener en la memoria. Por eso vamos a ver qué tienen las melodías que tanto nos atraen.
¿QUÉ ES ESO DE LA MELODÍA? La melodía es uno de los elementos del lenguaje musical. Es capaz de modificar nuestro estado de ánimo: alegrarnos, entristecernos, emocionarnos, etc. Por eso la melodía ejerce un atracción muy fuerte, y de ella depende, en gran parte, el resultado final de la obra musical. Es muy difícil decir por qué unas melodías tiene más éxito que otras, o por qué a algunas personas les gustan melodías que a otras no: no hay unas normas estrictas para componer un buena melodía. De la misma manera que el ritmo hace que nos movamos, una melodía puede cambiar nuestro estado de ánimo, pero la reacción a cada melodía es completamente personal. A lo largo de este tema veremos cómo se estructuran las melodías y cuáles son los elementos que la vertebran. La melodía es la conjunción de un ritmo al que se le añaden una serie de alturas. Esto que tenemos aquí es un ritmo en el que hay figuras de negras y corcheas. Podemos decir que este es el componente horizontal de la música Esto otro, son una serie de notas, con altura definida, pero sin duraciones. Podemos decir que este es el componente vertical de la música. Si unimos ambos componente, lo que nos queda es una sucesión de duraciones y alturas, y esto es lo que denominamos MELODÍA
Ahora podemos entender el siguiente diagrama: Como ves, las barras azules van moviéndose verticalmente para arriba y abajo porque tiene altura. Pero esas mismas barras no tiene la misma longitud, porque dependiendo de su duración son más largas o más cortas. Por tanto, podemos decir que una MELODÍAS es una sucesión de sonidos de diferentes alturas, animados por un ritmo y que expresan una idea musical. De esta forma, el discurso musical queda articulado según diferentes melodías que se van sucediendo y que pueden surgir según una idea trabajada y preconcebida que es compuesta, o ser fruto de la momento, lo que da lugar a la improvisación del intérprete. Los elementos que constituyen las melodías son, en primer lugar, los intervalos, y en segundo lugar, la escala, que es la organización de las alturas dentro de un determinado sistema y nos dirá qué notas emplear para hacer dichas melodías.
LOS INTERVALOS. CLASIFICACIÓN Un intervalo es la distancia en altura que hay entre dos notas. Para poder medir la distancia, tenemos que saber cómo se miden. La altura se mide en tonos y semitonos, teniendo en cuenta la distancia entre cada una de las notas. Los intervalos se clasifican de la siguiente manera: SEGÚN LA DISTANCIA: Para clasificar y determinar correctamente cómo es un intervalo debemos medir la distancia que hay entre las diferentes notas, contándolas todas ellas (incluyendo tanto la primera como la última) y posteriormente contar la distancia de tonos y semitonos que hay entre ellas. SEGÚN LA DIRECCIÓN: Los intervalos pueden ser ascendentes o descendentes, dependiendo de si la primera nota es más grave o más aguda que la segunda. Si la primera nota es más grave, el intervalo será ascendente, y si es más aguda, será descendente.
SEGÚN LA DISPOSICIÓN: Los intervalos pueden ser melódicos o armónicos. Si las notas que forman el intervalo se tocan sucesivamente, es decir, una después de la otra, estamos ante un intervalo melódico, y la sucesión de varios de ellos dará lugar a un melodía. Si las notas que forman el intervalo se tocan simultáneamente, es decir, a la vez, estamos ante un intervalo armónico. • SEGÚN LA SEPARACIÓN: Los intervalos pueden ser conjuntos o disjuntos. Si las notas que forman el intervalo están seguidas, entonces estamos ante un intervalo conjunto. Cuando una melodía se forma a través de estos intervalos, se dice que es una melodía formada por grados conjuntos. Si por el contrario, las notas que forman el intervalo están separadas, hay una nota que se han saltado, entonces estamos ante un intervalo disjunto. EL UNÍSONO: El término unísono significa “un sonido” y se denomina unísono a la sucesión o simultaneidad de la misma nota.
TIPOS DE MELODÍAS SEGÚN SU PERFIL MELÓDICO Existen muchos tipos diferentes de melodías, dependiendo de su diseño o perfil, es decir, de la línea que tracen las notas que forman parte de dicha melodía. Los tipos de melodías son los siguientes: ascendente, descendente, ondulada, lineal y quebrada. Si trazamos líneas sobre las cabezas de las notas, podremos identificar perfectamente a qué tipo de melodía pertenece cada una de ellas
TIPOS DE MELODÍAS SEGÚN SUS INTERVALOS Dependiendo del tipo de intervalos melódicos que compongan las melodía podemos tener dos tipos: Las melodías por saltos, en las que los intervalos que forman la melodía son disjuntos, es decir, se saltan al menos una nota. Mira este ejemplo: Melodías por grados conjuntos, en las que los intervalos que forma la melodía son en su mayoría intervalos conjuntos, es decir, pasan de una nota a otra sin saltarse ninguna. Mita este ejemplo TIPOS DE FRASES MUSICALES La melodías se estructuran en frases musicales, de forma parecida a lo que ocurren en el lenguaje hablado o escrito. Al igual que en un texto podemos encontrar distintos tipos de oraciones (enunciativas, interrogativas, exclamativas, exhortativas), una melodía puede tener dos tipos de frases. Estas frases suelen ir separadas por cadencias o reposos, que es el equivalente a un signo de puntuación en lenguaje escrito. Las frases musicales son: FRASES CONCLUSIVAS: Estas son las que provocan la sensación de reposo, de relajación, de que la idea musical ha terminado. Esto se consigue cerrando la melodía en el primer grado de la escala o tónica. En lenguaje escrito equivaldría la punto. FRASES SUSPENSIVAS: Estas son las que provocan la sensación de falta algo que todavía no ha terminado. Para lograr este efecto la frase tiene que terminar en otro grado que no sea la tónica, como por ejemplo en el II, V o VIII. En lenguaje escrito equivaldría la coma.