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Por favor no toques el ratón. Capítulo III. LUMEN FIDEI. La luz de la fe. TRANSMITO LO QUE HE RECIBIDO (cf. 1 Co 15,3). Quien se ha abierto al amor de Dios, ha escuchado su voz y ha recibido su luz, no puede retener este don para sí. Es una luz que se refleja de rostro en rostro.
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Capítulo III LUMEN FIDEI La luz de la fe
TRANSMITO LO QUE HE RECIBIDO (cf. 1 Co 15,3)
Quien se ha abierto al amor de Dios, ha escuchado su voz y ha recibido su luz, no puede retener este don para sí.
Es una luz que se refleja de rostro en rostro
La fe se transmite de persona a persona, como una llama enciende otra llama.
La fe se transmite de persona a persona, como una llama enciende otra llama.
La fe se transmite de persona a persona, como una llama enciende otra llama.
La fe se transmite de persona a persona, como una llama enciende otra llama.
Quien cree nunca está solo, porque la fe tiende a difundirse, a compartir su alegría con otros.
La Iglesia, como toda familia, transmite a sus hijos el contenido de su memoria.
Para transmitir esta riqueza hay un medio particular, que pone en juego a toda la persona, cuerpo, espíritu, interioridad y relaciones
En el bautismo el hombre recibe también una doctrina que profesar y una forma concreta de vivir, que implica a toda la persona y la pone en el camino del bien. Nadie se bautiza a sí mismo, igual que nadie nace por su cuenta. Hemos sido bautizados
La fe se vive dentro de la comunidad de la Iglesia, se inscribe en un « nosotros »comunitario.
La naturaleza sacramental de la fe alcanza su máxima expresión EN LA EUCARISTÍA la eucaristía es un acto de memoria.
Quien confiesa la fe, se ve implicado en la verdad que confiesa.
Otros dos elementos son esenciales en la transmisión fiel de la memoria de la Iglesia. El Padrenuestro y los diez mandamientos. El decálogo no es un conjunto de preceptos negativos, sino indicaciones concretas para salir del desierto del « yo » “Señor enséñanos a orar…” Lc 11,1
Confesando la misma fe, nos apoyamos sobre la misma roca.
Irradiamos una única luz, y tenemos una única mirada para penetrar la realidad.
Textos recogidos en: CARTA ENCÍCLICA LUMEN FIDEI DEL SUMO PONTÍFICE FRANCISCO A LOS OBISPOS A LOS PRESBÍTEROS Y A LOS DIÁCONOS A LAS PERSONAS CONSAGRADAS Y A TODOS LOS FIELES LAICOS SOBRE LA FE