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Hazlo de buen ánimo (Colosenses 3:23-24). Hazlo de buen ánimo. Y todo lo que hagáis, hacedlo de buen ánimo como para el Señor y no para los hombres , sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia. ¡A Cristo el Señor servís! (Colosenses 3:23-24). Hazlo de buen ánimo.
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Hazlo de buen ánimo Y todo lo que hagáis, hacedlo de buen ánimo como para el Señor y no para los hombres, sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia. ¡A Cristo el Señor servís! (Colosenses 3:23-24)
Hazlo de buen ánimo Introducción Dios nos ha estado hablando de diligencia en nuestra vida, ha dejar la pereza y hacer la obra de Dios. Ha conocerle mas y mas profundamente, para seguir extendiendo su Reino. Pero el peregrinaje de nuestra vida cristiana, tiene que ver como lo hacemos y un consejo de Dios para nosotros es hacer las cosas con un corazón dispuesto, y de buena gana. La batalla de los principios versus la cultura imperante nos da una tensión que a veces es difícil de sobrellevar, especialmente ante los desafíos que nos impone la vida. ¡Hazlo de buen ánimo!
Hazlo de buen ánimo ¿Cuál es el consejo? I. Todo lo que hagáis (vers. 23) II. El pago es del Señor. (vers. 24)
Hazlo de buen ánimo I.- Todo lo que hagáis (vers. 23) Este todo lo que hagáis involucra nuestro trabajo en forma integral, en todas las áreas de nuestra vida. Al desarrollarnos en nuestro medio Dios nos pide que realicemos todas nuestras labores de la mejor manera, como para el Señor y no para los hombres. a) Daniel el profeta, realizó su trabajo con una excelencia sorprendente. El resultado de su labor, ministro en dos imperios distintos, en los más alto de las responsabilidades que eran encargadas a personas de la época. b) José: También sirvió de manera muy efectiva en el imperio Egipcio, llegó a ocupar el cargo más alto luego de Faraón.
Hazlo de buen ánimo • II.- El pago es del Señor (vers. 24) • En Hebreos 6:9 – 12 dice; “Porque Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y trabajo de amor que habéis mostrado hacia su nombre, habiendo servido a los santos y sirviéndoles aún. • Pero cuales son mis prioridades al servir: • Tener una relación personal con él. Sólo serviremos con amor cuando conozcamos profundamente al Señor y su voluntad ¿Para que el Señor me ha invitado a pertenecer a su pueblo? • Una participación significativa con el cuerpo de Cristo. El compromiso con la misión de la Iglesia, donde Dios nos ha traído.
Hazlo de buen ánimo Conclusión “El Señor podría llevar a cabo su obra sin nuestra cooperación. No depende de nuestro dinero, nuestro tiempo, ni siquiera de nuestro trabajo, es otro el concepto. La iglesia, es el cuerpo de Cristo, y es muy preciosa a su ojos, es su novia amada. Es el estuche que contiene sus joyas, es el lugar que tiene a su rebaño, y anhela verla sin mancha, tacha, ni falla semejante. Siente por ella, anhelos de amor indecible, ésta es la razón por la cual nos ha dado oportunidades de trabajar para él, y nuestro trabajo es una prueba de nuestro amor y lealtad.