50 likes | 143 Views
ESPLORAZIO ETAPAREN ADIBIDEA (Hill, 2010, 180-183. orr .). Psicol .: ¡Hola! Me llamo Sandra. Disponemos de 30 minutos para explorar algún tema del que te apetezca hablar. (encuadra la sesión informándole a la cliente sobre lo que cabe esperar de la sesión) Cliente: De acuerdo.
E N D
ESPLORAZIO ETAPAREN ADIBIDEA (Hill, 2010, 180-183. orr.) Psicol.: ¡Hola! Me llamo Sandra. Disponemos de 30 minutos para explorar algún tema del que te apetezca hablar. (encuadra la sesión informándole a la cliente sobre lo que cabe esperar de la sesión) Cliente: De acuerdo. Psicol.: Así pues, ¿por dónde te gustaría empezar? (utiliza una pregunta abierta para centrar el tema) Cliente: Pues mira, la verdad es que estoy bastante nerviosa con un trabajo que tengo que hacer. Siempre me ocurre igual, espero hasta el último momento para ponerme a ello, y entonces me entra el pánico porque no tengo suficiente tiempo para hacerlo. Sé que siempre me pasa igual, pero parece que no puedo remediarlo. Psicol.: Pareces realmente preocupada de que siempre te pase lo mismo. (refleja para ayudarle a experimentar la emoción) Cliente: Sí, me preocupa echar por la ventana la posibilidad de entrar en la universidad si no termino el instituto como debiera. Psicol.: Te da miedo de que tu comportamiento arruine tus objetivos cara al futuro. (vuelve a reflejar para mantener a la cliente en el ámbito emocional y ayudarle a continuar explorando)
Cliente: Exacto. Estoy convencida de que podría irme bien en la universidad, y sé que necesito un título para tener un futuro. ¡Me preocupa mucho echar a perder todo aquello por lo que siempre he estado luchando! Psicol.: Cuéntame, la última vez que tuviste que hacer un trabajo parecido, ¿qué es lo que se te pasaba por la cabeza? (utiliza una pregunta abierta sobre contenidos cognitivos para conseguir información más concreta sobre el problema) Cliente: Bueno, la cuestión es que tengo que terminar ese dichoso trabajo para mañana y aún no he empezado. He recogido material, he subrayado algunos libros, pero todavía no he escrito nada. Encima, he andado trasnochando estos últimos días, y ando que me caigo de sueño. Psicol.: Tu voz transmite auténtico pánico. (refleja conductas no verbales de la cliente para ayudarle a reconocer emociones) Cliente: Sí, estoy aterrorizada de sólo pensar que este vez no voy a conseguirlo. Otras veces me quedo toda la noche sin dormir y lo hago de un tirón, pero esta vez me parece demasiado largo. ¡Se supone que debe tener 20 páginas como mínimo! Psicol.: ¿Y qué piensas hacer esta noche? (quiere información más detallada sobre la situación, y vuelve a realizar una pregunta abierta) Cliente: Bueno, solo quiero llegar a casa y dormir. Es lo único que quiero hacer.
Psicól.: ¿Te ha sucedido algo que haga que te resulte más difícil que en otras ocasiones terminar el trabajo? (la psicóloga percibe que la cliente está bloqueada, y piensa que quizás la situación es más complicada de lo que le ha contado; por ello, utiliza una pregunta abierta para explorar otros temas) Cliente: Tiene gracia que me lo preguntes. Acabo de tener una bronca con mi novio, y estoy muy revuelta. Quiere casarse, tener niños, ¡ya! Yo quiero seguir estudiando Pero si voy a la universidad me tendría que ir fuera por un tiempo. Psicol.: Así que sientes mucha presión ante en el dilema de estar con tu novio o ir a la universidad. (la psicóloga utiliza un reflejo para que hable sobre las emociones que se derivan de ese conflicto, por lo que se centra en ambas partes del problema) Cliente: Eso es. Como él ha dejado de estudiar y ya está trabajando, quiere que haga lo mismo. Psicol.: Da la impresión de que estás confusa. (utiliza un reflejo con el objeto de identificar las emociones pero, tal y como comentará luego en la supervisión, proyecta de manera inadecuada su confusión en el cliente, pues ella está en una situación similar) Cliente: ¡No, en absoluto, lo que estoy es enfadada! No debería dejar de estudiar una carrera por ello. Mi madre lo hizo, y siempre se ha arrepentido. No aprendió ni a conducir. Todo giraba en torno a sus hijos, y ahora que nos hemos ido se siente sola y deprimida. Yo quiero estudiar una carrera, pero no sé. No quiero arriesgarme a perder a mi novio.
Psicól.: (habla más suave) Pareces realmente abatida. (la psicóloga se ha dado cuenta de que su última intervención no fue adecuada, y cambia el foco de atención nuevamente a las emociones de la cliente mediante un reflejo) Cliente: (llora silenciosamente) Quizás por todo esto es por lo que no puedo hacer el trabajo… La pelea con mi novio, lo que sucede con mi madre... Psicol.: (la psicóloga está en silencio 30 seg. para darle tiempo a la cliente de que experimente su sentimiento de tristeza) Cliente: (llora y se suena la nariz) Psicol.: (suavemente) Estoy segura de que te resulta difícil hablar de todo esto. (le da apoyo y soporte emocional) Cliente: Sí, desde luego que lo es. ¿Qué crees que debería hacer? Psicól.: Bueno, creo que deberías hablar con tu profesor para ver si puede retrasarte la entrega del trabajo. Además, creo que deberías hablar con tu novio para resolver las cosas. Quizás deberías animar a tu madre a que acudiera también al psicólogo. (la psicóloga responde inadecuadamente a la pregunta de la cliente, aconsejándole directamente sobre lo que debería hacer). Cliente: Oh. (silencio). Bueno, no sé (la cliente deja de explorar).
Psicól.: Lo siento, demasiados consejos. ¿Cómo te sientes cuando piensas en ir a la universidad? (se da cuenta que ha dejado de explorar, pide disculpas, e intenta explorar un nuevo tema) Cliente: (continúa explorando)