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L 1 de 92. TEOLOGÍA DE LA LITURGIA SIGLO XX, 1. Cuando la teología abordó el estudio sistemático de las celebraciones sacramentales (s. XII y XIII), se partió de una neta distinción entre su esencia ( sacramento ) y aquello que, según se pensaba, pertenecía
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L 1 de 92 TEOLOGÍA DE LA LITURGIA SIGLO XX, 1 Cuando la teología abordó el estudio sistemático de las celebraciones sacramentales (s. XII y XIII), se partió de una neta distinción entre su esencia (sacramento) y aquello que, según se pensaba, pertenecía a su ornato y significación (rito). Aunque Santo Tomás no lo hiciera, se llegó con el tiempo a una excesiva separación entre sacra- mento y rito. La liturgia se identificó con el con- junto de gestos (ceremonias) que acompañan al sacramento; ritos venerables por su tradición, pero carentes de relación directa con el miste- rio de salvación celebrado.
L 2 de 92 TEOLOGÍA DE LA LITURGIA SIGLO XX, 2 En el siglo XX, el llamado movimiento litúrgico (1909-1963) se esforzó por conseguir una noción integral de liturgia: se trataba de alcanzar una concepción que superara la idea del culto como algo reducido a ceremonia o protocolo y de recuperar la íntima relación entre el misterio de Cristo y su celebración en el culto. Raíces de este movimiento: la restauración mo- nástica iniciada en Francia por Prosper Gué- ranger (+ 1875) y las disposiciones reformado- ras de san Pío X encaminadas a la participación activa de los fieles en los misterios del culto. Primera manifestación pública: Congreso de Malinas (Bélgica, 1909) promovido por Lambert Beauduin (1873-1960).
L 3 de 92 TEOLOGÍA DE LA LITURGIA SIGLO XX, 3 Primera fase del movimiento (1909-1914): polémica con Maurice Festugière (+ 1950) según el cual la liturgia, lejos de ser una simple institución ceremonial, constituye la auténtica fuente de la vida espiritual de los fieles. Segunda fase (1918-1939): Ildefons Herwegen (+ 1946), abad del monasterio renano de María Laach, concibe un ambicioso proyecto para la formación litúrgica de sus monjes. Romano Guardini (+ 1968): estudios novedosos de liturgia. Pius Parsch (+ 1954): comentarios al misal, al breviario y sobre el año litúrgico. Tercera fase (1947-1963): clima más sereno con las intervenciones de Pío XII (Encíclica Mediator Dei, 1947). Reconoce los valores del movimiento. La fase se cierra con Vaticano II (Constitución Sacrosanctum Concilium, 1963).
L 4 de 92 TEOLOGÍA DE LA LITURGIA SIGLO XX, 4 La encíclica de Pío XIIMediator Dei (1947), primer documento magisterial que trata de ma- nera estructurada la naturaleza del culto de la Iglesia. La liturgia no es ni sólo una parte exter- na y sensible del culto divino ni un mero con- junto de leyes y preceptos para el rito. Para Pío XII, la liturgia, vista en su contenido teológico, es la “conti- nuación del oficio sacerdotal de Cristo” o “el ejercicio del sacerdo- cio de Cristo”; y considerada a partir de su celebración, es “el culto público del Cuerpo místico de Jesucristo”. La liturgia comenzó a ser contemplada como el ejercicio del sacer- docio de Cristo en su Iglesia y, por tanto, una obra de Dios.
L 5 de 92 TEOLOGIA DE LA LITURGIA SIGLO XX, 5 El benedictino Odo Casel (+ 1948) propuso comprender la liturgia como la presencia ri- tual de la obra redentora de Cristo. Recupera la consideración de los sacramentos como “misterios” del único misterio de salvación obrado por Dios en la historia. Las celebra- ciones de culto actualizan, según sus distin- tas y propias modalidades, el único misterio de nuestra salvación. La Iglesia, en la liturgia, hace presente la acción salvadora de su redentor, ya que en la celebración del culto Cristo mismo está presente y obra por la Iglesia y con la Iglesia. CCE 1067: “En la liturgia, la Iglesia celebra principalmente el misterio pascual por el que Cristo realizó la obra de nuestra salvación”.