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LA OLLITA DE VIRTUD de Pedro Urdemales. Una vez que Pedro Urdemales estaba cerca de un camino haciendo su comida en una olla que, calentada a un fuego vivo, herv
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1. BIBLIOTECA INNOVADORA PARA LA RURALIDAD Coordina:
Centro de Estudios Brasileños
Integrantes: Dulce Codeco Dos Santos, Lavinia Reyes, Katherine Retamal, Sylvia Albernaz Machado do Carmo, Enrique Venegas, Cecilia Alvarado, Maria Isabel Brieva, Paula Larraín, Paulina Vidal, Josefina Martinez de Henríquez, Andrea Aguila
2. LA OLLITA DE VIRTUD de Pedro Urdemales
Una vez que Pedro Urdemales estaba cerca de un camino haciendo su comida en una olla que, calentada a un fuego vivo, hervía que era un primor, divisó que venía un caballero montado en una mula, y entonces se le ocurrió jugarle una treta. Saca prestamente la olla del fuego y la lleva a otro sitio distante, en medio del camino, y con dos palitos se pone a tamborear sobre la cobertera, repitiendo al compás del tamboreo: — Hierve, hierve, ollita hervidora, que no es para mañana, sino para ahora. El caballero, sorprendido de una operación tan extraña, le preguntó qué hacía, y Pedro Urdemales le contestó que estaba haciendo su comidita. — ¿Y cómo la haces sin tener fuego? — interrogó el caballero y Pedro, levantando la tapa de la olla, repuso: — Ya ve su mercé cómo hierve la comidita. Para que hierva no hay más que tamborear en la tapadera y decirle: — Hierve, hierve, ollita hervidora que no es para mañana, sino para ahora. El caballero, que era avaro, quiso comprarle la ollita que podía hacerle economizar tanto; pero Pedro Urdemales se hizo mucho de rogar, hasta que le ofreció mil pesos por ella y Pedro aceptó. El viejo, que creyó hacer un gran negocio, vio muy luego castigada su avaricia, pues la ollita a pesar del tamboreo y del ensalmo, siguió como si tal cosa.
3. Breve presentación Desde la perspectiva de generar un modelo que sirva para el fomento lector principalmente en las zonas rurales del país, es que se plantea el siguiente estudio y a la base la necesidad de visualizar un espacio físico en el entorno rural, el cual de cabida en forma efectiva el poder pensar y hacerlo palpable el fomento lector.
De esta manera llegar con el libro y lo que este significa, en función de poder enriquecer la cultura, disminuir la brecha de la desinformación que sufren los habitantes de las zonas rurales, el aislamiento, el menoscabo al momento de poder acceder a fuente laborales y en definitiva el sentir que no cuentan o no tienen la misma información y competencias que la población que vive en las ciudades.
Por lo que desde ya nos preguntamos cómo poder acercar el libro a estas personas en forma lúdica, efectiva y práctica.
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