Oratoria Jurídica

1. ORATORIA JURIDICA ORADOR • Sujeto que se expresa públicamente, por lo general a través de algún tipo de discurso o disertación. IMAGEN DEL ORADOR • Todo aquel que habla ante un público debe tener clara consciencia del tipo de imagen que desea proyectar. • Para que un orador desarrolle una imagen ideal, sebe seguir, al menos, cuatro pasos básicos: • Identificar la imagen que proyecta actualmente. • Definir la imagen que desea proyectar. • Definir las acciones coherentes con la imagen deseada. • Practicar hasta proyectar espontáneamente la imagen deseada. • No se puede llegar a un lugar que no se sabe dónde queda, como tampoco es posible acertarle a un blanco al que no se ha apuntado antes. AUTOESTIMA DEL ORADOR • Es tener actitud para ejercerla y representar una conducta adecuada, escuchar opiniones sobre nuestro desempeño y valorar bien si somos capaces de asumir el reto. Debe tener en cuenta: • Debemos aceptar nuestras habilidades, talentos, capacidades y valorar como somos, no podemos pensar que desde el comienzo aprenderemos toda la gama de especialidades que reúne este difícil arte que requiere de práctica y oficio. –       Sentimiento de valor propio hacia lo que hacemos. –       Mantener comunicación con personas significativas. –       Profundizar en nuestros valores de la constancia y la perseverancia.

2. APARIENCIA EXTERNA DEL ORADOR ACTITUD EMOCIONAL DEL ORADOR • La actitud del orador también forma parte de la serie de aspectos vinculados con la imagen que se proyecta frente al público. Al hablar, palabras, tonos de voz, y lenguaje corporal revelarán su estado emocional, que será especialmente perceptible en miradas, movimientos de manos y expresión facial. • Las palabras son modificadas por la emoción que las impulsan. Esas emociones son el "Combustible" de la intensidad expresiva. Esto es algo que todo buen expositor debe tener presente, para así conscientizar la emoción que experimenta y transmite en cada acto comunicativo. • Existe un abanico de estados de ánimo que valen la pena conocer, ya que la expresión varía de acuerdo con la emoción que la acompaña. No se expresa uno igual desde la alegría que desde la rabia, ni nos da lo mismo hablar desde la culpa que cuando hemos sido tocados por el fantasma del miedo.

3. LIDERAZGO Y RESPONSABILIDAD • El Líder responsable nunca deja que sus responsabilidades le sean impuestas por otras personas, siempre se hace responsable de lo que le corresponde y de lo que no le corresponde pero que sabe que debe hacerse, como atender un teléfono, cuadrar unas cuentas, cambiar el agua del dispensador, incluso de cambiar un bombillo si es necesario, el tema de la responsabilidad es como hablar de ética, cada quién tiene su concepto y tristemente su concepto se acopla exactamente a lo que es esa persona, si usted desea saber que tan responsable o ético es una persona, pregúntele cual es su concepto de ambas. LIDERAZGO Y COMPROMISO El Liderazgo es influencia. De la misma manera que un líder puede lograr que un individuo logre su máximo potencial, también puede lograr que cometa grandes errores impactando negativamente su futuro. Es por ello que es de suma importancia aprender no sólo la ciencia y psicología detrás del liderazgo, pero también entender las responsabilidades que conlleva convertirse en un buen líder. El Liderazgo no tiene como objetivo principal alcanzar al éxito personal, sino más bien, adquirir un compromiso en dedicar la vida para desarrollar a otros. Es por ello que los líderes dedican tiempo para crecer, leer y actualizarse. Ellos entienden que una decisión equivocada no sólo traerá consecuencias negativas para ellos sino para su equipo. El arte del liderazgo es sencillo pero no fácil. Requiere compromiso para aprender, crecer y cambiar. Pero vale la pena. Estudia tus tres más preciados líderes y mentores. Te darás cuenta como ellos transitaron el camino contigo… individualmente. El Abogado como Lider El liderazgo del abogado comienza cuando éste se responsabiliza de su ejercicio profesional y de lo que ocurre en el despacho. Por tanto, el liderazgo del abogado no guarda relación alguna con ejercer la profesión en un despacho pequeño, mediano, grande, ni con dirigir una asesoría jurídica en una empresa o dirigir un equipo de personas. El liderazgo comienza con la capacidad de liderarse a uno mismo y crear el impacto deseado en los demás, ya sean clientes, colaboradores o compañeros.