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SIERVA DE DIOS: ARCÁNGELA BADOSA CUATRECASAS. "ÁNGEL DE CARIDAD". Montaje: Asunción Perelló Senent. En este bello pueblecito nació nuestra Hna. Arcágela. San Juan les Fonts (Girona). En esta Iglesia fue bautizada. De niña era la bondad personificada.
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SIERVA DE DIOS: ARCÁNGELA BADOSA CUATRECASAS "ÁNGEL DE CARIDAD" Montaje: Asunción Perelló Senent
En este bello pueblecito nació nuestra Hna. Arcágela. San Juan les Fonts (Girona)
En esta Iglesia fue bautizada.
De niña era la bondad personificada. La naturaleza, los prados, los pájaros, los frutos de la tierra... la llamaban a alabar al Creador.
“¡Qué bueno es el Señor que hace producir tanta fruta y tanta verdura para alimentarnos...! ¡Debemos serles agradecidas siendo muy buenas!”
Sus padres Quedó huérfana a la edad de 9 años. Ella queda responsable de cuidar de sus hermanitos.
Una tía de su madre, tía Joaquina, se los lleva a la ciudad de Olot en donde vive.
Y los pone a trabajar en una fábrica de imágenes religiosas.
Fue una obrera ejemplar y pasó su adolescencia y juventud en el taller al mismo tiempo que tenía que cuidar de su tía enferma: dejando el buen olor de la santidad... Cuando abandonó el taller, las compañeras se disputaban su silla porque decían: “Aquí ha estado una santa”.
Soñaba con hacerse Religiosa al igual que dos de sus hermanas. Y un buen día caminó hacia el Carmelo.
¡Vuelo al Carmelo! ¡Qué dicha vestir el hábito carmelita! “Señor, aquí me tenéis, toda para Vos y por Vos”. “Sólo quiero Su gloria. Yo soy feliz con poderlo amar”.
Siempre tiene presente a JESÚS “¿Qué haría Jesús en mi lugar? Pues igual quiero hacerlo yo”.
La Eucaristía es el centro de su vida.
“Cuando no puedo más, me dirijo al sagrario; me voy junto al sagrario y salgo tan confortada que ya no siento nada”.
Destinada al hospital municipal de Elda, se dedica a cuidar a los enfermos.
Tiene un amor grande a la Virgen María y Ella será su modelo. “¿Qué haría nuestra Señora en mi lugar? ¡Qué bien cuidaría a los enfermos...! ¡Pues igual debo hacer yo!”
Vive en la presencia de Dios “Con los enfermos siempre rezo, porque ellos representan a Dios. En todos veo a Dios con su gloria y su amor a favor del género humano”.
“Cada tarde rezaba con los enfermos el rosario”. Antes del descanso les daba a besar el escapulario de la Virgen del Carmen.
Se encargaba de los enfermos más graves, especialmente de los tuberculosos, siendo para ellos su consuelo y su fortaleza.
Al igual que los enfermos que cuidaba, enfermó de tuberculosis. “Es mi cruz. Si Nuestro Señor está contento, yo estoy satisfecha. Yo sólo quiero su gloria, estoy feliz de amarle”.
Predice el día que morirá “Moriré el miércoles, día que el Carmelo consagra a la Virgen junto con el sábado”.
La noche antes de morir, se despidió de los enfermos “¡Qué contenta estoy de morir, de unirme con mi Amado”.
Las últimas palabras que dijo conscientemente fueron: “Adiós, Madre y Hermanas, me voy al cielo. Os esperaré a todas allí”.
“Sí, te amo Jesús. Te amo mucho, mucho, mucho”
Se quedó mirando fijamente una imagen de Nuestra Señora y murmuró: “Acordaos, ¡oh! piadosísima Virgen María...” que terminó en la eternidad.
La fama de santidad de la Sierva de Dios Arcángela Badosa Cuatrecasas, llamada “ÁNGEL DE CARIDAD” persiste hasta nuestros días como prueba indiscutible de una vida entregada al amor y servicio a los enfermos ya que el Señor, a través de la intercesión de la Sierva de Dios, continúa regalando gracias y favores a todos los que la invocan.