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Sociedad, delito, derecho y proceso: Bases Conceptuales para comprender su vinculación con el problema de la seguridad y el conflicto. Delitos Delincuentes Crímenes. Asesinos Violencia Abusos. Cuando hablamos de seguridad usamos palabras tales como:. Fenómenos Sociales : -violencia
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Sociedad, delito, derecho y proceso: Bases Conceptuales para comprender su vinculación con el problema de la seguridad y el conflicto
Delitos Delincuentes Crímenes Asesinos Violencia Abusos Cuando hablamos de seguridad usamos palabras tales como:
Fenómenos Sociales: -violencia -abusos Fenómenos Políticos: -delitos -delincuentes, etc. Estas palabras no están en el mismo nivel de análisis: Realidades que por su gravedad son transformadas en delito por el Estado
Todas estas realidades se dan en el marco de una sociedad conflictiva: • no hay trabajo ni bienestar para todos • ha aumentado la desigualdad • han cambiado las expectativas de los jóvenes, de las mujeres • las ciudaddes son demasiado grandes • la dirigencia nos irrita • “la sociedad nos estimula deseos y ambiciones desde pequeños pero luego nos impide acceder a los instrumentos para satisfacerlos” (R.K.Merton, padre de la escuela estructural-funcionalista) En síntesis, muchos en un espacio hostil, viviendo insatisfechos.
Cuando nos quejamos de la inse guridad, lo que estamos diciendo es;No se puede vivir en una sociedad conflictiva en la que cada conflicto se resuelve a favor del que es capaz de abusar de su poder: • ya sea físico, • porque está armado, • porque es audaz y arrebata, • porque esta amparado por el poder, • porque maneja los resortes del poder público, • porque tiene impunidad
Analicemos el siguiente párrafo: “Se suele asociar espontaneamente la inseguridad con la delincuencia. Esta representa una de las preocupaciones principales de los entrevistados en las distintas encuestas de los últimos años. La inseguridad descansa, mas allá de las tasas reales de delitos, sobre la definición metafórica del delincuente. Es la imagen de un delincuente omnipotente y omnipresente la que condensa un temor generalizado y, por lo mismo, exagerado. El delincuente deviene, al menos en parte, en “chivo expiatorio” que nombra (y esconde) una realidad difícil de asir. El análisis de la seguridad ciudadana remite pues a factores subyacentes. En el miedo al otro resuenan otras inseguridades; aquellas provocadas por el debilitamiento del vínculo social, del sentimiento de comunidad y finalmente, de la noción misma de órden”. Naciones Unidas PNUD, Informe de desarrollo humano en Chile 1998.
Análisis 1: -Una dimensión es la llamada “inseguridad ob jetiva”. Que consiste en la cantidad de hechos de violencia, robos, etc. que se producen en un es pacio determinado (ciu-dad, barrio, etc.) y la cantidad y calidad de respuestas institucionales a esos hechos. Análisis 2: -La segunda es la “in-seguridad subjetiva” o “sensación de inseguri-dad” y consiste en el te- mor, la incertidumbre, el miedo al otro o el senti-miento de fragilidad que producen tanto los hechos objetivos de inseguridad como otros múltiples fac-tores, difíciles de asir.
Análisis 3: -Las relaciones entre ambas dimensiones son fluctuantes y no responden a una relación de “espejo”. Es decir, la dimensión subjetiva no es el “reflejo” exacto de la dimensión objetiva. Esto porque los factores que confluyen a generar el miedo son diversos e, incluso, pueden provenir de áreas que no están relacionadas con los delitos o con las respuestas institucionales a ellos. Todo problema de seguridad se conforma con las dos dimensiones y ambas son reales en el sentido de existentes.
En el párrafo se señalan tres factores: • Temor generalizado: Uno de los factores que contribuyen más a la inseguridad subjetiva es la crisis general del Estado, su profunda y traumática reestructuración en las últimas dos décadas. Desapareció la seguridad de que el Estado proveería educación, salud y auxilio en la vejez. Al contrario, el Estado mismo es el potencial agresor y se puede quedar con mis ahorros, estafarme, etc. • Chivo expiatorio: Esto no significa que el delincuente no tenga grandes responsabilidades sino el hecho de que necesitamos “corporizar”, “darle entidad”, “volver visibles” males que no podemos explicar, no podemos dominar y que se vuelven mucho más atemorizantes si no existe “un responsable”. • En el miedo al otro resuenan otras inseguridades: Los autores del párrafo nos dan algunos ejemplos de causas de esos temores generales: el debilitamiento del vínculo social, del sentimiento de comunidad y, finalmente de la noción misma de órden.
¿Poner orden es la solución a la inseguridad? ¿Existe solución? • Los sistemas democráticos, con sus imperfecciones, tratan de solucionar el problema, partiendo de las siguientes bases: -nadie tiene toda la razón acerca de lo que es necesario hacer -no se puede caer fácilmente en la idea de un orden que construir, válido para todos. • Por ello generan mecanismos para gestionar la conflictividad y para construir consensos, mediante un procedimiento que permita conocer las opiniones de todos, que permita discutir y cuando se llega a una decisión se la funde en razones que puedan ser conocidas por todos.
La ilusión del orden: • nos hace vivir todos estos procedimientos y reglas como imperfecciones y no como posibilidades • nos hace mirar a la conflictividad siempre de un modo negativo • es una de las mayores causas del malestar cotidiano, de la ansiedad por soluciones inmediatas y del rechazo de toda discusión y debate • anula la conciencia crítica Es necesario superar esa ilusión para encarar con profundidad los problemas de seguridad de la sociedad y asumir con paciencia y realismo las cuotas de conflictividad que o son necesarias para el desarrollo social o no se pueden revertir en el corto plazo.
Conflictividad no siempre de un modo negativo: • La existencia de conflictos no debe ser vista necesariamente como un componente negativo de la interacción social (N. Cristie “Una sensata cantidad de delito”) • Una sociedad no se funda sólo en consenso y cooperación ya que ello generaría un equilibrio solidificado, que impediría el desarrollo de nuevos valores, actividades, acciones individuales o sociales • Toda sociedad tendrá un grado de equilibrio entre consensos, cooperación y conflictos que la movilizará permanentemente • El sistema político es un regulador de esos equilibrios inestables, tanto en un sentido positivo como negativo
El contexto de las grandes urbes:Todos los problemas vistos hasta ahora se agravan. • generan conflictividad en todas las áreas (uso de espacio público, en el transporte, en uso de los servicios básicos) • los problemas se agravan cuando el nivel de exclusión social es muy alto. • toda desigualdad es mas evidente y ello genera graves distorsiones en las reglas de convivencia • la desigualdad favorece una conflictividad difícil de gestionar, sobretodo cuando su gravedad y permanencia provocan la inmovilidad social y el destino no depende del propio esfuerzo sino del azar del nacimiento • La desigualdad rompe la trama social, crea mundos que no se comprenden, favorece el abuso y dificulta la vida social
Gestionar la conflictividad: • Toda política que desarrolla el Estado implica siempre la utilización de recursos limitados y con gran costo de oportunidad, el hecho de que sólo podamos (y debamos) utilizar los instrumentos violentos para intervenir en algunos conflictos, no quiere decir que debamos olvidarnos del resto. • Para ellos existe todo el resto de instrumentos que configuran el sistema de gestión de la conflictividad. Configura un problema, cuando, como en nuestro país, estos instrumentos son débiles, no se han desarrollado o nadie se preocupa por perfeccionarlos. La llamada crisis de seguridad es sólo una parte de una crisis mayor, la del sistema de gestión de los conflictos.
Un sistema político se hace cargo de la conflictividad de muchas maneras: • trata de distribuir sus tareas con otras instituciones sociales (iglesias, comisiones barriales, clubes, ong, etc. • trata de anticiparse a los conflictos y construye modelos de cómo resolverlos (redacta leyes, dicta sentencias) • se organizan ámbitos o mecanismos para favorecer la conciliación de esos conflictos • organiza un sistema de autoridades y procedimientos para que atiendan los litigios, determinen quien tiene razón y que se debe hacer en consecuencia (justicia civil) • Finalmente, se utilizarán instrumentos violentos (cárcel) para intervenir en los conflictos, y se dispondrán autoridades y procedimientos para administrar esa violencia
Sistema público de gestión de conflictividad • Conjunto de instituciones que de diversos modos (preventivos, disuasivos y reactivos) intervienen en la gestión de la conflictividad • Instituciones judiciales, policiales, penitenciarias, del poder ejecutivo, etc. • Las instituciones, objetivos, rutinas, asignación de recursos, interrelaciones, etc. son diseñadas por las políticas vinculadas a la gestión de la conflictividad • Tales políticas son: la de seguridad, criminal y judicial
¿Qué son los delitos? • Cuando se decide intervenir en modo violento en los conflictos, nuestras Constituciones obligan con anterioridad a crear un delito, porque no queremos que el Estado utilice los instrumentos violentos sin control y en gran cantidad • Su creación implica la descripción con toda precisión de los casos en los que el Estado está autorizado a ejercer violencia • El segmento de políticas de gestión de la conflictividad que se preocupa de cómo, cuándo y para qué crear delitos, lo conocemos como política criminal
Política Criminal • El Estado no puede intervenir en todos los conflictos con violencia, eso agravaría el problema y haría indeseable vivir en ese país • Aún cuando elijamos sólo una porción, no hay posibilidad de intervenir en todo ellos con eficacia • Un principio no sólo político sino de sentido común indica que cuando el estado pueda intervenir con eficacia de forma no violenta debe optar por esta solución (prevención, conciliación) • La prevención debe actuar sobre ciertos elementos que tienden a influir en el aumento de la cantidad, calidad o violencia de los conflictos (sin caer en mitos, drogadictos, chicos de la calle,etc.) • Requiere sentido común, ensayo y error, medición de resultados, apoyo profesional, estabilidad y no espectacularidad
¿Es posible prevenir los delitos? • Conocemos muy poco sobre el desarrollo de la conflictividad misma y eso dificulta el diseño de acciones preventivas • Nos falta un sistema escalonado de gestión de la conflictividad • Debemos adquirir la capacidad de prestar atención a los conflictos no bien ellos comienzan a manifestarse e impedir que crezcan sus cuotas de violencia
Diseño Constitucional • Preámbulo: • “…por voluntad y elección de las provincias que la componen, en cumplimiento de pactos preexistentes, con el objeto de constituir la unión nacional, afianzar la justicia, proveer a la defensa común, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad…”
Art. 5: Cada provincia dictará para sí una Constitución bajo el sistema representativo republicano, de acuerdo con los principios, declaraciones y garantías de la Constitución Nacional; y que asegure su administración de justicia. • Art. 75 in. 12: Dictar los códigos Civil, Comercial, Penal, de Minería y del Trabajo y Seguridad Social… sin que tales códigos alteren las jurisdicciones locales….
C.S.J.N.(Fallo Casal) • “7°) Que nuestra tradición jurisprudencial en materia procesal penal no responde a lo que se suele denominar interpretación progresiva en sentido estricto. En general, no fue la jurisprudencia la que avanzó sobre las leyes procesales, sino que éstas fueron progresando y la jurisprudencia acompañó ese avance. Más bien puede afirmarse que se operó un acompañamiento jurisprudencial a una legislación lentamente progresiva.- La Constitución Nacional estableció como objetivo legal un proceso penal acusatorio y con participación popular. La legislación nacional no se adecuó a este objetivo, pero la perspectiva histórica muestra una progresión hacia la meta señalada, posibilitada por el subjuntivo empleado en el originario art. 102 y actual 118 constitucional. La jurisprudencia constitucional fue acompañando este progreso histórico, sin apresurarlo. Es decir que en ningún momento declaró la inconstitucionalidad de las leyes que establecieron procedimientos que no se compaginaban con la meta constitucional, lo que pone de manifiesto la voluntad judicial de dejar al legislador la valoración de la oportunidad y de las circunstancias para cumplir con los pasos progresivos. Justo es reconocer que esta progresión legislativa se va cumpliendo con lentitud a veces exasperante, pero respetada por los tribunales”.- (CSJN, Casal , Matías Eugenio, 20/09/2005)