660 likes | 816 Views
TEMA XII. ESQUEMA GENERAL. DISEÑOS DE REVERSIÓN: ESTRUCTURAS COMPLEJAS. Diseños de reversión complejos.
E N D
ESQUEMA GENERAL DISEÑOS DE REVERSIÓN: ESTRUCTURAS COMPLEJAS
Diseños de reversión complejos Con base a la estrategia de comparación intra-serie, el investigador puede incorporar en el diseño un elemento algo más complejo que la simple alternancia de fases en términos de línea-base/tratamiento/línea-base/tratamiento. Es decir, cabe la posibilidad de aplicar diferentes niveles o valores de la variable de tratamiento, probar el efecto de distintas variables y condiciones de tratamiento, y combinar diferentes tratamientos dentro de una misma fase.
En todos estos casos, la estructura del diseño es más compleja que el cambio de fase simple (propio de las estructuras analizadas en el capítulo anterior), aunque se sigue la misma lógica de comparación de patrones entre fases en la inferencia de la efectividad de los tratamientos.
Principales modalidades La descripción de las principales estructuras de diseño, entendidas como extensiones del formato de reversión básico, se centrará a tres variedades fundamentales: diseño multinivel, diseño de tratamientos múltiples, y diseño de interacción. La estructura del diseño multinivel corresponde, por analogía, al experimento multigrupo clásico donde se seleccionan de una misma variable de tratamiento un conjunto de valores.
Cuando esos valores (condiciones o niveles) están ordenados cuantitativamente y, en consecuencia, varían tanto en un sentido creciente como decreciente, es posible establecer la relación funcional existente entre la variable de tratamiento y la variable de resultado o dependiente.
Por otra parte, si se aplican, en una misma secuencia temporal, dos o más tratamientos en fases distintas se obtiene la estructura del diseño de tratamiento múltiple, similar al diseño factorial clásico sin el elemento de interacción. Por último, el diseño de interacción incorpora en alguna de sus fases la combinación o adición de dos o más condiciones de tratamiento. Así, en determinadas fases, el sujeto recibe de forma aditiva o combinada dos o más componentes de tratamiento, con el propósito de poder comprobar la eficacia específica de alguno de esos componentes.
Características Asistimos, en la actualidad, a un creciente incremento de publicaciones o estudios en los que se aplican diseños multinivel. Es decir, disposiciones donde se seleccionan, de una misma variable de tratamiento, dos o más valores o niveles. De esta manera, el investigador cubre un espectro más amplio de necesidades, al obtener mayor información acerca de la posible relación entre la variable de tratamiento y la variable conductual.
Al mismo tiempo, estas estructuras de diseño se basan en la técnica de aplicación y retirada de la variable de tratamiento en períodos o fases diferentes, y permiten observar los cambios que, a través de las distintas fases, experimentan los patrones conductuales. De acuerdo con este enfoque de investigación, la variable de tratamiento es aplicada, consecutivamente, a distintos niveles. Así, el investigador es capaz de identificar la posible relación funcional entre la variable de tratamiento y la de respuesta.
Modelos de diseño multinivel En cuanto a las variaciones o modalidades del diseño multinivel, cebe distinguir dos disposiciones, consideradas como las más comunes.
A) En primer lugar, el diseño A-B1-A-B2-A cuyo formato viene a ser una variedad del diseño A-B-A de tres fases. Obsérvese que esta primera versión de diseño multinivel se caracteriza por la combinación de dos estructuras simples de tipo A-B-A, y por el hecho de que la segunda fase de línea base es crítica con respecto al primer nivel de la variable de tratamiento y es de control con respecto al segundo nivel. La última fase de línea base sirve para evaluar el segundo nivel de la variable de tratamiento.
B) En segundo lugar, el formato A-B1-A-B1-B2-B3-B4-B5, donde se combina la estrategia del diseño simple de tres fases, A-B-A, con una secuencia de fases con variación sucesiva de niveles. Dicha secuencia es, como veremos, similar a la estrategia de cambio de criterio donde se produce una variación gradual de la variable de tratamiento a lo largo de las sucesivas fases, siempre y cuando se tengan en cuenta ciertas matizaciones.
Sistema de economía de fichas y conducta agresiva (Phillips,1968) Sujetos jóvenes conflictivos convivían en un ambiente familiar Registros expresiones y manifestaciones agresivas Propósito del estudio reducir la tasa de la conducta agresiva
Procedimiento La investigación se llevó a cabo en hogares o centros de acogida, donde unos pocos jóvenes conflictivos convivían en un ambiente familiar. Estos jóvenes mostraban algún tipo de conducta agresiva o socialmente no adaptada, y se creyó oportuno valorar la eficacia del sistema o procedimiento de economía de fichas como tratamiento eficaz para modificar estos patrones conductuales. De acuerdo con el procedimiento de economía de fichas, se daban puntos a los jóvenes cuando actuaban correctamente y les eran quitados cuando se comportaban de forma incorrecta.
Estos puntos fueron hechos contingentes tanto de las conductas manifiestas, como de las expresiones verbales agresivas. Así, ante expresiones tales como "te daré un puñetazo" o "te abollaré tu coche si se cruza por mi camino" el joven era corregido y se le imponía una multada de 20 o 50 puntos.
Cantidad de frases agresivas de tres jóvenes en sesiones de tres horas y bajo cada condición. La flechas indican las amenazas a reaplicar la multas
Resultado Del examen del gráfico correspondiente, donde se recogen los datos de tres sujetos, se concluye que las frases correctivas tuvieron escaso o nulo efecto. Sin embargo la penalización o retirada de puntos demostró ser efectiva. Cuando se comparan los dos niveles de la condición de "penalización" o "castigo con multa", se concluye que la segunda condición posee un efecto más drástico. De hecho, con la segunda condición de tratamiento desaparecen casi completamente las expresiones verbales de carácter agresivo.
Ventajas y limitaciones Quizá la ventaja más importante a destacar es que el diseño multinivel permite plantear investigaciones de carácter analítico y funcional. De esta manera, es posible probar la forma en que los distintos niveles o valores de la variable de tratamiento afectan diferencialmente la conducta del sujeto y establecer la posible relación entre las variables de tratamiento y de conducta. En común con el resto de los diseños de sujeto único, esta estructura no está dotada de una protección total contra las posibles amenazas a la validez interna, particularmente, cuando nos referimos al segundo formato.
Debido a la propia secuenciación de las fases, es posible que se produzcan procesos de maduración que se conviertan en causas alternativas del mejoramiento de la conducta. Lo mismo ocurre en cuanto a los posibles efectos de práctica y aprendizaje. Por todo esto, es aconsejable extremar las cautelas, a fin de que los tratamientos y sus niveles no queden confundidos con otras variables que, de alguna forma, pueden estar presentes y producir los mismos resultados observados.
Características Los diseños de tratamiento múltiple, conocidos también por diseños de componentes múltiples (Kratochwill y Levin, 1978), permiten estudiar el efecto de dos o más condiciones de tratamiento, de forma sucesiva. A veces, como destaca Kazdin (1982), esos diseños suelen ser considerados como una extensión de los diseños de reversión de cuatro fases A-B-A-B.
Modelos del diseño de tratamiento múltiple Se dan dos versiones básicas del diseño. A) El formato A-B-C-B-C es una estructura de cinco fases donde se combinan dos tratamientos, B y C. Estas condiciones suelen recibir el nombre de componentes de tratamiento. En algunas aplicaciones del diseño, se presentan de forma más simplificada: A-B-C. B) Una segunda categoría básica de diseño alterna las condiciones de tratamiento con fases de línea base. Dentro de esta categoría cabe distinguir dos modalidades.
La primera, consiste en la simple alternancia de los tratamientos con las fases de línea base, como por ejemplo, el formato A-B-A-C-A. La segunda modalidad, un tanto más compleja, combina el elemento de tratamiento múltiple con el elemento multinivel. En un mismo estudio se comparan dos tratamientos y diferentes valores de una de las variables de tratamiento: A-B-A-C1-A-C2-A. Según esta estructura hay dos variables de tratamiento (B y C), donde la variable C actúa a dos niveles. Aunque, como es común en investigación conductual, no todos los experimentos se ajustan, de forma exacta a los modelos teóricos propuestos.
Programa de refuerzo y conducta perturbadora (Foxx y Shapiro,1978) Sujetos niños pertenecientes a un régimen de educación especial, Registros conductas perturbadoras se identificaron las siguientes: golpear, lanzar objetos, chillar, abandono del puesto de trabajo, etc. Propósitos del estudio reducir la conducta perturbadora mediante un programa de refuerzo
Procedimiento Los autores del estudio trataron de reducir las conductas perturbadoras de niños pertenecientes a un régimen de educación especial, aplicando para ello una ligera modificación del diseño A-B-C-B-C. Entre las conductas perturbadoras se identificaron las siguientes: golpear, lanzar objetos, chillar, abandono del puesto de trabajo, etc. Después de un período de línea base (fase A), se introduce un programa de refuerzo consistente en alimento y refuerzo social. De acuerdo con ese programa, cuando los niños estudiaban o estaban quietos en sus puestos recibían refuerzo, durante el período de intervención o fase B.
Porcentaje medio de tiempo invertido en conducta disruptiva de cuatro sujetos (Foxx y Shapiro, 1978)
Resultado Aunque, como se observa en el gráfico, se produce una reducción de la tasa de conductas perturbadoras, la mejora es casi imperceptible. A continuación, se introduce en la fase siguiente un procedimiento de tiempo fuera de refuerzo (fase C). Es decir, los niños seguían recibiendo refuerzo, pero cuando ocurría algún tipo de comportamiento incorrecto, el niño tenía que quitarse una cinta del cuello, lo cual indicaba que no podía recibir las consecuencias reforzadoras. Obsérvese que la incidencia del procedimiento de quitarse cintas o de tiempo fuera fue drástica.
La cuarta fase permitió corroborar que el procedimiento del tiempo fuera fue efectivo por cuya razón se instauró, de nuevo en la fase quinta del experimento, este procedimiento. Aunque, de acuerdo con la estructura del formato, el diseño carece de una última fue de línea base, es posible afirmar que la característica propia de esa modalidad es la sucesión alternante de dos tratamientos: refuerzo simple y tiempo fuera.
Ventajas y limitaciones La ventaja más importante de esta disposición es la posibilidad de probar, en un mismo estudio, el efecto de dos o más condiciones de tratamiento y comparar su efecto diferencial sobre una o más conductas objeto. Si además se combinan, en un mismo experimento, la estrategia de tratamiento múltiple con la estrategia multinivel, aumentamos la capacidad heurística del experimento. Es decir, en un mismo experimento es posible probar la eficacia de dos o más tratamientos (contraste cualitativo) y al mismo tiempo efecto diferencial de uno de ellos (contraste cuantitativo).
No obstante, debido a la excesiva cantidad de fases que comportan estas estructuras, es posible que los efectos de los tratamientos queden contaminados o confundidos por factores derivados del paso del tiempo y que, de alguna manera, podrían explicar el cambio operado en ese sentido.
Otra de las limitaciones de estas estructuras es que no permiten estudiar la acción conjunta de dos o más tratamientos; es decir, su efecto aditivo o de interacción. Así, retomando el último ejemplo analizado, el investigador podría preguntarse si el feedback es efectivo cuando va a acompañado por la economía de fichas. El carácter de adición o combinación de los tratamientos sólo puede examinarse mediante los diseños interactivos.
Una última limitación, común a esa categoría de diseños, es el posible efecto de tratamiento múltiple. Dada la inherente secuenciación de las condiciones, es posible que el orden con que son aplicados ejerza algún efecto tanto de carácter positivo como negativo, sobre la conducta objeto de estudio.
Características Muchas veces, el investigador se halla interesado en evaluar distintos componentes de tratamiento de forma simultánea o conjunta, combinando en una misma fase dos o más condiciones de la variable de intervención. La lógica de esa estructura consiste en añadir, en la fase de cambio, una nueva condición de tratamiento (método de inclusión o suma), o sustraer temporalmente de la fase de cambio un componente de tratamiento presente ya en el sistema (método de retirada o supresión).
Según los métodos propuestos, cabría la posibilidad de plantear secuencias tales como B-BC-B, C-CB-C, BC-C-BC, etc, cuya lógica de comparación es, en todos estos casos, similar a la utilizada en el diseño de cambio de fase simple. Por ejemplo, mediante la estructura B-BC-B se compara BC con B, cuando B actúa ya en el sistema lo cual es, sin duda, algo más complejo que una simple comparación entre línea base y tratamiento.
Ante una estructura como la propuesta, la cuestión se plantea en los términos siguientes: ¿cuál es el efecto combinado de un par de componentes de tratamiento, BC, cuando es comparado con el efecto de solo componente o, por ejemplo, con el efecto de B? Cuando se añade una condición a otra ya existente el resultado puede ser diferente a la simple suma de dos efectos, de ahí el sentido que tiene probar el efecto compuesto de ambas condiciones. Por otra parte, la estructura de cambio BC-C-BC permite evaluar el efecto interactivo BC mediante la retirada temporal de B.
En este segundo caso, se parte de una estrategia distinta a la anterior, puesto que la naturaleza del compuesto de tratamiento se verifica substrayendo, temporalmente, uno de los tratamientos. Obsérvese que, de acuerdo a esta segunda estrategia, se inicia el estudio con un efecto interactivo que sólo queda de manifiesto cuando con la retirada de uno de los tratamientos se modifica el patrón conductual inicial.
Condiciones de aplicación Según la lógica de la comparación, subyacente en los diseños de interacción, han de cumplirse dos supuestos fundamentales. A) Han de examinarse, en la medida de lo posible y por separado, los efectos de cada uno de los tratamientos y, a continuación, la acción combinada de los tratamientos.
B) No debe variarse más un tratamiento a la vez, al pasar de una fase a la siguiente. De esta manera, en su formato puro el diseño de interacción de dos tratamientos es representado por la secuencia A-B-A-C-A-B-BC-B divisible en dos partes. La primera parte, formada de cinco fases (A-B-A-C-A), se ajusta a la estructura de un diseño de tratamiento múltiple. La segunda parte (B-BC-B) es una secuencia de tres fases, donde la última es utilizada como fase crítica para inferir el efecto conjunto de los dos tratamientos.
Amplia variedad de formatos Gran parte de los diseños interactivos siguen formatos sui generis, si se tienen en cuenta, de forma estricta, los presupuestos indicados. Sin embargo, cuando en determinadas ocasiones se conoce, por estudios previos, el comportamiento de alguno de los tratamientos, es posible analizar sus efectos compuestos sin la previa evaluación por separado de uno o más tratamientos.
Por dicha razón, solemos encontrar formatos de diseños interactivos un tanto particulares y, a veces, un tanto incorrectos (en el sentido propuesto por Hersen y Barlow, 1976). Esta es la causa por la que solemos encontrar, en la literatura de investigación conductual, una rica variedad de formatos de diseños de interacción.
Unidades de tiempo Formato del Diseño de Interacción: Estructura básica Principales modalidades Diseños de interacción Formatos Incorrectos: A-B-A-B-BC Formato correcto: A-B-A-C-A-B-BC-B
Estudio (a) sobre la conducta neurótica (Leitenberg at al.,1968) Sujetos paciente de 59 años fóbica a los cuchillos y objetos cortantes Registros la cantidad de tiempo, en segundos, que la paciente era capaz de estar presente frente a un cuchillo sin presentar síntomas de ansiedad o temor Propósito del estudio reducir la ansiedad de la paciente
Tratamientos Los tratamientos aplicados a las distintas fases fueron los siguientes: feedback o información retroactiva (B), elogio (C). Cada sesión constó de 10 ensayos. Durante el feedback el terapeuta, después de cada ensayo, indicaba a la paciente el tiempo que había sido capaz de estar ante el cuchillo. El elogio consistió en refuerzos verbales tales como excelente, bien, esto fue mejor, etc., y la paciente era elogiada cuando el tiempo invertido en el ensayo excedía un criterio progresivamente creciente.
De esta manera, si el criterio para dispensar elogio había sido, en el ensayo 9, de 20 segundos, y la paciente había permanecido 40 segundos, el criterio para el ensayo 10 fue de 30 segundos.