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Tema 3 MINISTROS EXTRAORDINARIOS DE LA SAGRADA COMUNIÓN. Parroquia de Nuestra Señora de la Soledad Sr. Cura Dr. Félix Castro Morales. Todos los servicios y ministerios en la Iglesia tienen un mismo fin, hacer posible la salvación de las almas, .
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Tema 3 MINISTROS EXTRAORDINARIOS DE LA SAGRADA COMUNIÓN Parroquia de Nuestra Señora de la Soledad Sr. Cura Dr. Félix Castro Morales
Todos los servicios y ministerios en la Iglesia tienen un mismo fin, hacer posible la salvación de las almas, viviendo y desempeñando los servicios y ministerios desde una fe viva, una esperanza firme y una caridad constante, • haciendo vida las virtudes teologales, especialmente con los más pobres y desamparados como son en este caso los enfermos.
Derecho Canónico 1. EL MINISTRO EXTRAORDINARIO DE LA COMUNIÓN EN EL CÓDIGO DE DERECHO CANÓNICO El canon 230 § 3 indica lo siguiente: Donde lo aconseje la necesidad de la Iglesia y no haya ministros, pueden también los laicos, aunque no sean lectores, ni acólitos, suplirles en algunas de sus funciones, es decir, ejercitar el ministerio de la palabra, presidir las oraciones litúrgicas, administrar el bautismo y dar la sagrada comunión, según las prescripciones del derecho.
Por lo tanto, de modo ordinario pueden administrar la comunión exclusivamente los clérigos indicados. Puede haber ministros extraordinarios de la comunión; para que éstos ejerzan tal función, el derecho requieredos requisitos: • 1º.) donde lo aconseje la necesidad de la Iglesia. El canon 230 § 3 habla de necesidad, no de utilidad de otro tipo.No se refiere, por lo tanto, a otros criterios, como son la mayor solemnidad de la ceremonia, o la celebración particular de un grupo de personas. 2º.) No haya ministros. No sería el caso previsto, si hay ministros que pueden atender al ministerio de la comunión con cierto incomodo. Sería el caso de las comuniones a los enfermos, o de ordinario las misas parroquiales en que no hay sacerdotes en la iglesia. 3º.) El canon 231 establece que para ejercer este ministerio laical se requiere de la debida formación, conciencia y generosidad (formación permanente). estar adecuadamente instruido y ser recomendable por su vida, por su fe y por sus costumbres “No sea elegido nadie cuya designación pudiera causar admiración a los fieles”.
2. Normas básicas 1) Laicos que distribuyen la comunión • 2) Funciones de este ministerio Dentro de la Misa: Ayudar al sacerdote a repartir la Comunión cuando haya muchos comulgantes, falten otros ministros ordenados, o cuando se dé bajo las dos especies. Fuera de la Misa: Impartir la Comunión a los fieles que lo deseen cuando el sacerdote esté ausente. Comunión a enfermos: Llevar la Comunión a los enfermos. 3) Motivación de este ministerio La primera motivación es la utilidad pastoral: - Ayudar a repartir la Comunión cuando son muchos los fieles a recibirla, favorece el que la celebración sea ágil, proporcionada, y no innecesariamente larga. - Fuera de la Misa, la comunidad cristiana encuentra facilitado su acceso a la Comunión.
4) Quien puede ser ministro extraordinario de la comunión - Que la persona sea ya madura, - aproximadamentemayor de 25 años, - con buena fama, - aceptada en la comunidad • - y que ofrezca cierta garantía en cuanto a su vida cristiana, su fe y sus buenas costumbres. - realizarse con desenvoltura y dignidad. - Que los designados estén comprometidos en alguna clase de apostolado: catequesis, cuidado de enfermos, que pertenezcan al equipo de liturgia, al consejo pastoral o a una comunidad religiosa, o bien desarrollen alguna actividad parroquial.
5) Modo de designación Es el Obispo a quien corresponde la designación de los ministros extraordinarios de la Comunión, tras haber escuchado la petición de los párrocos. El Obispo, o bien el Vicario u otro Delegado, designa oficialmente a estas personas para que puedan ejercer en su Parroquia el ministerio de distribuir la Comunión El responsable de la comunidad, después de haber consultado con los otros miembros de la comunidad, presenta al Obispo los nombres de las personas
6) Rito del nombramiento El rito para la designación estable de los ministros extraordinarios de la comunión es el siguiente: - Se comienza con una monición - A continuación se pregunta a los candidatos, - La asamblea hace oración sobre ellos. - También tiene particular recuerdo por ellos en la oración universal.
7) Qué es un ministro extraordinario Los laicos que reciben la misión de distribuir la Comunión, dentro o fuera de la Misa, son considerados ministros "extraordinarios" de la Comunión. Llamar a uno ministro "extraordinario" significa que sólo puede ejercitar el encargo recibido en ausencia de los ministros ordinarios.
8) Modo de realizar el ministerio a) Los ministros extraordinarios suben al altar en el momento adecuado. b) El sacerdote celebrante, después de comulgar, distribuye la Comunión a los ministros extraordinarios para que comulguen ellos. c) El sacerdote, a continuación, les entrega el copón (y el cáliz, si la comunión se realiza bajo las dos especies) para que se vea que son como una prolongación del celebrante, que es el representante del mismo Cristo. d) Los ministros extraordinarios bajan a repartir la Comunión a los fieles. Lo harán con pausa y expresividad, mostrándola ante cada uno y diciendo con calma: "El Cuerpo de Cristo" e) Es importante conocer que es mucho más expresivo dar la Comunión, a invitar a que los fieles la cojan. Queda mejor expresada la mediación de la Iglesia cuando se hace por sus ministros. De aquí que sea aconsejable el que también los ministros extraordinarios la reciban por el sacerdote celebrante, antes de distribuirla al resto de los fieles.
9) Pastoral de conjunto deberán tenerse en cuenta unos principios de pastoral bastante evidentes: - Que la elección de las personas se haga en coordinación con otros ministerios y tareas de la vida de la comunidad (catequesis, cuidado de enfermos, servicios de caridad, pastoral de preparación de sacramentos, etc.). - Que esta elección se haga, sobre todo, en coordinación con el responsable último, el párroco, en cuanto a la designación como al ejercicio del ministerio. - Que se realice este ministerio, fundamentalmente, todos los domingos, como día de la comunidad y día del Señor, tanto en la celebración misma como en el servicio a los enfermos. - Que el número de los designados sea suficiente para asegurar su presencia y participación en todas las Eucaristías dominicales, en las que sea necesaria su presencia. - Y que formen un verdadero equipo en el que se distribuyan sus incumbencias, para que no hagan falta, normalmente, otros ministros ocasionales. Es conveniente que los ministros laicos de la Comunión reciban una preparación adecuada antes de empezar a ejercer su ministerio.
10) Actitud exterior e interior del ministro extraordinario de la comunión Hay que ser consciente de que, distribuir la comunión a los hermanos de la comunidad y llevarla a los enfermos, es un servicio hermoso y significativo, que debería de llenar de alegría a quien ha sido llamado a realizarlo. Exteriormente no hace falta indicar, que cualquier ministerio litúrgico merece una compostura y una actitud digna. El ministerio de la Comunión todavía lo pide más. En el vestir en el momento de distribuir la comunión, el Ritual del Culto y otros documentos, dejan libertad sobre el uso del alba, o bien aparecer como laicos a la vista de la comunidad, lógicamente con un vestido digno y adecuado.
Pero lo verdaderamente importante es la actitud espiritual interior. Ante todo se pide a los ministros extraordinarios: - Respeto y aprecio a la Eucaristía: Es el momento central de la celebración, cuando Cristo se da a los suyos como alimento de vida eterna - Respeto y amor a la comunidad a la que sirven: Porque están ayudando a sus hermanos a que reciban al Señor en las mejores condiciones posible de celebración Hay que tener muy presente que este ministerio no es un privilegio para la persona, sino un servicio para bien de los demás. Es un ministerio, por tanto, que debe ir unido a una actitud de disponibilidad generosa.