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ENFRENTAR LAS INCERTIDUMBRES. “LOS DIOSES NOS DAN MUCHAS SORPRESAS: LO ESPERADO NO SE CUMPLE Y PARA LO INESPERADO UN DIOS ABRE LA PUERTA”. Eurípides. INCERTIDUMBRE HISTÓRICA.
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ENFRENTAR LAS INCERTIDUMBRES “LOS DIOSES NOS DAN MUCHAS SORPRESAS: LO ESPERADO NO SE CUMPLE Y PARA LO INESPERADO UN DIOS ABRE LA PUERTA”. Eurípides.
INCERTIDUMBRE HISTÓRICA. ¿Quién, en enero de 1999, hubiera soñado con los ataques aéreos sobre Serbia en marzo del mismo año, y quién, en el momento en que son escritas estas líneas, podría medir las consecuencias? Nadie puede responder a estas preguntas al momento de escribir estas líneas y tal vez permanezcan sin respuesta aún en el siglo XXI. Como decía Patocka: «El devenir es ahora cuestionado y lo será para siempre». El futuro se llama incertidumbre.
La historia avanza, no de manera frontal como un río, sino por desviaciones que proceden de innovaciones o creaciones internas, o de acontecimientos o accidentes externos.
Hay que aprender a enfrentar la incertidumbre puesto que vivimos una época cambiante donde los valores son ambivalentes, donde todo está ligado. Es por eso que la educación del futuro debe volver sobre las incertidumbres ligadas al conocimiento ya que existe:
La gran incertidumbre que hay que afrontar viene de lo que llamamos la ecología de la acción que comprende los siguientes principios: • El principio de incertidumbre proviene de la doble necesidad del riesgo y de la precaución. • El principio de incertidumbre del fin y de los medios. Como los medios y los fines inter-retro-actúan los unos con los otros, es casi inevitable que medios innobles al servicio de fines nobles los alteren y terminen por sustituirlos.
En la historia, hemos visto permanente y desafortunadamente que lo posible se vuelve imposible y podemos presentir que las más ricas posibilidades humanas siguen siendo imposibles de realizar. Pero también hemos visto que lo inesperado llega a ser posible y se realiza; hemos visto a menudo que lo improbable se realiza más que lo probable; sepamos, entonces, confiar en lo inesperado y trabajar para lo improbable.