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Érase una vez en el país de Nomeacuerdo, donde no había alegría y todo era gris. Un día apareció un cocinero, con el propósito de devolver la alegría a ese país. Busco detrás de la oreja de una niña que se llamaba Lucía, y saco una lucecita que echo en la olla mágica.
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Érase una vez en el país de Nomeacuerdo, donde no había alegría y todo era gris
Un día apareció un cocinero, con el propósito de devolver la alegría a ese país
Busco detrás de la oreja de una niña que se llamaba Lucía, y saco una lucecita que echo en la olla mágica Siguió echando cosas a la olla..un poquito de ilusión, media sonrisa, un cuarto de esperanza…
Mientras se hacía el guiso toco un violín también mágico que tenía luces amarillas, rojas, verdes y azules
Pero de pronto una niña que estaba en una silla de ruedas vio una luz blanca que salía del violín… y después otro niño… y otro… y otro más al fondo.. Hasta una niña ciega vio la luz blanca… … y el cocinero les dijo: “eso significa que vuestros sueños se van a cumplir”
Mientras se hacía el guiso, este cocinero se fue a un hospital, para alegrar a los niños que estaban enfermos Así cogió a los niños de la mano y les dijo que cerraran los ojos, porque les iba a contar su cuento favorito….
Al abrir lo ojos los niños ya no estaban en el Hospital…. ….Estaban en Praga, y allí les contó el cuento de El Golem Cuando termino de contar a los “bocasabiertas”… todos aplaudieron
Justo en ese momento se termino de hacer el guiso y al destapar la olla… .. Se lleno todo de una lluvia de colores..que devolvió la ilusión a ese país
Y este cocinero de cuentos, antes de irse de Nomeacuerdo, les dio a cada uno de los habitantes un regalo muy especial… Y una niña te entrego a cambio una mariquita para que le acompañara siempre
Y colorin colorado….. Este cuento del Cocinero de los Cuentos Se ha acabado…. Con mucho cariño…. Almudena