410 likes | 770 Views
¿Quién se ha llevado mi queso?. Erase una vez. Un país muy lejano donde vivían 4 personajes. Dos de ellos eran ratones y se llamaban Oliendo y Corriendo (Oli y Corri). Los otros dos eran personitas del tamaño de los ratones pero muy parecidas a los humanos, se llamaban Kif y Kof.
E N D
¿Quién se ha llevado mi queso?
Erase una vez... Un país muy lejano donde vivían 4 personajes.
Dos de ellos eran ratones y se llamaban Oliendo y Corriendo (Oli y Corri). • Los otros dos eran personitas del tamaño de los ratones pero muy parecidas a los humanos, se llamaban Kif y Kof.
Todos los días estos personajescorrían por un laberinto en busca del Queso con el que se alimentaban y que los hacía felices. Sin embargo, sus técnicas para encontrarlo eran diferentes...
Oli y Corri, los ratones, aunque sólo poseían cerebro de roedor, tenían muy buen instinto para encontrar el queso que les gustaba.
Kif y Kof, utilizaban su cerebro lleno de creencias para buscar un tipo distinto de Queso (con mayúscula) que ellos creían los haría felices y triunfarían.
Así... • Oli y Corri olfateaban y se abalanzaban, recorrían un pasillo y si estaba vacío daban media vuelta y recorrían el siguiente. • Kif y Kof pensaban y aprendían de sus experiencias anteriores, aunque sus emociones y creencias a veces los confundían
Cierto día... • Siguiendo su propio método todos encontraron el queso que querían al final de uno de los pasillos en: La Central Quesera Q
Los ratones siempre se levantaban temprano y corrían hacia la central quesera Q, donde se quitaban las zapatillas y las dejaban a la mano por si tenían que volver a usarlas, y luego disfrutaban del queso.
Las personitas hacían lo mismo al principio, sin embargo, conforme pasaba el tiempo se levantaban cada día más tarde y se ponían más cómodos en la central quesera Q, pensando que el queso estaría allí para siempre.
Incluso empezaron a decorar las paredes de la central quesera con frases y trozos pintados de queso, una de las frases decía: TENER QUESO TE HACE FELIZ
Cierto día, pasados varios meses, Oli y Corri llegaron a la central y se encontraron con que no había queso, esto no les sorprendió pues ellos se habían percatado de que las reservas de queso habían ido disminuyendo poco a poco.
Como ellos no se perdían en análisis profundos, enseguida supieron que la central quesera había cambiado y que también ellos tenían que cambiar, agarraron las zapatillas que siempre traían a la mano, Oli husmeó y Corri se lanzó a correr por el laberinto seguido por Oli.
Ese mismo día, mucho más tarde, Kif y Kof llegaron a la central y se encontraron con que no había queso. • Kif se indignó preguntándose quién se había llevado su queso. • Kof no quería enfrentarse a lo que tenía adelante, así que se desconectó de la realidad
Inspeccionaron la central quesera para comprobar que el queso había desaparecido y antes de irse a casa escribieron en la pared: CUANTO MAS IMPORTANTE ES EL QUESO PARA UNO, MAS SE DESEA CONSERVARLO
Kof instó a Kif para salir al laberinto en busca de más queso, pero Kif con su miedo lo desanimó y lo convenció de buscar en la pared de la central para encontrar más queso. Sin embargo, sólo consiguieron hacer un gran hoyo. Kof empezó a comprender la diferencia entre actividad y productividad
Para ese entonces, Oli y Corri, que llevaban bastante tiempo sin encontrar nada, por fin hallaron: Aquí hallaron la cantidad de queso más grande que habían visto en su vida, por supuesto, estaban felices. La Central Quesera N
Mientras tanto, Kof se dio cuenta de la estupidez de su comportamiento y se rió de él mismo, con ello venció su miedo y decidió volver al laberinto en busca de queso, no sin antes escribir en la pared: SI NO CAMBIAS TE EXTINGUES
Quiso convencer a Kif, pero no lo logró, sentía mucho miedo de regresar al laberinto y dejar el territorio conocido, así que escribió otra frase en la pared: ¿QUE HARIAS SI NO TUVIESES MIEDO?
Después se adentró en el laberinto preguntándose por qué no se había ido antes de la central quesera Q. Kof tuvo que volver a acostumbrarse al laberinto y conformarse con encontrar unos cuantos trozos de queso, pero se convencía a sí mismo de que lo que estaba haciendo, por incómodo que fuera, era mejor que quedarse de brazos cruzados.
Pensó que tal vez el cambio en la central quesera Q no lo habría tomado por sorpresa si lo hubiera notado de forma gradual, así que escribió: HUELE EL QUESO A MENUDO PARA SABER CUANDO EMPIEZA A ENMOHECERSE
Kof tenía miedo de seguir avanzando sólo, pero recordó que las veces que se había sentido mejor en el laberinto eran cuando estaba en movimiento, así que escribió: AVANZAR EN UNA DIRECCION NUEVA AYUDA A ENCONTRAR NUEVO QUESO
Cuando miró el obscuro corredor se rió de sí mismo, entendió que lo único que hacían sus miedos era empeorar las cosas. Por eso, hizo lo que no hubiera hecho de no tener miedo: avanzó en una nueva dirección, y se entretuvo para escribir de nuevo en la pared: CUANDO DEJAS ATRAS EL MIEDO, TE SIENTES LIBRE.
Cuanto más clara veía la imagen del nuevo queso, más real se volvía y más presentía que iba a encontrarlo, así que escribió de nuevo en la pared: IMAGINARSE DISFRUTANDO DEL QUESO NUEVO ANTES INCLUSO DE ENCONTRARLO CONDUCE HACIA EL
Al poco tiempo localizó otra central quesera que sólo contenía unos cuantos trozos de queso, si se hubiera movido antes hubiera podido encontrar allí más cantidad de queso, así que escribió: CUANTO ANTES SE OLVIDA EL QUESO VIEJO, ANTES SE ENCUENTRA EL QUESO NUEVO
Kof regresó a la central quesera Q para ofrecerle a su amigo Kif unos pedazos de queso, pero Kif lo rechazó, Kof escribió: ES MAS SEGURO BUSCAR EN EL LABERINTO QUE QUEDARSE DE BRAZOS CRUZADOS SIN QUESO
Kof llegó a la conclusión de que lo que nos da miedo nunca es tan malo como imaginamos. El miedo que dejamos crecer en nuestra mente es peor que la situación real. Se dio cuenta de que su sistema de creencias había cambiado, volvió a escribir: LAS VIEJAS CREENCIAS NO CONDUCEN AL NUEVO QUESO
Kof supo que al cambiar de creencias, había cambiado de forma de actuar. Tal vez no había encontrado nada, pero había aprendido mucho y escribió: CUANDO VES QUE PUEDES ENCONTRAR NUEVO QUESO Y DISFRUTAR DE EL, CAMBIAS DE TRAYECTORIA
Kof esperaba que las frases que había escrito en la pared del laberinto le señalaran a Kif el camino por si acaso este decidía salir en busca de queso. Se detuvo a escribir: NOTAR ENSEGUIDA LOS PEQUEÑOS CAMBIOS AYUDA A ADAPTARSE A LOS CAMBIOS MAS GRANDES QUE ESTAN POR LLEGAR
En esos momentos, Kof ya se había liberado del pasado y se estaba adaptando al futuro Al fin lo que estaba esperando ocurrió: ¡Encontró un nuevo queso en la central quesera N! No sabía si era real hasta que vio a Oli y a Corri, sus abultadas barriguitas indicaban que llevaban allí mucho tiempo
Había aprendido mucho de ellos, llevaban una vida simple, no analizaban en exceso ni complicaban las cosas • Cuando la situación cambió, ellos hicieron lo mismo. • Así que a diferencia de los ratones, usó su cerebro para reflexionar sobre los errores de su pasado y trazar un plan para su futuro
Uno aprende a vivir con el cambio Finalmente, se dirigió hacia la pared más grande y escribió todo lo que había aprendido
El cambio es un hecho (el queso se mueve) • Prevé el cambio (Permanece alerta al movimiento) • Controla el cambio ( Huele el queso) • Adáptate rápido al cambio (Olvida el queso viejo) • ¡Cambia! (Muévete cuando el queso se mueve) • ¡Disfruta el cambio! (Saborea la aventura) • Prepárate para cambiar rápidamente y disfrutar otra vez (el queso se mueve a cada rato)
Kof empezó a inspeccionar todos los días la central quesera N en busca de cambios y exploraba nuevas zonas para ver lo que ocurría a su alrededor, también rezó para que su amigo Kif fuera capaz finalmente de...
¡¡Moverse con el queso y disfrutarlo !!!!