recetas de reposteria

1. Según los especialistas un buen objetivo puede ser amontonar diez pasos al día. Para facilitarte el llevar la cuenta puedes emplear un aparato que cuenta los pasos, una pulsera de actividad o alguna aplicación móvil que cubra esta función. Tanto las frutas como las verduras son muy nutritivas y saludables. En vez de consumir patatas fritas y refresco de cola, decídete por una taza de uvas, zanahorias, fresas o jugos vegetales. Esto te va a ayudar a conseguir una pérdida de peso saludable en tanto que poseen muchas menos calorías que la energía que tu organismo va a gastar en digerirlas. Para una mejor digestión es conveniente comer de manera lenta y masticar apropiadamente la comida. De este modo, te sentirás lleno antes de comer en exceso y te ayudará a reducir las calorías ingeridas. El esfuerzo merece un premio siempre que no sea el alimento insalubre del que tratas de distanciarte. Fíjate metas pequeñas para marcar tu evolución y recompénsate cuando alcances dichos objetivos. Es aconsejable asar la carne y las verduras al horno en vez de freírlas. Podemos asar prácticamente cualquier cosa en el horno en media hora o menos con una cucharadita de aceite de oliva, sal y pimienta. Utiliza tazones y platos más pequeños para cada comida para hacerte creer que comes más de lo que comes. Esencialmente es una ilusión óptica que engaña a tu cerebro a fin de que crea que estás comiendo como se clasifican los alimentos un plato lleno. Esto sirve de ayuda cuando tratas de comer porciones más pequeñas durante el día. No comas rápido. La sensación de saciedad precisa unos veinte minutos en llegar al cerebro. Masticar bien los comestibles asimismo ayudará a tener una mejor digestión.